5 consejos que debes tener en cuenta para invertir en la década de los 30

El concepto de ahorrar es algo que se debe tener siempre presente para tener unas finanzas sostenibles, pero más aún cuando te encuentras en la década de los 30 y tienes margen para apartar dinero de cara a tu jubilación.

La filosofía del ahorro debe hacerse tan pronto como sea posible, aunque ha de ser imprescindible cuando encaras ese tramo entre los 30-40 años. Es fundamental para nutrir un futuro de éxito. Por eso, es necesario saber qué se puede hacer para conseguir esos objetivos financieros que te has marcado.

Hay algunas ideas que pueden ser interesantes al respecto: desde automatizar el ahorro, recortar gastos innecesarios, no gastar más de lo que se ingresa, hasta utilizar aplicaciones móviles que pueden ayudarte a manejar tu economía doméstica. Todo ayuda para que las metas de largo plazo sean alcanzables. 

En este sentido, existe una estrategia que es necesaria y que nunca debes pasar por alto: invertir. Con ello, evitas que el efecto de la inflación pese sobre tus cuentas en el futuro y puedes conseguir sacar rendimientos a tus ahorros.

No obstante, muchas personas tienen dudas de cómo se puede invertir cuando se han cumplido los 30 años. ¿Hay algunas recomendaciones que tienes que tener en cuenta? Coge y apunta. 

¿Cuánto aportar?

Una de las principales dudas está relacionada en cuánto dinero de tu sueldo debes destinar a la inversión para asegurar tu futuro financiero. En esta línea, desde The Balance se sugiere entre un 10% y un 15% de tu salario es la cantidad perfecta. 

Invertir de más puede comprometer el estado de tus finanzas personales, mientras que si dedicas menos de lo debido el impacto también puede ser inferior. De ahí a esa recomendación base.

Comprar una casa puede ser una buena inversión de futuro

En la segunda etapa de la adultez hay una mayor intensidad. De hecho, es una década en la que muchas personas logran estabilidad profesional, se independizan, y necesitan adquirir una vivienda. Por eso, una de las prioridades que destacan los expertos es que la primera inversión pueda ser orientada a los inmuebles. 

Eso sí, no hay nada de malo en comprar casa, pero hacerlo sin un plan e hipotecándose para los próximos 35 años puede ser un hándicap. Hay que observar con mucho detenimiento el mercado para ver las oportunidades que existen. En la mayoría de los casos, se trata de la decisión de mayor trascendencia financiera de la vida. Por eso, es conveniente elegir cuidadosamente la propiedad, el banco y el préstamo. Es un activo de futuro. 

Por otro lado, a los 30 años, invertir en bienes raíces es una alternativa interesante. Necesitas aprender a evaluar las propiedades, navegar por la financiación, buscar inquilinos y calcular flujos de caja. Una vez que sepa cómo hacer todo esto, puedes pasarle tus tareas a un gestor inmobiliario y pasar a lo siguiente.

Abrir un plan de pensiones

Con los últimos Presupuestos Generales del Estado la deducción para los planes de pensiones individuales bajó de 8.000 a 2.000 euros. Eso sí, el límite conjunto para aportar a un plan individual y a uno de empresa aumentó a los 10.000 euros. Es interesante desde el punto de vista fiscal y en el plano de la rentabilidad que se obtiene a largo plazo. 

Asimismo, hay que tener en cuenta que existen otros productos que pueden permitirte comenzar a ahorrar frente a la jubilación, por ejemplo, a los 30 años de edad: los PPA, los PIAS, los Unit Linked, etc.

Fondos de renta variable y bonos

Otra de los principales consejos que hacen los expertos es que destines parte de tu dinero a invertir en fondos de renta variable o en bonos. Los vehículos que invierten en bolsa son los más rentables de cara al largo plazo y, como a menor edad se puede asumir más riesgo por la volatilidad, puede ser interesante.

En cuanto a la apuesta por los bonos, te garantizas una mayor estabilidad. En el equilibrio entre ambos reside parte de tu éxito.

Invertir en ti mismo

El último consejo que has de tener en mente es que, entre los 30 a los 40 es un gran momento para obtener un título avanzado o para mejorar tus habilidades laborales y, de ese modo, aumentar tu salario. 

Emplea el tiempo en ti mismo, ya que eso puede hacer que el conocimiento adquirido te abra puertas profesionales a futuro con la que percibas más dinero. Todo suma.