Ruta por la Costa Oeste de EEUU: 9 cosas que me hubiese gustado saber antes de organizar mi viaje

Mujer pintando una de las costas de Big Sur, en California.
Mujer pintando una de las costas de Big Sur, en California.

Miriam Pérez

  • Diez millones de kilómetros cuadrados son muchos para hacerte una idea de lo que es Estados Unidos.
  • En mi ruta de dos semanas por el país donde los sueños se cumplen visité los principales lugares de la Costa Oeste, terminando en la otra costa, en Washington y Nueva York.

Organizar un viaje a Estados Unidos siempre es un planazo, pero se suele elegir Nueva York como destino. La atracción de la ciudad que tantas veces hemos visto en series y películas es irresistible. 

Los museos, los musicales, las actuaciones, los edificios, la historia y la gastronomía son los principales atractivos, pero eso es solo una parte de lo mucho que tiene que ofrecer Estados Unidos. Parajes naturales, animales en su entorno natural y las costas de playa son también altamente recomendables. 

Al organizar mi viaje a Estados Unidos tuve claro que no quería quedarme solo en un sitio aprovechando que cruzaba el charco para conocer lo máximo posible de la tierra donde los sueños se cumplen. 

Diez millones de kilómetros cuadrados son muchos para hacerte una idea de lo que es EEUU. En realidad, al igual que cambian sus paisajes de costa a costa, su extensión también permite la convivencia de varias culturas, varias formas de vivir y varias tradiciones, por lo que es difícil quedarse solo con un destino. 

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Al contrario que otros muchos que han organizado rutas por Estados Unidos, yo dejé Nueva York para el final y volé a San Francisco desde donde empecé la ruta de la Costa Oeste. Esta ruta, alternativa a la famosa 66, no es lineal, sino que puedes planearla a tu antojo visitando los lugares más famosos: el Parque Nacional de Yosemite, Big Sur, el Valle de la muerte, el Cañón del Colorado, el Cañón Antílope, Las Vegas, Los Ángeles, el Monument Valley y mil sitios más. 

En mi caso, visité todos esos destinos y después cogí un vuelo de Los Ángeles a Washington, para terminar el viaje visitando la Casa Blanca y Nueva York. 

Esto es lo que me hubiese gustado saber antes de haber planeado este viaje: 

1. Asegúrate de que alquilas el coche apropiado para los largos viajes en carretera. 

Toyota RV4.
Toyota RV4.

Miriam Pérez

Las distancias en la Costa Oeste son muy grandes, llegando a superar las 7 horas entre un destino y el siguiente. Contar con un buen coche fue fundamental, además de asegurarse de que tiene un maletero espacioso. 

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El primer error fue pensar que en un coche normal cabrían 4 maletas grandes para 2 semanas, por lo que acabé con un vehículo de una gama superior, un Toyota Rav4 para poder contar con comodidad durante todos los trayectos. A causa del retraso que esto supuso, no llegué a hacer el primer plan de la lista: ir a ver el atardecer en el Golden Gate. 

2. Reserva dos noches en Big Sur y disfruta de todo lo que la costa tiene que ofrecer. 

La costa de Big Sur, California.
La costa de Big Sur, California.

Mirima Pérez

El Big Sur no se presenta tan turístico como otros lugares de la Costa Oeste cuando empiezas a buscar información sobre el viaje. 

Cuando empecé la ruta me empecé a enamorar de cada cala y de cada acantilado. Según vas recorriendo toda la costa y vas parando con el coche, vas descubriendo lugares mágicos de agua cristalina y ruidosos habitantes, los leones marinos

Para este destino, solo reservé un día, ya que la idea era simplemente disfrutar de las vistas con el coche, pero hay muchos puntos de la costa en la que puedes hacer senderismo o bañarte en las mágicas playas. 

Al final, fui a menos calas de los que tenía planeado por cuestión de tiempo; poder haber pasado un día más disfrutando la zona habría merecido la pena. 

3. Si comer fuera te resulta demasiado caro, en los supermercados venden platos preparados y ricos.

Supermercado de un pueblo cerca del Parque Nacional de Yosemite.
Supermercado de un pueblo cerca del Parque Nacional de Yosemite.

Miriam Pérez

Ante la inflación y el valor del dólar y el euro a la par, comer en Estados Unidos no ha sido tan barato como me habían dicho

La comida basura, además de estar buenísima, tiene un precio razonable y parecido al de España. Sin embargo, fuera de ese menú, comer en restaurantes puede llegar a los 40 dólares por persona. Si te gastas esta cantidad en las tres comidas del día, todos los días del viaje, al final se convierte en uno de los principales gastos de tu presupuesto.  

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En mi caso, muchas de las comidas las realicé en los propios trayectos en coche, por lo que visité un montón de supermercados y descubrí que muchos de ellos contaban con una zona de comida preparada, con platos variados como ensaladas de pasta, arroz con pollo y verduras, entre otros muchos, que costaban unos 6 dólares.

Me sorprendió lo bien expuesto que estaban los alimentos y productos en algunos de ellos.

4. Lleva el bañador a Yosemite para darte un baño en la orilla del río después de una ruta.

Zona de playa del río que atraviesa el valle de Yosemite.
Zona de playa del río que atraviesa el valle de Yosemite.

