8 pistas que indican que tu jefe quiere que fracases, consciente o inconscientemente, en tu trabajo (y cómo actuar si se da el caso)

En la gran mayoría de los casos no es recomendable echar las culpas a los demás de los errores que cometes en el trabajo. Si aceptas la responsabilidad de tus actos aprendes rápidamente de ellos, mejoras, rindes más y mejor y, al final, quizás recuerdes aquel tropiezo hasta con cariño.

Pero, en algunas ocasiones, temer en la posibilidad de que tu mal rendimiento en el trabajo se debe a actitudes y órdenes extrañas de tu jefe puede revelar una terrible verdad. No es la situación más normal del mundo, pero un superior incapaz de gestionar bien a sus empleados puede, a veces sin proponérselo, desear e imponer el fracaso de los mismos.

Para empezar, puede que te estés preguntando por qué un jefe iba a querer que uno de sus trabajadores fracasen en sus tareas. Al fin y al cabo es algo totalmente contraproducente tanto para su departamento como para la empresa en general.

Según apunta el coach laboral Jason Cortel, todo se debe a una mala gestión emocional. "Un buen jefe es lo suficientemente maduro como para reconocer los prejuicios de su mente y alejarse de ellos. Pero un mal supervisor permitirá que su actitud, valores o carácter social acaben manipulando la imagen que tiene de ti".

Como resultado, este tipo de líderes crean una imagen prefijada de sus trabajadores en la cabeza y actúan según ese prejuicio. Si consideran que son buenos empleados, pese a carecer de pruebas sobe ellos, les darán oportunidades, recursos, confianza... Y lo mismo si desconfían irracionalmente.

En este segundo caso, se entra en la espiral negativa que Harvard Business Review llamó el síndrome del fracaso establecido en un artículo con el mismo título. Este mítico y extenso documento es la base original de todo lo que se ha escrito e investigado al respecto. 

A continuación tienes un resumen de los pasos o sabotajes que el texto clasificó. Después, tendrás consejos para salir de la situación.

8 pistas que indican que tu jefe quiere que fracases

1. Un pequeño error desemboca en una enorme crítica

Un buen líder sabe que errar es de humanos y que es inevitable equivocarse. Así que si un trabajador comete un error, este tipo de supervisor actuará rápidamente para hacerle entender que no ha pasado nada y para ayudarle a descubrir en qué se ha equivocado y cómo puede evitar que se repita.

En cambio, un jefe que quiera que fracases, consciente o inconscientemente, reaccionará de forma dramática ante tu más mínimo error. Pasaré de estar relajado a mostrarse enfadado, hasta el punto que la duración de su ira puede durar más que las repercusiones del error. En ese sentido, la bronca que te puede echar será excesiva.

2. Notas que tu jefe no confía en ti

Si tu jefe cuestiona todo lo que haces o dices hasta el punto que te quita autonomía y quiere que sigas estrictamente tus instrucciones, puede significar que se ha metido en la cabeza la idea de que no eres de fiar.

Lo que no se da cuenta es que ha activado una profecía autocumplida. "La falta de confianza del superior disminuye la motivación del trabajador", explica Harvard Business Review. "Este puede ser menos productivo o creativo porque ve que no vale la pena. El jefe entonces lo interpreta como una validación de sus sospechas".

3. Cada vez tienes menos tareas que hacer

Si semana a semana, mes a mes, notas que tienes cada vez más tiempo libre en el trabajo, posiblemente tu superior y tú ya habéis entrado en la espiral de profecía autocumplida anteriormente comentada.

Es posible que este recorte de tareas se debe retroactivamente una falta de motivación por tu parte: como notas en otros aspectos que algo extraño ocurre con tu jefe, produces menos. Tu superior lo ve como una señal de que eres "un mal trabajador" y decide quitarte tareas para confiarlas a otros. 

4. Las interacciones con tu jefe disminuyen

Las broncas incesantes, la desconfianza, el recorte de trabajo... todos los pasos hasta ahora pueden tener como objetivo o que dimitas o que tu superior tenga motivos para despedirte. Pero, si no ocurre ni una cosa ni la otra, Harvard Business Review explica que el siguiente paso es una dinámica de "tratamiento mediante el silencio".

