Las 7 construcciones impresas en 3D más impresionantes del mundo

• Los analistas estiman que la impresión 3D moverá una industria asociada de nada menos que 26.700 millones de dólares en 2019.
• En Business Insider España hemos recopilado siete construcciones y dispositivos fabricados con impresión 3D que prometen revolucionar desde las estructuras urbanas hasta la salud, pasando por la movilidad o la exploración espacial.

Uno de los grandes temas de discusión en la arena tecnológica está siendo la impresión 3D. Se trata de forma de fabricación aditiva con la que podemos producir cualquier elemento en apenas unos minutos sin más preparación que un diseño digital previamente esbozado o escaneado.

Tanto es el hype que se está generando en torno a la impresión 3D que incluso se estima que esta tecnología moverá una industria asociada de nada menos que 26.700 millones de dólares en 2019 según IDC. 

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Pero hasta ahí la teoría y los grandes números. Lo verdaderamente impresionante llega cuando aterrizamos este concepto de impresión 3D en casos de uso concretos y ya existentes entre nosotros.

Por eso, en Business Insider España hemos recopilado siete construcciones y dispositivos fabricados con impresión 3D que prometen revolucionar desde las estructuras urbanas hasta la salud, pasando por la movilidad o la exploración espacial.

Casas impresas en 3D en Valencia

Empezamos esta particular recopilación en España, más concretamente en Valencia, donde cuatro jóvenes de la Universitat Poltécnica de Valencia crearon la startup Be More 3D, responsable de las primeras viviendas unifamiliares impresas en 3D. 

Construidas in-situ, estas edificaciones modulares están fabricadas con hormigón, como si fuera una casa al uso. Su primer diseño, pionero también a escala mundial, consistía en una casa de 24 metros cuadrados, aunque ahora ya son capaces de imprimir viviendas de hasta 70 metros cuadrados en alrededor de 10 horas. ¿Su coste? 55.000 euros.

Puentes impresos en 3D en Shanghai

Nos vamos algo más lejos, hasta China, para deleitarnos la vista con este puente impreso en 3D que se ha instalado en el parque central de Taopu, en Shanghai.

La estructura, fabricada en 35 días a base de plástico y fibra de vidrio, mide 15,25 metros de largo y 3,8 de ancho. Es capaz de resistir las inclemencias meteorológicas, soportar hasta 250 kilos por metro cuadrado (cuatro adultos por metro cuadrado) y su vida útil está estimada en aproximadamente tres décadas.

Arrecifes de coral artificiales

¿Y si bajamos al fondo del océano encontraríamos también objetos impresos en 3D? La respuesta es afirmativa: en las Islas Maldivas se han instalado una serie de arrecifes de coral artificiales que se construyeron mediante fabricación aditiva.

Fundidos en cerámica, estos arrecifes impresos en 3D constan de 220 moldes que están sumergidos a siete metros bajo la superficie y su propósito es servir de base para trasplantar coral vivo que crecerá en dos o tres años alrededor de este material.

De este modo, los ideólogos del proyecto (una empresa australiana llamada Reef Design Lab) quieren salvar los corales del calentamiento global y la contaminación ambiental.

Maniquís para probar tratamientos de radioterapia

De salvar el planeta a salvar vidas humanas. Hablamos ahora de Marie, un maniquí impreso en 3D que ha sido diseñado por una estudiante de la Louisiana State University para medir los efectos de la radiación en tiempo real y determinar la dosis óptima de las sesiones de radioterapia en el tratamiento del cáncer.

Marie es una réplica a escala del ser humano, fabricada en bipolástico: mide 1,8 metros, pesa 7 kilos y puede almacenar hasta 136 litros de agua en su interior. Fue impresa en 136 horas y su valor radica en permitir experimentar los efectos de estos tratamientos en personas que actualmente no encuentran replicantes artificiales en los laboratorios, como mujeres y niños.

Motocicletas eléctricas totalmente funcionales

Pero la impresión 3D no formará parte solo de estructuras fijas y edificaciones, sino que también rodará por nuestras carreteras. Así pues, la consultora Now Lab ha desarrollado ya la primera moto eléctrica completamente fabricada de forma aditiva, incluyendo no solo el chasis, sino también sus neumáticos, suspensiones, llantas o el asiento.

Nera, que así se llama el vehículo, no es más que un prototipo pero abre la ventana a un sinfín de posibilidades dentro de la industria automotriz. Solo el motor eléctrico se ha dejado fuera de la impresión 3D por motivos obvios.

Un muro impreso con polvo lunar

Elevemos nuestras vistas a los cielos, más exactamente a la Luna, para encontrarnos con el próximo lugar donde veremos objetos impresos en 3D. En ese sentido, la Agencia Espacial Europea (ESA) ya ha creado un bloque construido a base de polvo lunar simulado en base a esta tecnología, de una tonelada y media de peso.

El objetivo de esta idea es poder fabricar estructuras en la Luna a base de materiales locales que no necesiten ser transportados desde la Tierra. Además, una vez instalada la impresora 3D en nuestro satélite, podríamos construir tantos edificios como sean necesarios con tan solo enviar los planos correspondientes.

Puente de acero en Ámsterdam

Y acabamos la selección volviendo a cruzar un puente solo que, en esta ocasión, no está fabricado con plástico sino con acero. Se trata de una estructura fabricada en Ámsterdam e instalada en el barrio De Wallen de esa localidad.

Producida por la compañía MX3D, esta estructura es extraordinariamente resistente y presenta un diseño muy complejo de lograr con técnicas de fabricación tradicionales. Además, el puente está equipado con un sinfín de sensores que medirán su comportamiento ante el paso de personas por él, así como valores medioambientales, con el propósito de mejorar la calidad de las siguientes unidades que se instalen.