Despídete del alga hiziki: la AESAN recomienda no consumirla por su alto contenido en arsénico

 Malas noticias si eres consumidor habitual de alga hiziki: la AESAN considera peligroso su consumo debido a la elevada presencia de arsénico, tal y como revelan los últimos estudios prospectivos realizados en la Unión Europea. 

El alga (que no debe confundirse con el alga nori para hacer el sushi o la también popular wakame), se usa en muchos restaurantes japoneses y coreanos como entrante o aperitivo. También llamada hijiki o Hizikia fusiforme, la reconocerás porque es negra, filamentosa, blanda y salada. 

Según la reciente recomendación de la AESAN su consumo debe evitarse siempre que sea posible y reemplazarse con otras algas marinas, así como leer el etiquetado para cerciorarse de que el hiziki no se encuentra entre los ingredientes. El resto de algas están exentas de esta recomendación. 

En todo caso, para quienes consuman alga hiziki, la ebullición es un proceso culinario eficaz para disminuir el riesgo de exposición al arsénico, ya que el proceso reduce la presencia del componente.

La AESAN aconseja a los fabricantes evitar su abastecimiento, comprobar los suministros, no incluirlo en entrantes y aperitivos y para quienes decidan seguirla produciendo, proporcionar recomendaciones de consumo en la etiqueta de los alimentos, en función de las concentraciones de arsénico detectadas.

Arsénico inorgánico, una sustancia cancerígena 

Cabe recordar que el arsénico inorgánico está clasificado por la Agencia Internacional para la Investigación del Cáncer (IARC) como de categoría 1 y por la Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos (EPA) como grupo A: todo ello indica evidencia suficiente de que es un compuesto cancerígeno en humanos. Se ha relacionado con cáncer de vejiga, pulmón y piel.

Pero no solo es cancerígeno, sino tóxico y lesivo a nivel nervioso, respiratorio o cardiovascular. La principal contraindicación de una exposición prolongada son las lesiones en la piel. Además del tabaco, las principales fuentes de arsénico son los alimentos y el agua. 

Existen varias investigaciones previas al respecto: la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA) lanzó en 2009 una evaluación del riesgo sobre arsénico en alimentos y en 2014 una evaluación sobre la exposición alimentaria al arsénico inorgánico en la población europea. También el Comité Científico de la AESAN expuso un documento en 2009 acerca de la posible presencia de arsénico en algas destinadas al consumo humano.

Al revisarse en la UE los fatos para cumplir la Recomendación (UE) 2018/464 de la Comisión, de 19 de marzo de 2018, relativa al control de metales y yodo en las algas marinas se pudo confirmar que las algas de la variedad hiziki contienen altas concentraciones de arsénico inorgánico, siendo por tanto un alimento potencialmente cancerígeno que puede perjudicar tu salud.