11 signos que indican que vas a ser rico, aunque no lo quieras

• Warren Buffett es una de las personas más ricas del mundo porque ahorró e invirtió, y no siguió los clásicos esquemas de hacerse rico rápidamente.
• La riqueza es alcanzable por todos aquellos con buenos hábitos financieros, y es posible que ya estés en el camino correcto.
• Gastar menos dinero del que se gana, ahorrar para la jubilación e invertir dinero son formas sencillas de hacerse rico.

Poseer bitcoins no garantizará una riqueza futura, pero sí lo harán las estrategias correctas de ahorro e inversión que lleves a cabo a lo largo de la vida.

Al menos según Warren Buffett, quien considera que la criptomoneda es uno de los clásicos esquemas de hacerse rico de manera rápida y fácil. Y que no suelen dar buen resultado. Aunque las posibilidades de hacerse con una fortuna de miles de millones de dólares como la de Buffet es poco probable, existen maneras sensatas de acumular riqueza sin tener que apostar a una burbuja.

Es difícil poner un número concreto de ceros a lo que puede entenderse como "riqueza" porque es personal y depende de muchos factores, incluso de dónde se vive. En general podría decirse que tener riqueza significa no tener que preocuparse por el pago de las facturas y aspirar a contar con una jubilación cómoda a una edad decente.

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Estos 11 indicadores son fáciles de seguir y ayudarán a generar fortuna. Incluso muchos de estos consejos van tomados de la mano, por lo que resultará más fácil aplicarlos todos además requieren poco esfuerzo por nuestra parte.

Si ya estás siguiendo algunos de ellos, ¡enhorabuena! Vas por el camino correcto para ser rico.

Comenzar a ahorrar para la jubilación desde el primer empleo

Para lograr cierta fortuna, una parte del salario, incluida la prima, debe ser reservado para el ahorro desde el primer momento en el que se empieza a trabajar.

La jubilación puede parecer lejana cuando se inicia la vida laboral, pero el camino será aún más largo si no te preparas para ello. Ahorrar lo antes posible genera intereses compuestos lo que puede suponer una gran diferencia a la larga.

Siempre realizar los pagos del préstamo a tiempo y en su totalidad

Ya sea un préstamo estudiantil o una hipoteca, sea cual sea el tipo de préstamos que debemos abonar,  lo mejor es hacer todos los pagos en su totalidad y a tiempo. Pagar menos y sobre todo, deber pagos de préstamo terminarán costando más a largo plazo.

Entre los mejores consejos para afrontar los préstamos, sobre todo si se trata de nuestros estudios,  advertir que no es conveniente esperar hasta el final del periodo de gracia para comenzar a asumir nuestra deuda.

Tampoco es adecuado permitirnos saltarnos pagos. Porque esto podría llevarnos a acumular deudas a la larga. La manera más exitosa de asumir un préstamos es trazar una estrategia de pago que nos lleve a mantenernos al día y sobre todo a abonarlo cuanto antes.

Buscar ofertas y ahorrar dinero

El hecho de podamos darnos el lujo de comprar en supermercados de gama más elevada no significa que debamos hacerlo en todo momento, especialmente si deseamos terminar siendo ricos.

A nivel doméstico, cada hogar español ha gastado un promedio de 4.190 euros anuales en sus compras de alimentación, droguería y perfumería durante el pasado año, según el informe “Balance de la Distribución y el Gran Consumo 2017” presentado por la consultora Kantar Worldpanel.  Junto a la hipoteca, y el coche, es evidente que el gasto de la cesta del supermercado es un fijo mensual que comerá gran parte de nuestro salario.

Arañar en nuestra compra mensual para poder reducir los gastos que conlleva esta es una manera de contribuir al ahorro. Acudir a marcas más económicas o incluso hacer uso de cupones y ofertas aunque pensemos que no es necesario con nuestra economía es una manera de reducir este presupuesto y engrosar nuestras finanzas.

Estar financieramente preparado para emergencias

La vida está llena de sorpresas inesperadas, y a veces lo inesperado puede resultar costoso. Por eso resulta crucial estar preparados para posibles gastos imprevistos de elevada cuantía a través de un fondo destinado para emergencias.

Si bien la sabiduría convencional habla de ahorrar la cantidad suficiente de dinero para cubrirnos durante al menos tres meses sin ingresos estables, cuanto más ahorremos, más libertad y seguridad tendremos en caso de que llegue esa emergencia imprevista.

Destinar una pequeña parte de nuestros ahorros a este fondo destinado a imprevistos puede parecer una manera excesiva de reducir nuestro capital disponible mensualmente, pero si llega el día en el que sufrimos un despido o un incidente que requiere un desembolso económico elevado, nuestras preocupaciones serán menores. Y si no llega, piensa que además serás doblemente feliz porque contarás con todo ese dinero ahorrado.

Evitar gastar el dinero extra

Si su empresa otorga bonos o primas y lo primero que pensamos es en qué lo vamos a gastar, un viaje, una cena cara o algún otro capricho que regalarnos, puede que no lo estemos haciendo muy bien a la hora de alcanzar la riqueza.

Si bien este ingreso adicional puede parecer dinero regalado que ha llegado a nosotros, debe ser considerado como dinero ganado.

Gastarlo en pequeñas dosis sobre nosotros mismos a modo de discretos caprichos, podría estar bien, pero también tiene sentido hacer algo productivo con esta afluencia de efectivo extra, como agregar a nuestra cartera de inversiones o pagar deudas.

