12 productos viejos que no debes tirar porque son 'vintage' y valen dinero: vinilos, cámaras de fotos o máquinas de escribir

El verano significa disponer de más tiempo libre, un tiempo que se puede dedicar al ocio, como a resolver un pasatiempo con la familia o a irnos de vacaciones, pero también se puede emplear en cosas que no se pueden hacer cuando se está inmerso en la rutina del día a día, como son las limpiezas en profundidad. 

En esas limpiezas se suele dedicar un tiempo a ordenar la casa y a desechar aquellos productos que ya no se utilizan o que llevan olvidados en el trastero muchísimo tiempo y que no se sabe ni por qué se guardaron en primer lugar. 

Sin embargo, debes tener cuidado con los objetos que tiras al hacer limpieza, ya que sin saberlo podrías estar tirando productos que valen miles o incluso millones de euros. 

La cultura de lo vintage hace que productos que consideras viejos o anticuados puedan llegar a valer mucho dinero. Cuando piensas en vintage te vienen a la cabeza los mayores exponentes de esta tendencia como la ropa o los muebles, pero hay mucho más allá. 

Por este motivo, Business Insider España ha recopilado 12 artículos que no deberías tirar a la basura haciendo limpieza este verano porque podrías ganar mucho dinero vendiéndolos de segunda mano. 

1. Discos de vinilo

Los vinilos son uno de los bienes que más se ha revalorizado. El año pasado las cifras de ventas de este formato alcanzaron su nivel más alto de los últimos 30 años, lo que ha hecho que muchos artistas vuelvan a editar sus álbumes en este tipo de discos. 

Puede ser perfectamente una de esas cosas que encontramos en una caja cubierta de polvo, pero que hay que tener cuidado antes de tirar, porque algunos —los más cotizados en España— pueden llegar a costar cientos de euros. Es el caso, por ejemplo, del vinilo de Eduardo Bort por el que se han llegado a pagar 1.400 euros. 

2. Teléfonos 

Los teléfonos antiguos, denominados "de baquelita", se suele encontrar en los trasteros de casa de los abuelos, aunque también pueden aparecer haciendo limpieza, olvidados en algún rincón de un sótano o una boardilla. 

Pese a ser auténticas reliquias que a veces no tienen otro valor que no sea el de decorar una estancia, se suelen vender de segunda mano en portales como Milanuncios por precios que van de los 40 a los 200 euros. 

3. Cintas VHS

Es probable que en tu casa o en casa de tus padres todavía haya una estantería o un armario con un montón de cintas de vídeo antiguas. No es el primer lugar por el que decides empezar tu limpieza en verano, pero por si acaso estás pensando en tirarlas para despejar el mueble, te recomendamos que lo reconsideres. 

Algunas de estas cintas se han llegado a vender —en 2022— por casi 8.000 euros. Estos ejemplares han sido algunos originales de Indiana Jones y el templo maldito, Star Wars: una nueva esperanza, Top gun, Rocky, Tiburón o Los Cazafantasmas. No es fácil que tus cintas reúnan las características porque suele tratarse de ediciones especiales o primeras ediciones, pero quién sabe.

4. Porcelana

No suele ser normal encontrarse con una vajilla completa de porcelana antigua cuando se está haciendo limpieza en época estival, pero sí que puede ocurrir que se dé con algún jarrón antiguo o alguna muñeca con pinta diabólica que den ganas de tirarla nada más verla. 

Sin embargo, hay que contener ese impulso, ya que podríamos estar desechando cientos de euros. De nuevo, con una rápida búsqueda en un portal de segunda mano como Wallapop vemos que el precio estas muñecas puede oscilar entre los 20 euros de las más modestas a los casi 400 de las más cotizadas. 

5. Cartas Magic

Puede que hace unos años te pasases las tardes jugando a las Magic con los amigos, pero lo fueses dejando poco a poco hasta el punto de que las guardases en un cajón y te olvidases de ellas. 

