Turkmenistán se gastará 1.300 millones de euros en construir una nueva ciudad: estas son las otras 10 ciudades de todo el mundo construidas de la nada

Inauguración de una central eléctrica en Turkmenistán
  • Turkmenistán se gastará 1.300 millones de euros en construir una nueva ciudad en la región que rodea su capital.
  • El presidente del país, Gurbanguly Berdymukhamedov, un autócrata conocido por sus excentricidades, quiere poner la ciudad en manos de su hijo y heredero.
  • Este proyecto sigue el ejemplo de estas 10 ciudades de todo el mundo construidas de la nada, algunas para ser las nuevas capitales de sus países y otras para albergar una población creciente o una actividad concreta.
  • Descubre más historias en Business Insider España.
Primero en Upday Cintillo

¿Cuánto cuesta levantar una ciudad de la nada? ¿Y si, además, hubiese que construirla en medio del desierto? Para el Gobierno de Turkmenistán, un proyecto de ese calibre será posible con un presupuesto de 1.500 millones de dólares (unos 1.370 millones de euros), tras desvelar sus planes para crear una nueva ciudad en pleno desierto de Karakum, el décimo más grande del mundo.

Como suele ser habitual en las repúblicas centroasiáticas surgidas del colapso de la Unión Soviética, el proyecto turkmeno para erigir una ciudad en medio del desierto está protagonizado por un presidente autoritario y megalómano, Gurbanguly Berdymukhamedov, uno de los 32 dictadores que siguen gobernando en la actualidad, según el Instituto Internacional para la Democracia y Asistencia Electoral.

Leer más: Estas son las ciudades más pobladas con mayor contaminación del mundo, según la OMS

Además, sobre el proyecto también planea la sombra del nepotismo, dado que la nueva ciudad se construirá en la región de Ahal, de la que es vicegobernador el hijo del presidente turkmeno, Serdar Berdymukhamedov. El vástago del mandatario, de 37 años, ya había ocupado el puesto de viceministro de Exteriores y ha sido recientemente nombrado ministro de Industria y Construcción.

Por el momento, poco se sabe del multimillonario proyecto para construir una nueva ciudad en el Karakum, de la que ni siquiera se ha desvelado cuál será su nombre. En principio, esta iniciativa busca crear una nueva capital para la región de Ahal, una zona desértica en la frontera con Irán y Afganistán que rodea a la capital del país, Asjabad, que esta situada en un oasis.

Móviles más vendidos en Amazon

Móviles más vendidos en Amazon

Aquí puedes ver cuáles son los móviles más vendidos ahora mismo en Amazon España: varios smartphones de Xiaomi dominan la lista por delante de modelos de Huawei, Samsung o Apple.

Ver listado

El presupuesto anunciado por el Gobierno turkmeno se dedicará a comprar "los equipamientos y materiales fabricados en el extranjero que serán necesarios para la construcción de la nueva ciudad", según un comunicado oficial que recoge Seattle Times. Este millonario plan urbanístico coincide con una ronda de recortes presupuestarios y de los subsidios energéticos que ofrecía este país a sus habitantes.

Leer más: Descubre estas 7 ciudades sumergidas bajo el agua que puedes visitar

Pese a lo peculiar de este proyecto, Turkmenistán no es el único país que se ha embarcado en los últimos tiempos en la construcción de una nueva ciudad. De hecho, Indonesia anunció en 2019 el emplazamiento de su nueva capital, mientras que Egipto ya ha comenzado la construcción de una ciudad que reemplace a El Cairo en pleno desierto, al igual que el proyecto de Turkmenistán.

Esas nuevas capitales se suman a la lista de 10 ciudades de todo el mundo que han sido construidas de la nada en tiempos recientes, que se enumeran a continuación ordenadas por la fecha en la que fueron inauguradas.

1913 – Canberra (Australia)

La capital de Australia, Canberra

La actual capital de Australia tiene su origen en un pique regional o, más concretamente, del compromiso entre Sidney y Melbourne para poner fin a su disputa por ser la ciudad más importante del país. Así, el terreno que hoy ocupa Canberra fue escogido en 1908 para la construcción de la nueva capital y los arquitectos estadounidense Walter Griffin y Marion Mahony fueron los encargados de su diseño urbanístico.