Miriam Pérez

Yosemite es un parque natural en el que esperas ver osos, ciervos y pasear entre las altas montañas que rodean el valle, pero no contaba con que hubiese zonas del río en las que poder refrescarte del intenso calor. 

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Realicé varias rutas de senderismo hasta lo alto de las montañas en dos ocasiones, pero no tuve en cuenta que después del esfuerzo, el premio podría haber sido un baño de relajación en el río que atraviesa el valle.

Los niños incluso se llevaban colchonetas para pasar el día en el río. 

5. No esperes a que la línea del depósito de la gasolina esté al mínimo, puedes quedarte tirado en mitad del desierto.

Largas carreteras por el desierto.
Largas carreteras por el desierto.

Miriam Pérez

En el trayecto de Yosemite a Las Vegas se atraviesa el vasto desierto durante las 5 horas y media que dura el viaje. 

Se trata de una línea recta infinita que no cuenta con apenas vías de servicio ni áreas de descanso, por lo que es primordial organizarte para repostar antes de salir, aun si tienes el depósito medio lleno. 

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Hubo un par de veces que me asusté al ver la aguja del depósito bajar mientras pasaban las horas sin ver ninguna gasolinera. Además, en aquel trayecto llovió muchísimo e incuso recibí alertas en mi móvil sobre posibles inundaciones, por lo que el riesgo fue aún mayor. 

6. Si tienes que elegir en qué gastarte el dinero, te recomiendo la experiencia de uno de los mejores espectáculos del mundo que solo se vive en Las Vegas: el Circo del Sol "O".

Teatro del Circo del Sol "O" en Las Vegas.
Teatro del Circo del Sol "O" en Las Vegas.

Miriam Pérez

Tras pasear de casino en casino y de hotel en hotel disfrutando de la originalidad, de la decoración y sus rocambolescos pasillos, lo que más me gusto de Las Vegas fue el Circo del Sol "O".

Tienen prohibido hacer fotos a la actuación y puedes imaginarte por qué según entras al teatro cuando te invade un olor a piscina que te da la pista de lo que está a punto de pasar. 

El Circo del Sol es uno de los espectáculos más vistos y aclamados por todo el mundo. En cada ciudad es diferente, con temáticas especiales y al que yo fui, su tema principal era el agua. Las entradas tienen un precio elevado, pero sin duda fue una auténtica maravilla que mereció la pena y que no verás en ningún otro lugar del mundo. 

7. Largas esperas para fotos icónicas.

Foto del toro de Wall Street.
Foto del toro de Wall Street.

Miriam Pérez

Esto no es una novedad: detrás de una foto "instragrameable" hay largas colas que te robarán un tiempo precioso de seguir visitando la ciudad y hacer actividades. 

En mi caso, un lugar que quería visitar era Wall Street y su famoso toro, pero ante la cantidad de gente había alrededor para echarse la foto, decidí que no valía la pena. 

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En estos casos, lo mejor es disfrutar el momento con tus ojos y saber que puedes decir que estuviste allí, aunque no tengas una foto tuya de aquel lugar. 

8. Las mejores vistas del puente de Brooklyn las verás desde el puente de Manhattan.

Vista del puente de Brooklyn desde el puente de Manhattan.
Vista del puente de Brooklyn desde el puente de Manhattan.

Miriam Pérez

Leí muchísimo sobre qué hacer en Nueva York antes de planear los lugares que quería visitar. Sobre la gran manzana hay miles de páginas, pero en ningún sitio leí nada acerca del puente de Manhattan. 

El puente de Brooklyn es una de las principales atracciones turísticas para disfrutar de la ciudad de Nueva York, con las espectaculares vistas del skyline más fotografiado del mundo. El puente que une los distritos de Brooklyn y Manhattan tiene un estilo neogótico realmente admirado. 

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Crucé el puente desde Manhattan y pasé la tarde por Brooklyn, pero al volver, escogimos otro camino paralelo para poder contemplar desde otra perspectiva el famoso puente. Sin realmente planearlo, volvimos caminando por el Manhattan Bridge, desde donde encontramos uno de los mejores lugares para ver el atardecer con el puente. 

Aunque las vistas son preciosas y merece la pena, es cierto que el tren pasa constantemente por ese mismo puente y es realmente ruidoso. Al llegar otra vez a Manhattan vas a parar a China Town. 

9.  Ir a Long Island no solo es una buena opción para ver la Estatua de la Libertad.

Long Island.
Long Island.

Getty Images

La pequeña localidad de Long Island no es especialmente famoso. Probablemente, ya todo el mundo sabe que existe un ferri gratuito que te lleva a la ciudad y que la gente coge para poder ver de cerca la Estatua de la Libertad sin tener que gastar dinero. 

Pero el trayecto no solo ofrece una de las mejores vistas de la icónica estatua, sino que te lleva directamente a uno de los famosos outlets americanos en los que encontrar chollos. 

Además de buenos sitios para comer, en Long Island podrás encontrar artículos de marca a precios reducidos, especialmente para las cosas de deporte, ya que podrás comprar cosas sin tener que pagar impuestos si no superas los 100 dólares. Yo arrasé allí. 

 

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