Amazon y los reembolsos: las 4 formas en las que puede el último pedido online que has devuelto

El modelo de negocio de Amazon basado en el comercio en línea ha servido a la compañía estadounidense para lograr unos resultados económicos boyantes en los últimos años. Pero con el crecimiento de la ventas en línea, aumentan también las devoluciones. ¿Cómo gestiona los productos devueltos por los consumidores?

Según un estudio de National Retail Federation y Appriss Retail, los vendedores de productos en línea esperan que los usuarios devuelvan un 16,6% de los productos que compran, según datos relativos al año pasado, frente al 10,6% de 2020.

La compañía estadounidense sigue una estrategia con los productos devueltos por los usuarios que contempla 4 posibilidades diferentes para ellos, según ha informado la cadena CNBC.

La primera de ellas y la más extrema, según fuentes de la empresa, es la "reconversión en energía". Se aplica para los casos en que, por motivos higiénicos o defectos severos, no existe otra forma que deshacerse del producto, y para cuando tampoco es posible reciclarlo en su totalidad o en parte.

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En lugar de utilizar vertederos, Amazon apuesta por quemar los productos para producir calor y con ello elaborar energía. La compañía trabaja para lograr cero residuos en los productos que vende, aunque de momento no ha fijado una fecha para la consecución de este objetivo.

Lo más común es que los productos que Amazon recibe de vuelta en forma de reembolsos pueda tener una segunda vida, como asegura la empresa. Y, en este caso, existen 3 opciones principales.

La primera es también la más frecuente, y pasa por que el producto se venda de nuevo. En estos casos, puede comercializarse de nuevo como nuevo o de segunda mano, según el estado en el que la empresa tanto el producto como su embalaje.

El segundo caso pasa por devolver el producto al vendedor o a la empresa que se lo ha suministrado a Amazon. En ese caso, es la empresa la que decide la segunda vida que recibe lo devuelto. En otros casos, aunque el cliente recibe el reembolso del dinero, Amazon le deja quedarse con el producto si el envío no le compensa los gastos, en cuyo caso pasa a depender del usuario.

Y, por último, la tercera opción que se contempla para dar una segunda vida a los productos devueltos a Amazon es la donación. La compañía colabora con organizaciones sin ánimo de lucro, como Good360 en Estados Unidos, para distribuir los productos en una red de 100.000 puntos de donación del país norteamericano.

Esta noticia se produce en un contexto en que los últimos resultados económicos presentados por Amazon, que corresponden al cuarto trimestre de 2021, la empresa estadounidense logró hacerse con un beneficio neto un 56% superior al del año anterior. Se trata de uno de los mejores datos entre los gigantes tecnológicos.