A pesar de que su construcción se vio paralizada por la I Guerra Mundial, y no finalizaría por completo hasta 1953, Canberra comenzaría a recibir habitantes de forma definitiva entre 1925 y 1930, cuando se inauguró el Parlamento Federal, pero su desarrollo no se completaría hasta 2 décadas después debido a las pérdidas que sufrió Australia durante la II Guerra Mundial.

1947 – Chandigarh (India)

El Jardín de Rocas, en la ciudad india de Chardigarh

Chandigarh es una de las pocas ciudades que no son capitales de su país que forma parte de esta lista. Sin embargo, sobran motivos para incluirla: su creación fue decretada por el presidente indio Jawaharal Nehru para demostrar al mundo el poderío de su país, ejerce como capital de 2 estados federados aunque no forma parte de ninguno de los 2 y su desarrollo es obra del arquitecto y urbanista francés Le Corbusier.

De hecho, esta ciudad de cerca de 1 millón de habitantes es el único proyecto de desarrollo urbanístico en el que participaría el arquitecto, que también construiría varios edificios, como la Corte Suprema, la Asamblea Legislativa, el Edificio del Secretariado o el Monumento a la Mano Abierta. Todo ello, en una ciudad que, además de ser una joya urbanística reconocida por la Unesco, ha sido elegida como la más feliz de India, según una encuesta de LG.

1960 – Brasilia (Brasil)

Brasilia, capital de Brasil

Brasilia es uno de los ejemplos más conocidos de ciudades planificadas y construidas durante el siglo XX. Sin embargo, el proyecto de construir una capital en el interior del vasto país sudamericano llevaba planteándose desde hace más de 2 siglos, en plena colonización portuguesa, mientras que el nombre de Brasilia se planteó en 1821, un año antes de que el país se independizase. 

Más que por su historia, Brasilia es conocido por el diseño del trío formado por el urbanista Lúcio Costa, el arquitecto Oscar Niemeyer y el paisajista Roberto Burle Marx, con la peculiaridad de que el mapa de la ciudad tiene forma de pájaro y que los edificios públicos, como el famoso Palacio de Planalto, están situados en torno al cruce del Eje Monumental, un remedo del National Mall de Washington (EEUU).

Leer más: 11 ciudades que China ha copiado del resto del mundo y te costará creer que son imitaciones

1966 – Islamabad (Pakistán)

El Monumento a las 4 Provincias de Pakistán, en Islamabad

Al igual que Canberra o Chandigarh, la capital de Pakistán tiene su origen en el proceso de independencia del país que, a su vez, supuso la separación del antiguo territorio colonial de la India en 2 estados diferenciados por motivos religiosos: Pakistán para los indios musulmanes e India para los hindúes, sijs, jainistas y baha'is.

La construcción de Islamabad, que se traducido del urdu significa ciudad del Islam, comenzó en 1959, después de ser seleccionada para reemplazar al puerto comercial de Karachi como capital del país. Las obras para los suministros básicos finalizarían en 1966, momento en el que el Gobierno pakistaní se trasladaría definitivamente a la nueva ciudad.

1991 – Abuja (Nigeria)

Sede del Banco Central de Nigeria en la capital del país, Abuja

Abuja, al igual que Canberra, es producto de un compromiso entre los distintos grupos étnicos y religiosos de Nigeria. Su localización se eligió teniendo en cuenta que está a medio camino entre el norte del país, mayoritariamente musulmán y de etnia hausa, y el sur, en el que predominan los pueblos igbo y yoruba de religión protestante y animista.

Una vez definida su orientación centrada, la ciudad de Abuja comenzó a construirse durante la crisis energética de 1970, en la que el país rentabilizó sus amplios recursos petrolíferos, aunque su desarrollo se vio paralizado por los distintos golpes de Estado, asonadas militares y conflictos sociales que vivió el país durante los años 80. Al final de las obras, en 1991, Abuja fue proclamada oficialmente la capital de Nigeria, sustituyendo a Lagos. 

1997 – Cyberjaya (Malasia)

Cyberjaya, a 25 kilómetros de la capital de Malasia, Kuala Lumpur

Mientras que Turkmenistán o Egipto construyen ciudades en pleno desierto, el primer ministro malasio Mahathir bin Mohamad decidió levantar el Silicon Valley de Malasia en mitad de la jungla. Concretamente, en los pantanos del Distrito de Sepang, a unos 25 kilómetros de la capital, Kuala Lumpur, y en paralelo a la que sería la nueva sede del Gobierno malasio, Putrajaya.

