4 señales físicas que indican que necesitas comer más carbohidratos

Los carbohidratos son uno de los tres macronutrientes, junto con las grasas y las proteínas, que componen todos los alimentos. Se encuentran en diversas fuentes, desde la pasta o el pan hasta la avena y los plátanos.

A menudo se piensa que eliminar o reducir los hidratos es una forma de perder peso. Pero no solo es un mito, sino que puede dañar tu salud.

Limitar el consumo de alimentos altamente procesados

como bollería y patatas fritas suele ser beneficioso. Pero no hay una buena razón para sacar los carbohidratos de tu alimentación, según cuenta a Business Insider la nutricionista Nichola Ludlam-Raine.

Los requisitos dietéticos varían de persona a persona, pero las pautas dietéticas recomiendan que la mitad de tu plato incluya frutas y verduras, que generalmente se componen principalmente de carbohidratos.

El doctor Mark Hyman comentó anteriormente que los hidratos deberían representar hasta el 75% de la ingesta total de alimentos por volumen de una persona promedio. Recomendó obtenerlos  de vegetales y frutas en lugar de fuentes azucaradas o refinadas.

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Lily Soutter, nutricionista certificada, también explicó previamente que "los carbohidratos son una fuente primaria de combustible que le da a los músculos y cerebro la energía que necesita para moverse y pensar".

Ludlam-Raine afirma que ciertos signos físicos pueden mostrar que no estás comiendo suficientes carbohidratos. Lo que incluye fatiga, niebla mental y dificultades para recuperarse después del ejercicio

"Las dietas bajas en hidratos han sido populares durante varios años, incluso décadas, pero reducir su ingesta puede tener un precio", asegura.

4 señales de que no estás comiendo suficientes hidratos

1. Falta de energía

Los carbohidratos son la principal fuente de combustible del cuerpo, por lo que si reduces significativamente su consumo, es probable que también notes una disminución de tus niveles de energía, señala Ludlam-Raine.

"Nuestro cuerpo puede usar otras fuentes de combustible (como la grasa), aunque los carbohidratos pueden proporcionar un aporte de energía más rápido para permitirnos funcionar de manera óptima, tanto cognitiva como físicamente".

2. Niebla mental

El cerebro requiere glucosa, que se descompone de los hidratos, para funcionar de manera adecuada. Entonces, cuando no has consumido suficientes puedes encontrarte de mal humor y tener dificultades para concentrarte, explica la nutricionista.

"Consumir hidratos junto con proteínas ayuda en la producción de triptófano, que luego se convierte en serotonina, también conocida como la hormona de la felicidad", dice.

Ludlam-Raine recomienda obtener los hidratos principalmente de granos integrales, frutas y verduras, ya que estos proporcionan fibra y nutrientes esenciales para favorecer la salud general y el bienestar mental.

3. Peor rendimiento en los entrenamientos

El cuerpo almacena hidratos como glucógeno en el hígado y los músculos. Este se usa para obtener energía y, por lo tanto, es beneficioso para el ejercicio, ya sea correr, montar en bici o hacer ejercicio en el gimnasio.

Mike Molloy, un entrenador de nutrición deportiva, ya señaló que comer suficientes hidratos es particularmente importante para las personas que realizan entrenamientos de alta intensidad como el entrenamiento de intervalos de alta intensidad, HIIT o CrossFit.

Molloy dijo que si no has consumido suficientes hidratos, tu rendimiento tocará techo y puedes sufrir pérdida de masa muscular y "gripe del ejercicio", algo "bastante desagradable" donde te siented fuera de sí, te duele el cuerpo,e la cabeza y solo quieres tirarte en el suelo.

4. Mayor dificultad para recuperarte tras el ejercicio

Los hidratos no solo son beneficiosos para favorecer el rendimiento en el ejercicio, sino que también ayudan a recuperarse de los entrenamientos.

"Después de hacer ejercicio, nuestro cuerpo necesita reponer sus reservas de glucógeno que se han agotado durante un entrenamiento y, por lo tanto, se recomienda consumir carbohidratos junto con proteínas para apoyar la recuperación y poder sentirte mejor antes de tu próximo entrenamiento", puntualiza la nutricionista.

Si tu cuerpo no se recupera de manera eficiente, es posible que experimentes dolor muscular durante más tiempo después de entrenar, tengas menos energía la próxima vez que vayas al gimnasio y avances más lentamente.