El economista que predijo la crisis económica de 2008 pronostica otra recesión en 3 o 5 años y que las criptomonedas desaparecerán
Reuters
- Le llamaron pesimista cuando vaticinó la crisis económica de 2008. Y acertó. Entonces comenzaron a llamarle 'Doctor Catástrofe'. Ahora anticipa una nueva crisis mundial y el fin de las criptomonedas.
- La inflación ya está aquí, durará años, y después llegará una crisis de deuda estanflacionaria, asegura Nouriel Roubini.
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Cuando pronosticó la crisis económica de 2008 le tacharon de pesimista. Al comprobar que había acertado, se ganó el apodo de 'Dr. Doom' (Doctor Catástrofe). Su voz es de las que se escucha con interés y miedo. En esta entrevista en Forbes desvela sus nuevos vaticinios y no son halagüeños, puesto que prevé otra crisis en un plazo de 3 a 5 años. Tampoco tiene buenas noticias para los amantes de las criptomonedas.
Nacido en Estambul en 1958, Nouriel Roubini es el fundador y director de Roubini Global Economics, una firma independiente centrada en la investigación sobre estrategias globales macroeconómicas, cuya web ha sido reconocida como una de las mejores fuentes de información económica por medios como BusinessWeek, Forbes, The Wall Street Journal y The Economist.
Es, como ha demostrado, un experto en predecir cuándo y por qué ocurren las crisis económicas. De hecho, fue nombrado por Fortune como uno de los "10 nuevos gurús”. Además, es profesor de economía en la Escuela de Negocios de la Universidad Stern de Nueva York.
La próxima crisis económica
Roubini explica cuáles son las principales diferencias entre la crisis del coronavirus y la crisis financiera mundial.
En primer lugar, apunta, la pandemia provocó una desaceleración del crecimiento económica, a la vez, en todo el mundo; mientras que, en 2008, todo se inició con la crisis hipotecaria de Estados Unidos y, posteriormente, se extendió.
Además, la crisis de 2008 generó caída de la demanda, del crédito y una deflación; pero esta vez los gobiernos han usado instrumentos crediticios y financieros para estimular la economía.
A la vez, explicó en la entrevista, ha aparecido la inflación por las interrupciones en las cadenas de suministro.
Esta tendencia, en su opinión (y a diferencia de lo que plantean otros analistas), será duradera. Afirma Roubini que hay razones estructurales para barruntar el aumento de la inflación, y es algo que ya se ve en Estados Unidos, Europa, Rusia, Turquía o los mercados emergentes. Este es el comienzo de una inflación global que durará varios años, sostiene.
La inflación ya está aquí, comenta el economista, y a eso hay que sumar “la desaceleración del crecimiento por la escasez de suministro, la desglobalización, el colapso de las cadenas de suministro mundiales, el envejecimiento de la población, las restricciones a la migración de sur a norte y de países pobres a ricos, y el deterioro de las relaciones entre China y los Estados Unidos”.
Por si fuera poco, continúa, el calentamiento global aumenta el costo de producción y las guerras cibernéticas obligan a aumentar costos para defenderse. Con todos estos ingredientes, anticipa, lo que llegará será una crisis de deuda estanflacionaria dentro de 3 a 5 años.
“Las criptomonedas desaparecerán en 5 o 10 años”
En sus palabras, el primer error es llamarlas monedas. No hay nada que valorar en bitcoin o ether, señala.
Ejemplifica sus muy negativos augurios con el hecho de que, en sus palabras, “el experimento de El Salvado fracasó estrepitosamente. ¿Por qué un vendedor debería aceptar como pago algo que puede bajar el precio en un 20% al día siguiente y reducir completamente el margen? El instrumento de pago debe ser estable”.
No sólo predice crisis económicas, sino que también se atreve a barruntar que, muy pronto, otros países seguirán el camino de China endureciendo la regulación de las criptodivisas y, afirma, tan pronto como los bancos centrales emitan sus divisas digitales, las criptomonedas desaparecerán por ser innecesarias en 5 o 10 años.
Las criptodivisas, apunta, son una inversión de alto riesgo, ya que un día pueden subir un 20 % y bajar lo mismo al siguiente. Pero, exclama, si quieres jugar en un casino, ve a Las Vegas, “las criptomonedas no son una inversión”.
Afirma que de las alrededor de 10.000 criptodivisas que hay, el 80% se creó como parte de ICO fraudulentas.
En la actualidad, detalla, el 95% de los bitcoins se encuentran en el 2% de todas las billeteras electrónicas: son las llamadas ballenas. Personas que se volvieron súper ricas, “al menos en papel, y todos los demás son solo peones que los ayudan a enriquecerse comprando criptomonedas en su apogeo”.
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