9 cosas en las que no deberías escatimar cuando estás haciendo un presupuesto de vacaciones

Muchos turistas tienen como objetivoahorrar en sus vacaciones, sobre todo en esta época de inflación en la que el gasto se dispara.

Viajar con aerolíneas de bajo coste, hospedarte en hoteles baratos, o ahorrar en transporte y en comida suelen ser las ideas más recurrentes en esta situación.

Sin embargo, querer rascar hasta el último euro no siempre es buena idea. Ya sabes lo que dicen: lo barato sale caro; y en cuestión de viajes esto se suele cumplir.

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A continuación, se muestran 9 cosas en las que no deberías escatimar en tus vacaciones para no llevarte sorpresas desagradables.

No te hospedes en una pocilga

Una de las peores ideas que puedes tener es la de ahorrar demasiado en el alojamiento.

Los hoteles excesivamente baratos pueden darte problemas. El primero de ellos es que se encuentran lejos del centro de la ciudad, provocando que gastes más en taxi o transporte público.

Si optas por dar largas caminatas acabarás más cansado, por lo que viaje puede acabar convirtiéndose en una penitencia.

Puedes encontrar otros inconvenientes incluso más graves: que las condiciones higiénicas sean malas, que apenas incluyan servicios básicos o las horas de llegada y salida resulten poco flexibles.

Contrata siempre hoteles de cadenas fiables y que dispongan de buenas reseñas.

Debes tener en cuenta los gastos del transporte

Esto incluye desde el viaje en avión, tren, barco o coche hasta los desplazamientos dentro de la ciudad que visitas.

Viajar en aerolíneas 'low cost' no tiene por qué darte problemas, aunque debes tener en cuenta que van a cobrarte por cualquier extra. 

Lo que debes preguntarte es: ¿de verdad quieres ahorrar en transporte en una ciudad que no conoces?

Prescindir de servicios como la flota de taxis de la ciudad, Uber o Cabify es mala idea. Hay lugares en los que el transporte público apenas tiene presencia, y otros en los que ganarás mucho tiempo desplazándote en coche, aunque sea más caro.

Una buena planificación en el transporte te ayudará a tener un viaje más cómodo.

Cuidado con la tarifa que elijes al comprar los billetes de avión

Los billetes de avión muy baratos suelen esconder sorpresas. Por ejemplo, que tengas que pagar un elevado gasto extra por sobrepasar el límite de peso, aunque hay otros problemas.

Algunos de los inconvenientes de elegir una tarifa barata son no poder escoger el asiento, por lo que tendrás que estar lejos de tu acompañante, también influye ser el último con prioridad de embarque, pues es posible que tengas que facturar tu equipaje de mano si se sobrecarga el avión.

Y sin duda lo más peligroso para tu bolsillo es no disponer de la devolución de billete en caso de tener que cancelarlo.

En ocasiones conviene más elegir una tarifa más cara para poder disfrutar de estos servicios, pues si se produce un imprevisto recuperarás tu dinero.

No recortes en monumentos y atracciones turísticas

Viajar no sólo sirve para desconectar de tu rutina, sino para aprender y aumentar tu bagaje culturar.

Querer recortar gastos reduciendo la visitas a monumentos o museos es un grave error. Con el paso del tiempo te arrepentirás de no haber visitado alguna atracción turística y es posible que quieras volver a la misma ciudad.

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Puedes buscar ofertas y comprar las entradas con antelación, así disfrutarás de la cultura sin caer en un gasto excesivo.

Ojo con abusar de la comida basura

Ahorrar en comida te va a salir caro.

Optar por restaurantes de comida rápida es una buena alternativa para hacer de vez en cuando, sobre todo cuando no tienes demasiado tiempo, pero no es una opción para todo el viaje.

Abusar de la comida basura va a provocar estragos en tu organismo. ¿Imaginas tener problemas estomacales durante un viaje? Pues lo mejor para evitarlos es comer de manera saludable.

Además, acudiendo a cadenas y franquicias te estarás perdiendo la gastronomía típica de cada país, otro aspecto fundamental en un viaje.

Un seguro de viaje te puede salir barato

Si vas a hacer un viaje a un país cercano seguro que no has pensado en contratar un seguro. Sin embargo, esta opción debes pensarla siempre que salgas de tu país.

Un seguro de viajes te dará cobertura médica, algo esencial si vas a un país en el que no se acepta la Tarjeta Sanitaria Europea.

También tendrás las espaldas mejor cubiertas a la hora de anular el viaje, o si tienes que adelantar tu regreso por cualquier otro motivo.

Existen numerosos seguros de viajes, así que tienes la posibilidad de contratar el que más se adapte a tus circunstancias.

No escatimes en los productos más cotidianos

Seguro que alguna vez has estado en un hotel en el que no tenían cepillo de dientes, o dentífrico, o el champú era verdaderamente escaso. o tal vez necesitabas una tijeras para cortarte las uñas y no encontrabas por ninguna parte.

Para ello lo mejor es viajar con alguno de estos productos básicos, pues te van a ser muy útiles en algún momento del viaje, y así te libras de comprarlos en otro país en el que quizás sean más caros.

Infórmate sobre al política de la aerolínea en cuanto al transporte de líquido y ciertos materiales para así evitar problemas.

Un botiquín no es tan caro y te puede salvar la vida

Nunca debes escatimar en salud, y en este sentido un botiquín de viaje te va a resultar verdaderamente útil en momentos complicados.

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Tiritas, analgésicos, antiinflamatorios, crema solar, pastillas para el mareo, protectores de estómago o mascarillas son algunos de los productos que pueden formar el botiquín. 

Piensa siempre en los imprevistos

En un viaje siempre surgen imprevistos, sobre todo si vas a pasar muchos días fuera de casa.

Quizás necesites una noche más de hotel de lo que habías pensado, o es posible que te veas obligado a cancelar el billete de avión y comprar otro, con el gasto extra que eso supone. Lo mismo sucede con el transporte dentro de la ciudad: tal vez gastes más de lo que piensas en principio.

Debido a ello, has de reservar alrededor del 20% del presupuesto para las vacaciones en este concepto. Así los sustos serán más llevaderos.