Sabrás que te encuentras en esta fase si quieres hablar con tu superior sobre tus miedos (e intentar buscar arreglo al respecto) pero este va dando excusas para retrasar la charla. Otra pista evidente es que cada vez tiene menos tiempo para atenderte o darte explicaciones.

5. Tu superior disminuye o cesa sus recursos

Los recursos que de repente desaparecen o disminuyen pueden ser de cualquier tipo: esperas un aumento de sueldo por tu buen trabajo, pero no llega; pides cursos y formaciones, pero te son denegados; debes hacer las tareas de siempre con la mitad de recursos habituales...

Tanto en este punto como en los otros debes tener muy en cuenta el contexto. Si todos a los trabajadores de tu departamento se les recorta el sueldo (o se les niega una subida del mismo), significa que no es algo personal, sino que algo ocurre con la empresa en general. 

6. O se te dan tareas innecesarias o bien tareas demasiado especiales

Si la situación extraña con tu superior se mantiene, a la larga pueden ocurrir 2 cosas. La primera es que te dé tareas innecesarias e incluso denigrantes. El mayor ejemplo es todo lo que tenga que ver con tu tiempo: desconfía si llevas unas semanas teniendo que elaborar informes sobre las horas, minutos y segundos que tardas en hacer cualquier tarea pequeña.

Pero luego está el otro extremo: las tareas especiales. Son aquellos proyectos cuya elevada complejidad es totalmente proporcional a sus altas posibilidades de fracasar. En ambos casos, lo que hace tu superior es quitarte la posibilidad de tener éxito y ser productivo, 2 posibilidades que se oponen a la etiqueta que te ha otorgado.

7. Tus logros son ignorados o menospreciados

Precisamente debido a que tu jefe quiere validar irracionalmente que no rindes bien, buscará formas de ignorar aquellos éxitos que logres cosechar pese a la dificultad de tus circunstancias.

Dale la vuelta para detectarlo mejor: un buen jefe quiere que sus trabajadores cumplan objetivos y quiere reconocerlos de inmediato para crear un círculo virtuoso. 

8. Existe un bloqueo entre tus compañeros y tú

Finalmente, si tu jefe no confía en ti, acabará cortando o impidiendo que puedas comunicarte o cooperar efectivamente con tus compañeros.

A nivel personal, eso te afectará porque tendrás menos apoyo, literal y simbólico, para hacer frente a la situación por la que pasas. A nivel empresarial, no podrás escalar puestos o conseguir ascensos debido a que tu superior habrá cortado conexiones.

Qué hacer si detectas que tu jefe quiere que fracases

1. Asegúrate de que las instrucciones queda claras

Según indica el portal sobre trabajo Career Trend, la inmensa mayoría de los errores en el contexto laboral se deben a instrucciones o poco claras o que se contradicen. "Insiste en hacer preguntas hasta desentrañar el lío y, si puedes, consigue estas instrucciones por escrito".

Una buena técnica es parafrasear lo que te ha dicho el supervisor. "Así que quieres que incremente las ventas del departamento en un 2,5%, ¿no?". Para no sonar maleducado o desconfiado, di claramente que quieres evitar cometer errores y agradece el tiempo adicional para las explicaciones.

2. Ayuda a tu jefe a tener éxito

Quizás tu primera reacción cuando descubras que tu superior desconfía de ti es demostrar que está equivocado cumpliendo tus propias metas y elaborando tu propio camino. Eso solo conseguirá que valides más sus premisas. O puedes lograr que quede mal y eso os va a distanciar emocionalmente.

En cambio, la coach Margie Warrell recomienda que busques su debilidad (por ejemplo su desorganización o sus problemas para comunicar) y te conviertas en el trabajador que supla esa carencia.

3. Pide una mediación con Recursos Humanos

Finalmente, si la situación ha llegado a un punto tan crítico que te sientes incómodo cuando interactúas con tu superior o notas que está minando tu salud física y mental, es importante que involucres a una persona neutral al problema.

Puedes intentar primero hablar directamente con tu jefe para confirmar si existe un problema. En caso de bloquear este acercamiento o encontrarte con negativas en la reunión, entonces sí que deberás explicar la situación a Recursos Humanos.