Abengoa sigue posponiendo el pago de una deuda asumida durante su primera reestructuración en 2017

Una planta solar de Abengoa en Sanlucar la Mayor.
Una planta solar de Abengoa en Sanlucar la Mayor.
  • Abengoa ha recibido aprobación de sus acreedores para aplazar el pago de su deuda hasta finales de julio.
  • Los instrumentos de deuda pendientes de pago surgen de la primera reestructuración de la empresa en 2017.
  • Abengoa continua en concurso de acreedores y ha solicitado un fondo de rescate del SEPI.
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Abengoa ha vuelto a aplazar el pago de parte de su deuda hasta el 27 de julio con la aprobación de sus acreedores, según ha comunicado la empresa a la Comisión Nacional del Mercado de Valores.

El anuncio de la empresa dedicada a la energía y las infraestructuras a la CNMV detalla que los instrumentos de deuda cuyo pago queda aplazado son una línea de liquidez y unos bonos, ambos emitidos en marzo de 2017.

Marzo de 2017 es la fecha en que Abengoa cerró su primera reestructuración para evitar una situación de liquidación tras más de un año de negociaciones con sus acreedores financieros.

De acuerdo a una presentación corporativa la ampliación de capital que la compañía realizó en esa reestructuración implicó que nuevos acreedores aportaran cerca de 1.100 millones de euros para poder hacer frente a los 8.000 millones que la compañía ya tenía al descubierto.

Dicha reestructuración supuso una dilución del 95% para los accionistas de Abengoa y no solucionó los acuciantes problemas de la empresa, que tuvo que afrontar una nueva reestructuración en 2019.

Los bonos de deuda cuyo pago Abengoa ha aplazado hasta junio se emitieron por un valor de 26 millones de euros con un tipo de interés del 59%.

El Diario de Sevilla afirma que el pago de estos bonos junto a la cantidad restante del préstamo de Abengoa deja una deuda total a la que hacer frente de 169 millones de euros.

Abengoa entró en concurso de acreedores en febrero de 2021 tras reconocer deudas a sus proveedores y a las entidades financieras de más de 20.000 millones de euros, sentando la base de la que podría ser la mayor suspensión de pagos en España desde 2008.

De momento, la compañía ha ganado un mínimo margen para hacer frente a su débito. Tal vez a la espera de la resolución de su petición de rescate al SEPI que Europa Press informa que sigue pendiente de resolución, después de que la institución estatal requiriera información a la empresa para avanzar en su expediente.

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