Las 7 cosas más inteligentes que puedes hacer antes de tu primer día en un nuevo trabajo

• Empezar un nuevo trabajo es una etapa excitante en tu carrera.
• Un cambio laboral puede sobrepasarte, pero si te preparas con tiempo, la transición a tu nuevo puesto será más fácil.
• El autor Ryan Ariano ha investigado su sector y ha confeccionado un plan de juego antes de empezar su trabajo, algo que le ha ayudado a tener un gran comienzo.

Empezar en un nuevo trabajo es como mudarte a un lugar en el que nunca has estado antes: puede dar miedo y ser excitante al mismo tiempo.

He conseguido el éxito en varios sectores distintos, pero no ha sido hasta hace cuatro años cuando he empezado a combinar mi pasión por viajar con mi experiencia trabajando en una agencia de cazatalentos, mis habilidades de marketing y mis conocimientos sobre producción, para convertirme en un agente de viajes de entretenimiento.

Mi futuro jefe me advirtió durante la entrevista de que me llevaría medio año coger el ritmo de trabajo. Pero, usando unos pocos trucos aprendidos a lo largo de una vida plagada de cambios de trabajo, cogí el ritmo en la mitad de tiempo e, incluso, conseguí mi primer aumento en cuatro meses.

Estas son las siete cosas más inteligentes que hice antes de empezar en mi nuevo trabajo:

1. Conoce tu sector

Si te quedas en el mismo sector, este paso puede ser muy corto: todo lo que tienes que averiguar es la identidad de tu compañía. Por ejemplo, en mi experiencia en el mundo de las agencias de cazatalentos, notaba la diferencia entre la superagencia venida a menos, la exclusiva agencia de Hollywood, la menos llamativa agencia de televisión, la agencia de talento musical y cinematográfico, etc. Los agentes de cada empresa tenían que reflejar su cultura distintiva.

Si te estás adentrando en un nuevo sector como yo hice, hay muchos más deberes que realizar. Yo hice una lista de hoteles sacados de cada revista, blog y programa de viajes que pude encontrar. Cuando un agente me preguntaba por opciones para un director en Shaghai, podía enumerar rápidamente al Waldorf y el Mandarin Oriental. Y cuando un VIP me preguntaba por sugerencias para unas vacaciones de cinco estrellas, sabía que Palawan, en Filipinas, era el mejor destino.

2. Conoce a tu compañía

Nunca usarías una herramienta eléctrica sin leer antes sus instrucciones. Lo mismo sucede cuando empiezas en nuevo trabajo.

Al margen de las normas básicas de conducta y de la política de vacaciones, hay procedimientos y faltas en el manual de la compañía que necesitas saber. Aproximadamente a la mitad del manual de mi compañía, descubrí un bono de viaje que se activó después de algunos años en la agencia.

Si puedes, intenta encontrar una lista de empleados con fotos o busca a tu compañía en LinkedIn antes de empezar a trabajar. Mis nuevos compañeros estaban encantados de que un nuevo miembro del equipo ya supiera quiénes eran.

3. Cómprate ropa nueva

"Vístete para impresionar" es un consejo clásico en el trabajo, y por una buena razón: las prendas que te sientan bien pueden hacerte parecer más profesional.

Mi nueva oficina es decididamente más casual que mi antigua agencia de cazatalentos, lo que significa que puedo dejar de abotonarme la camisa y dejar mis trajes en el armario.

No necesitas gastarte un montón de dinero en un nuevo armario. Pero mis pantalones y camiseta a estrenar me dieron un impulso de confianza que me marcó desde el primer día.

4. Date a ti mismo un tiempo de transición

Si es posible, evita dejar un trabajo un viernes y empezar en el siguiente el lunes. Deberías tomarte al menos una semana para clarificar tu mente.

Incluso si te quedas en el mismo sector, tu realidad está cambiando: las identidades corporativas son tan diferentes como las personalidades individuales. Por ejemplo, puede que dejes una compañía que valora los logros individuales y la responsabilidad por una una que pone el foco en el trabajo en equipo y la cooperación.

Después de dejar mi último empleo, hice un viaje de tres días y me enganché a Netflix. Cuando empecé en mi nuevo trabajo, tenía más energía de la que había tenido en mucho tiempo.

5. Saca tu lista de cosas por hacer

Si tienes alguna tarea que hayas querido abordar, intenta terminarla antes de comenzar en el nuevo trabajo. Puede que tengas que dedicarle unas horas más de lo normal mientras tratas de ponerte al día con el nuevo reto.

En mi caso, cambié el aceite del coche, organicé mi despacho, concerté una cita con el instalador de DirecTV e incluso hice la renta... En febrero. De ese modo, pude pasar tardes revisando el nuevo sistema y los clientes con los que iba a trabajar, porque no tenía tareas pendientes en mi cabeza.

6. Escribe tu estrategia

¿Recuerdas que durante tu entrevista compartiste todas esas ideas brillantes sobre cómo ayudarías a hacer crecer el negocio, las operaciones y a desarrollar nuevos proyectos? Ahora es el momento de hacerlo. Escribe una estrategia detallada antes de tu primer día.

Antes de empezar en mi trabajo, hice una lista de cada potencial cliente del que me acordé. Cuando conocí cómo trabajaba la compañía, empecé a trabajar en la lista que había creado. En el peor de los casos, aprendía qué sistemas usaban nuestros competidores. En el mejor, conseguía nuevos clientes.

7. Da las gracias a todo el mundo

Quieres contarle a la gente que te acaba de contratar lo impaciente que estás por unirte al equipo, pero también quieres dar las gracias a tus excompañeros para poder mantener esas relaciones.

También empecé en mi nuevo trabajo dando las gracias a mis jefes y a la gente de mi pasado. En unos pocos casos, descubrí que podíamos seguir trabajando juntos de un nuevo modo. Cuantos más puentes construyas, más lejos llegarás.