El proyecto para crear Cyberjaya parte de un estudio de la consultora McKinsey para la modernización de infraestructuras y fue inaugurado a bombo y platillo en mayo de 1997, aunque la crisis financiera asiática de ese año supuso la paralización de parte de la construcción. Actualmente, la ciudad alberga centros de datos, oficinas, universidades y sedes de empresas tecnológicas locales y extranjeras.

Leer más: Dubái construye una nueva ciudad basada en la sostenibilidad

1998 – Nur-Sultan (Kazajistán)

Nursultan, antes conocida como Astana, la capital de Kazajistán

El caso de la capital kazaja es diferente al del resto de grandes urbes planificadas, dado que no se construyó de la nada en el siglo XX, sino que la ciudad evolucionó a partir de un asentamiento cosaco fundado en 1830 con el nombre de Akmola. Tras la revolución rusa, el asentamiento cambió de nombre a Tselinogrado y fue creciendo poco a poco por su papel de enlace ferroviario durante la II Guerra Mundial.

Tras la independencia de Kazajistán, fue elegida en 1994 como futura capital y se inició la construcción de edificios emblemáticos, como las Torres Esmeralda, la sede de KazMunayGas o el Palacio de Conciertos. En 1998, fue rebautizada como Astana, que significa "ciudad capital" y en 2019, tras la retirada del presidente kazajo Nursultan Nazarbayev, la ciudad adoptó su nombre como reconocimiento.

2001 – Ordos (China)

La ciudad de Ordos, al norte de China

Ordos es una de las múltiples ciudades chinas que han surgido o se han rehecho completamente en las últimas 2 décadas y que, en la mayoría de los casos, permanecen deshabitadas. En el caso de Ordos, situada en la remota provincia china de Mongolia Interior, se construyeron viviendas para un millón de personas a finales de los años 90 para convertir una zona escasamente poblada en un nuevo centro económico.

El plan cuajó en 2001 con la constitución oficial de Ordos como ciudad, con la intención de que alcanzase en 2010 una población de 300.000 habitantes. Actualmente, según cifras oficiales chinas de 2017, está a punto de superar el medio millón de habitantes. Sin embargo, debido a los ambiciosos planes urbanísticos, varios de sus barrios, como el de Kangbashi, no tienen apenas población.

2005 – Naypyidaw (Myanmar)

Pagoda Uppatasanti en Naypyidaw, la capital de Myanmar

En 1989, la junta militar que gobernaba Birmania inició un plan para que el país regresase a sus orígenes. De este modo, cambiaron el nombre del país por Myanmar y comenzaron a elaborar planes para construir una nueva capital que reemplazase a Rangún, que se veía como un rescoldo del pasado colonial y como un riesgo de seguridad, dado que su situación costera facilitaba una eventual invasión foránea y un mayor impacto de desastres climáticos.

Para reemplazarla, la junta militar escogió unos terrenos de cultivo en pleno centro del país, en los que inició las obras para la nueva capital en 2000 bajo el máximo secretismo. En 2005, con la ciudad todavía a medio construir, se la bautizó como Naypyidaw, que significa ciudad de reyes. Sin embargo, como atestiguó la periodista de Business Insider España Christiane Drummond hace unos meses, la ciudad de reyes sigue estando medio vacía.

2019 – New Clark City (Filipinas)

Santuario Nacional de Capas, en New Clark City (Filipinas)

La última ciudad planificada de la lista, y también la más reciente, se encuentra en Filipinas. Como en el caso de Abuja, el motivo para construir New Clark se debe a la congestión que sufre la capital del país, Manila, lo que motivó que el Gobierno filipino anunciase en 2012 la construcción de una nueva ciudad ecológica del tamaño de Manhattan a unos 100 kilómetros de Manila.

En principio, la ciudad se denominó Green Clark City (ciudad verde de Clark, en castellano), dado que se construyó teniendo en cuenta criterios climáticos y de resiliencia a las catástrofes naturales, aunque la llegada al poder de Rodrigo Duterte en 2016 dio lugar a su nombre definitivo. New Clark City se inauguró en 2019, justo a tiempo para albergar los Juegos del Sudeste Asiático. En febrero de 2020, se convirtió en el área de cuarentena para los filipinos repatriados por riesgo de contagio de coronavirus, lo que generó protestas.

Descubre más sobre , autor/a de este artículo.

Conoce cómo trabajamos en Business Insider.