Air Europa rechaza la entrada del Estado en su accionariado pese a pedir un rescate de 400 millones de euros para poder pagar las nóminas a partir de octubre

Desde la puesta en marcha en agosto del Fondo de Apoyo a la Solvencia de Empresas Estratégicas, ya han sido 6 las empresas que han presentado, de forma oficial o preliminar, la solicitud para recibir un rescate estatal diseñado para evitar la quiebra de compañías que eran viables antes de la pandemia y que podrían perjudicar a la economía estatal o autonómica si desapareciesen.

Dentro de ese grupo de empresas sistémicas que necesitan dinero público para sobrevivir, el caso de Air Europa es especialmente grave, dado que es la compañía que más ayuda ha pedido al Estado, 400 millones de euros, de que está pendiente de concretarse su venta a IAG y de que la propia aerolínea se encuentra en una situación financiera especialmente acuciante, con apenas dinero para hacer frente a sus gastos corrientes, según avanza Cinco Días.

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El rescate público del Fondo de Apoyo a la Solvencia de Empresas Estratégicas a Air Europa se estructurará en 2 tramos, un préstamo participativo de 201 millones de euros y un crédito de 199 millones, según el diario económico del Grupo Prisa, que añade que la aerolínea ha rechazado expresamente que el rescate incluya la entrada de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI) en su capital social.

Sin embargo, Air Europa podría no estar en la mejor posición para imponer condiciones a un rescate que necesita en cuestión de días. Así, la operación debe realizarse antes del 30 de septiembre, dado que Air Europa pierde entre 25 y 30 millones de euros al mes por el coste de leasing de su flota de aviones y no cuenta con caja suficiente para hacer frente a sus nóminas a partir de octubre, según Cinco Días.

Mientras, la entrada de Iberia y su matriz en Air Europa se produciría después del saneamiento de la aerolínea, por lo que el hólding hispanobritánico ha cuestionado que la situación financiera de la compañía propiedad de Globalia no sea todavía peor de lo que indican sus pérdidas de caja desde el pasado mes de marzo, al inicio de la pandemia.

No obstante, la financiación del Fondo de Apoyo a la Solvencia de Empresas Estratégicas parte del fondo europeo de reconstrucción del coronavirus, por lo que la Comisión Europea también debe dar su visto bueno, una vez que concluya el proceso de auditoría del SEPI y como paso previo a la aprobación del rescate por parte del Consejo de Ministros, según Cinco Días.