Los 6 tipos de cocina más populares que existen y cuál es el mejor para tu vivienda

Una de las consecuencias que trajo la pandemia por el coronavirus fue la reforma de las casas o alguna de sus partes, tanto poniéndolo en manos de especialistas como realizada por parte de los propios inquilinos.

La reducción de los gastos en algunos casos y el aumento del ahorro y de la planificación para el futuro han llevado a muchas personas a plantearse —y poderse permitir— una reforma de su vivienda. 

Dentro de esta, la cocina es una de las partes cuya reforma cuesta más, pero también es de las de mayor uso y, por tanto, que más se suele reformar.

Antes de abordar la reforma de una cocina, sin embargo, o de encargar su construcción en una vivienda nueva, conviene conocer cuáles son los tipos de cocina que existen, así como sus ventajas y desventajas.

Estos son los tipos de cocina para viviendas nuevas o reformadas más populares:

Cocina tipo isla

Se trata de una cocina de tipo abierta o americana (en contraste con las independientes, más tradicionales) que permite la interacción entre las personas que están en la cocina y las que se encuentran en la sala contigua, ya que no hay una pared que las divida.

Se forma así en el medio un espacio llamado "isla" o "isla central", que puede o no estar diseñada con lavaplatos y placa de inducción integrada. Según los expertos, este tipo de cocina requiere un espacio mínimo de 16 m2, y está especialmente utilizado en casas de lujo o pisos de alquiler vacacional.

Las cocinas tipo isla presentan la ventaja de conectar dos espacios (la cocina y el salón, generalmente), por lo que facilitan la interacción entre todas las personas, de forma que son adecuadas para familias o reuniones con amigos. 

Por el contrario, el hecho de estar abierta también implica desventajas, como la entrada de olores, humo y ruidos provenientes de la cocina, o que las personas cocinando y los platos que se preparan estén expuestos al resto de personas.

Cocina en forma de U

Las cocinas en forma de U suponen un diseño muy flexible que permite disfrutar de un espacio independiente, así como integrar un comedor central. 

Pueden ser recomendables para familias numerosas o si varias personas van a estar cocinando a la vez, y queda bien en distintos tipos de espacios, desde largos y estrechos hasta cuadrados.

Su predisposición y forma podría causar cierta sensación de agobio en algunos casos, por lo que se recomienda que cuente con un espacio central lo suficientemente grande pero no demasiado, entre los 4 y los 8 metros. Además, este tipo de cocina suele ser de los más caros.

Cocina en forma de L, o angular

En la cocina en L, también conocida como angular, todos los electrodomésticos, muebles y elementos decorativos se colocan en dos paredes, unidas de esta forma específica.

Este tipo de cocina permite incorporar una isla en el centro, con una placa para cocinar o un espacio para comer, y pueden integrarse tanto en espacios independientes como abiertos.

Este es uno de los tipos de cocina más populares en viviendas de nueva construcción, aunque también es más caro que otros modelos y puede resultar poco funcional o pequeño en algunos casos.

Cocina en línea recta

La cocina en línea recta o lineal es aquella en la que todos los muebles y elementos se encuentran en la misma pared. Se trata de un tipo de cocina que se adapta mejor a los espacios pequeños, como apartamentos o estudios, así como a las personas que suelen comer en la propia cocina.

Para su decoración, se recomienda combinar muebles abiertos y cerrados, vintage o minimalistas, y apostar por colores claros para dar sensación de espacio.

Se integra de forma fácil en cualquier vivienda, pero se trata de un espacio que con el inconveniente de que puede resultar saturado a la vista y poco cómodo o funcional.

Cocina paralela o en dos frentes

En este tipo de cocina la disposición de todos los elementos se divide en dos paredes enfrentadas entre sí, y a menudo terminan en un tendedero o balcón frente a la puerta de entrada.

Se recomienda disponer al menos de 1,20 metros de distancia entre los muebles de un extremo y otro para poder moverse con facilidad, así como no llenarla con muchos muebles. Si no se cuenta con ese espacio recomendado, puede ser más aconsejable optar por una cocina lineal.

Cocina tipo península

De forma similar a las cocinas isla, las de tipo península cuentan con una pieza mobiliaria dispuesta en el centro de la estancia, pero en este caso esta se encuentra unida por un extremo a la encimera.

Este tipo de cocina, menos frecuente en España, es una buena opción para espacios amplios y personas a las que les gusta mucho cocinar. Permite la circulación y comunicación con los espacios adyacentes, pero también puede suponer dejar un espacio abierto poco aprovechable.

 Fuentes: Vivires, DDC-Gestión inmobiliaria, Vía Célere.