3 sorprendentes pruebas de que los humanos continúan evolucionando

  • La evolución le ha otorgado a la especie humana un cerebro poderoso, pies versátiles y pulgares prensiles. Pero aún no ha acabado con el homo sapiens.
  • Desde beber y digerir la leche, hasta la defensa de determinadas enfermedades esto no es más que una pequeña muestra de ciertos rasgos que hemos ido desarrollando y que nos ayudan a sobrevivir y prosperar en un mundo cambiante.
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Esta es la transcripción del vídeo.

A simple vista, puede parecer que no hemos cambiado mucho desde la aparición de nuestros primeros ancestros. Pero, si te fijas más de cerca, descubrirás que los seres humanos siguen evolucionando de nuevas y fascinantes formas.

Aguantar la respiración

La mayoría de las personas pueden aguantar la respiración durante 30 segundos. Pero los Bajau, una tribu del sudeste asiático, pueden aguantar hasta 12 minutos. Lo que resulta muy útil cuando bucean en apnea a más de 90 metros de profundidad en busca de comida.

Parte de la explicación a este fenómeno está en el entrenamiento y la experiencia, ya que pasan más de la mitad de su día de trabajo bajo el agua, pero resulta que los Bajau también tienen una mutación en sus genes que hace que su bazo sea un 50% más grande que la media. El bazo es el órgano que filtra y almacena los glóbulos rojos ricos en oxígeno. Entonces, cuando los Bajau se sumergen bajo el agua, su enorme bazo se contrae, lo que aumenta los niveles de oxígeno en la sangre hasta un 10%, permitiéndoles más tiempo para hacer acopio de comida. Se trata de una práctica adaptación que probablemente se debe a que han vivido en barcos durante los últimos 1.000 años.

Beber leche

Alrededor del 35% de la población mundial tiene el equivalente a un superpoder genético: pueden digerir la leche cuando son adultos. ¿No es impresionante? Pues ten en cuenta esto: los humanos son los únicos mamíferos del planeta con esta gran capacidad. Gracias a una mutación genética que surgió en Europa hace unos 5.000 o 10.000 años. Los que tienen esta mutación producen lactasa durante toda su vida. Es la enzima que descompone los azúcares de la leche para facilitar la digestión. Todos los demás mamíferos, y también los humanos, dejan de producirla después de la infancia.

Los humanos son de los pocos animales que no tienen cola: esta es la razón

Pero una vez que esos pocos afortunados europeos pudieron beber leche ya en la edad adulta, eso se transformó en nutrición extra y, en último lugar, en una vida más sana y larga para poder transmitir su superpoder a las siguientes generaciones. Hoy en día, aproximadamente el 95% de los norteuropeos tienen esta mutación.

Evitar enfermedades

Se calcula que el cuerpo humano tiene entre 20.000 y 30.000 genes. Y, mientras algunas mutaciones pueden cambiar el bazo y la dieta, otras pueden proteger a la especie humana contra enfermedades mortales, como el sida.

Casi el 50% de las mujeres de algunas zonas de Sudáfrica tienen el VIH. Pero los investigadores descubrieron que algunas muestran una mayor resistencia al virus: tarda más tiempo en desarrollarlo o, en ocasiones, no llegan a contraerlo. Resulta que estas mujeres también comparten una mutación en un gen llamado HLA-B27, del que carecen las demás mujeres del mundo.

¿Quiere decir eso que vamos a evolucionar hacia una inmunidad completa al VIH? Es demasiado pronto para afirmarlo. Pero una cosa está clara: en nuestro caso, la evolución aún no ha terminado.

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