Todo gesto que busque favorecer el ahorro y con ello engrosar nuestra cuenta es la manera correcta de aproximarnos a la riqueza.

Contribuir más de lo preestablecido a la jubilación

Los planes de pensiones en España no ha sido algo que contara con demasiada fama entre los españoles. Y es que hasta el momento podría decirse que la Seguridad Social ha funcionado bien. Con los pensionistas en pie de guerra y un sistema de pensiones de dudoso futuro, es más que conveniente ponerse a pensar en la jubilación cuanto antes.

Contar con un complemento en el futuro que ayude a aumentar nuestra pensión es sinónimo de un retiro tranquilo y digno. Además si optamos por un plan de pensiones podremos reducir cierta cantidad en nuestra declaración de la renta, aunque estas fórmulas de ahorro también tienen su cara negativa.

Sea cual sea la fórmula de ahorro que escojamos pensada para afrontar la jubilación, puede resultar conveniente destinar todo lo que sea posible a este fondo. Quizá cuando pensamos en nuestra vejez está tan lejana que destinar 100 euros mensuales a ella puede resultar más que suficiente. Si nuestro bolsillo nos lo permite, quizá ampliar a 200 o 300 podría ser la manera más adecuada de contar con una buena fortuna en el futuro. Piensa que este terminará por llegar.

Tener todo lo que necesitamos, pero no todo lo que queremos

Vivir por debajo de nuestras posibilidades es un buen indicador de responsabilidad financiera. Y sobre todo un signo indicador de que siempre contaremos con ahorros en nuestras cuentas bancarias, paso fundamental para conseguir cierta riqueza.

Cuando se vive en este estado de cierto ahorro permanente, lo que hacemos es que tendemos a cubrir todas las necesidades básicas, pero a controlar el despilfarro. Podemos darnos el capricho de hacernos con productos de lujo adicionales de vez en cuando, pero se es capaz de resistir la tentación de gastar a voluntad.

Esto significa que nuestras finanzas se verán favorecidas a través de una gestión económica responsable, aunque tengamos que renunciar a estrenar ese último gadget de moda que podría estar bien tener.

Disfrutar de promociones y aumentos

Tener un trabajo estable y un salario es bueno, pero es aún mejor cuando se nos recompensa por un trabajo duro y bien hecho. Una buena carrera puede convertirse rápidamente en un trabajo sin futuro si el salario ni siquiera se mantiene al ritmo de la inflación.

Asegurarse de obtener el aumento periódico que se merece es uno de los elementos básicos de todo empleo digno. Puede ser tan simple como preguntar a superiores.

Si esto no sucede, y parece probable que aunque se desarrolle un buen trabajo y el tiempo pase las posibilidades de aumentos, promociones o compensaciones son escasas o inexistentes, el consejo es ponerse manos a la obra para poder cambiar de empresa cuanto antes.

De lo contrario, no solo es muy probable que no consigamos ser ricos, es posible que incluso nuestro nivel adquisitivo empeore con el tiempo.

No gastar mucho en vivienda

Warren Buffett es una de las personas más ricas del mundo, pero vive en una casa que compró en 1958 por 31.500 dólares. Sobre esto el millonario le comentaba a la BBC: "Estoy feliz allí. Me mudaría si pensara que estaría más feliz en otro lugar".

Buffett, como todos nosotros, no necesita una mansión cara para ser feliz y su modesta casa le ha permitido gastar sus finanzas en cosas que valora más. Si gastamos menos del 30% recomendado de nuestros ingresos en gastos de vivienda, estamos en el buen camino.

En nuestro país, según datos del INE, durante 2016 la partida “Vivienda, agua, electricidad, gas y otros combustibles” alcanzó un gasto medio del 31,0 % del presupuesto total del hogar español medio, lo que supone un total de 8.706 euros, con una tasa de variación anual del 1,3 %.

Con el precio de la vivienda al alza y los alquileres disparados en muchas de las principales ciudades del país, este es quizá uno de los puntos más complicados a la hora de engrosar nuestras riquezas.

Contar con una cartera de inversiones agresiva  y diversificada

Las mejores inversiones que se pueden hacer a largo plazo son de bajo coste, diversificadas y agresivas.

No queremos gastar dinero lanzándolo a gastos innecesarios o poniendo todos los huevos en una sola canasta y que ocurra lo peor. También es importante contar con la combinación correcta entre acciones y bonos según nuestra edad y sobre todo la cantidad de riesgo que se pueda asumir.

Aunque cabe resaltar que la peor inversión que se puede realizar a largo plazo es no tener inversión.

No tener deudas con la tarjeta de crédito

La deuda de las tarjetas de crédito es una barrera enorme para generar riqueza y una forma de financiación cada vez más habitual para un elevado número de españoles.

El aplazamiento de los pagos generados por las tarjetas de crédito han hecho que el pasado año los hogares españoles contaran con 11.878 millones de euros como financiación adicional, según datos del Banco de España. Lo que supone un 22% de la población española, según y según el 'IV Estudio de Comparación Online hacia el Ahorro Inteligente', realizado por Rastreator.com,

La deuda puede ser una carga financiera gigante y disminuir nuestro puntaje crediticio, restringiendo las oportunidades financieras de las que podamos disponer, como convertirnos en propietarios de una casa.

Lo mejor es evitar las deudas de tarjetas de crédito en general, pero si nos encontramos ya en ello, lo mejor es ponerse cuanto antes a finiquitar dicha deuda. Una vez finalizada lo conveniente es controlar nuestro gasto para no volver a asumir préstamos con el banco.