Aunque el mercado se haya estabilizado un poco tras un boom que recordaba al del inicio de las criptomonedas, en la actualidad se sigue pagando mucho dinero, tanto por cartas cotizadas como por mazos completos. Un rápido vistazo por eBay nos permite observar que los precios oscilan entre los más de 1.000 euros de algunas cartas a los casi 6.500 de un lote completo. 

6. Monedas 

La numismática —o la acción de coleccionar monedas y objetos relacionados— es una de esas aficiones que nunca pasa de moda entre los coleccionistas. Prueba de ello es que algunos billetes de peseta pueden llegar a costar hasta 2.500 euros a día de hoy. 

Así que, ya sabes, si encuentras una caja con monedas antiguas encima del armario cuando estés haciendo limpieza, no te deshagas de ella, ya que podrías estar tirando miles de euros a la basura.

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7. Videojuegos

Uno de los objetos con los que más se tiende a especular es con los videojuegos antiguos. La mezcla de nostalgia y arqueología cultural hace que estos ejemplares se revalorizan a pasos agigantados y puedan llegar a costar auténticas millonadas en el mercado de segunda mano. 

Un ejemplo fue el Super Mario Bros. original por el que el año pasado se llegaron a pagar 1,7 millones de euros. El motivo de tan alto precio fue que la copia del juego se encontraba sin abrir y en unas condiciones casi perfectas. No es fácil que se te olvidase abrir un juego cuando eras pequeño, pero quién sabe, podrías estar guardando una fortuna en el armario. 

8. Cámara de fotos

De manera similar a lo que ha ocurrido con los vinilos, las cámaras de fotos antiguas se han revalorizado porque ofrecen otra forma de disfrutar de la fotografía en la época del selfi instantáneo y la cámara integrada en el teléfono móvil. 

Las más demandadas suelen ser las Polaroid, con un precio que va de los 50 a los 300 euros, pero también se buscan réflex antiguas que permitan experimentar esa sensación de fotografiar como se hacía antaño. 

9. Tarros de perfume

Volviendo a lo puramente ornamental, los frascos de perfume son un objeto que en su momento era muy común de ver en las casas, pero que con el paso del tiempo se guardó envuelto en papel de burbujas con el intención de no volverse a sacar. Haciendo limpieza podría ocurrir que esa caja apareciese y que no se sepa ni para qué servían estos frascos. 

Antes de pensar en tirarlos hay que valorar las distintas opciones, por un lado, se pueden usar como envases recargables (cada vez más de actualidad por ir en contra de los envases de un solo uso); por otro, se pueden intentar vender por precios que pueden llegar a los 500 euros de esta colección de frascos de perfume Avon. 

10. Máquinas de escribir

De nuevo en busca de la experiencia vintage: las máquinas de escribir están volviendo. Ya sea de forma metafórica con la búsqueda de la comodidad para teclear que prometen los teclados mecánicos o de forma real con la demanda de máquinas de segunda mano, lo cierto es que este producto parece no terminar de marcharse. 

En la actualidad, esa máquina que tienes metida en una funda cogiendo polvo en tu trastero podría valer una auténtica fortuna, ya que algunas sobrepasan los 1.000 euros. 

11. Furby

Estos juguetes —sorprendentemente— fueron el regalo estrella de muchos niños en la década de los 90. Sin embargo, pudo ocurrir que cuando te lo regalaron te diese tanto miedo que no lo llegases ni a abrir y tus padres lo tuviesen que encerrar con llave en un armario, si es así estás de suerte. 

Aunque los más baratos no superan los 10 euros en el mercado de segunda mano, algunos originales de 1998 se venden por casi 400. 

12. Revistas

Otra de esas cosas que se suelen guardar en el trastero porque da pena tirarlas son las colecciones de revistas antiguas. Pueden darse casos en los que esas revistas se han adquirido religiosamente durante años y se ha formado una auténtica colección que podría valer un buen dinero. 

Antes de considerar tirarlas al reciclaje, merece la pena consultar cuánto pueden valer, ya que, por ejemplo, una colección de National Geographic de más de 40 años supera los 2.000 euros.