Los bancos avisan de que los “detalles” que faltan por conocerse sobre las medidas para aliviar la carga de las hipotecas en las familias serán clave para saber cuál el impacto en sus cuentas

Ana Patricia Botín, presidenta del Banco Santander (izquierda), y José Antonio Álvarez, CEO del banco.
Ana Patricia Botín, presidenta del Banco Santander (izquierda), y José Antonio Álvarez, CEO del banco.

Reuters

  • La banca avisa de que el acuerdo para mitigar la subida de la cuota de las hipotecas a las familias más vulnerables afectará a las provisiones de los bancos porque cuando se produce alguna extensión en el crédito "siempre" se traslada a provisiones. 
  • "En los últimos 5 o 6 años estamos dando más hipotecas a tipo fijo", ha señalado Álvarez, al hablar de que son estos préstamos bancarios jóvenes los que tienen un mayor riesgo. 

Las medidas puestas en marcha por el Gobierno, que las ha llevado este martes al Consejo de Ministos, para proteger a los clientes con hipotecas más vulnerables afectará a las cuentas de los bancos. La duda es saber en cuanto. Esto dependerá de los detalles técnicos que todavía no se han conocido. 

El consejero delegado Santander, José Antonio Álvarez, ha apuntado que en el paquete de las medidas puestas en marcha por el Gobierno para aliviar la carga hipotecaria a los hogares más vulnerables todavía falta por conocer algunos detalles técnicos, que determinarán el impacto exacto de esto en las cuentas de los bancos. 

"Impactará en las provisiones", ha dicho Álvarez a preguntas de los periodistas tras el XXIX Encuentro del Sector Financiero organizado por la empresa Deloitte y el diario ABC. Dado que cuando se produce alguna extensión o alargamiento del crédito "siempre" se traslada a las provisiones.

De esta manera, Álvarez ha dicho que se trata de un tema "excepcionalmente técnico", en función de "cómo se haga la refinanciación potencial o la extensión pueden impactar o no impactar no solo en provisiones, sino también en consumo de capital", ha explicado el directivo. 

El acuerdo ha sido negociado por las patronales bancarias con el Gobierno, pero ahora son los bancos los que deben adherirse uno a uno a este pacto, según explican fuentes financieras a Business Insider España.

Los plazos en los que ocurrirá esto todavía no están claros, dado que todavía faltan estos "detalles técnicos" por negociar. Una vez que esto ocurra, con el pacto ya firmado serán las entidades las que deberán sumarse al acuerdo para que sea efectivo para sus clientes, lo cual tendrá también unos tiempos que todavía no están definidos. 

5 datos en los que se apoyan los bancos para ver con más optimismo la crisis actual que la de 2008: de las cifras de empleo al esfuerzo hipotecario de los hogares

Álvarez ha señalado que, en cualquier caso, Santander tiene voluntad de adherirse al acuerdo, aunque todavía se están negociando aspectos "muy técnicos, muy relacionados con los plazos, con cómo están clasificadas las hipotecas..." 

"Aquí hay un problema de fondo, que quiero que entiendan, una vez que estos clientes se clasifican en stage 3 (la categoría donde se incluyen los préstamos impagados) es que tiene un problema en el futuro que difícilmente tiene solución y esto es lo que queremos evitar es un porcentaje de gente que después no tenga acceso al crédito", ha apuntado Álvarez. 

El directivo ha apuntado que no están viendo todavía grandes impactos en la subida de las cuotas de los hipotecados, que lo que se está haciendo es prever un escenario que "puede venir".  

Además, ha vuelto a destacar una idea que repite la banca en las últimas comparecencias y es que en los últimos años, las hipotecas concedidas a tipo variable han sido mucho menores que las de tipo fijo. 

"En los últimos 5 o 6 años estamos dando más hipotecas a tipo fijo", ha señalado Álvarez, al hablar de que son estos préstamos bancarios jóvenes los que tienen un mayor riesgo. 

Por su parte, el consejero delegado de Banco Sabadell, César González-Bueno, ha afirmado que su entidad tiene previsto adherirse al nuevo código propuesto por el Gobierno para mitigar el efecto de la subida de hipotecas en las familias más vulnerables, a falta de conocer los últimos detalles técnicos, según ha trasladado a los periodistas tras su intervención en el mismo encuentro financiero. 

González-Bueno ha defendido que todas las entidades financieras tienen como último interés que los hipotecados se vean perjudicados y ha señalado que en el contexto actual de subida de tipos y de aumento de los costes esenciales para la vida es necesario tener "una sensibilidad muy especial".

"A ningún banco le interesa quedarse con una casa y a ningún banco le interesa que sus clientes no puedan hacer frente a sus pagos", ha añadido.

Los detalles de las medidas para mitigar el impacto de las hipotecas

Dentro de las medidas que se van a llevar a cabo para tratar de mitigar el impacto de la subida de las cuotas de las hipotecas, según una nota del ministerio de Economía, se recogen apartados que mejoran el actual Código de Buenas Prácticas para deudores hipotecarios vulnerables, que fue aprobado en 2012 tras la dura crisis financiera de 2008 que estuvo marcada por el estallido de la burbuja inmobiliaria, con el fin de adaptarlo a la situación actual. 

El ministerio apunta, que este acuerdo, permitirá a los deudores vulnerables la posibilidad de reestructurar su hipoteca a tipo variable con un tipo de interés más bajo durante la carencia del principal de 5 años, concretamente permitirá al euríbor - 0,1% frente al Euríbor + 0,25% actual. 

Dentro de estas medidas, que han llegado tras unas intensas negociaciones con la banca aunque sin un texto consensuado al 100% con las entidades, también se amplía a 2 años el plazo para solicitar la dación en pago de la vivienda y se contempla la posibilidad de una segunda reestructuración, en caso necesario.

Las medidas que se han llevado al consejo de ministros consideran que se podrán acoger a estas condiciones los hogares con hipotecas a tipo variable con una renta inferior a 25.200 euros al año (tres veces el IPREM) que dediquen más del 50% de su renta mensual al pago de la hipoteca. 

Los hogares que estén en esta situación, pero no cumplan el criterio actual del incremento de un 50% del esfuerzo hipotecario, puedan acogerse al código con una carencia de 2 años, un tipo de interés menor durante la carencia y un alargamiento del plazo de hasta 7 años. 

Los grandes bancos ya han mostrado en las últimas comparecencias la voluntad que tiene para renegociar deudas hipotecarias con el objetivo de evitar lo ocurrido en la crisis financiera de 2008. 

Descubre más sobre , autor/a de este artículo.

Conoce cómo trabajamos en Business Insider.

Etiquetas: