Air Europa comienza las negociaciones para impulsar un ERTE ETOP antes de que venzan los de fuerza mayor

Un avión de Air Europa

El 28 de febrero vence la última prórroga de los Expedientes de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) de fuerza mayor, que bonifican una gran parte de las cotizaciones sociales de los trabajadores con el empleo suspendido temporalmente.

Aunque en un principio pudo parecer tiempo suficiente para que la crisis provocada por la pandemia se solventara, al menos en lo que se refiere a los empleos, lo cierto es que sectores como el turístico temen la llegada de esa fecha y que no se tomen nuevas medidas. Ante ese potencial contexto, algunos ya han empezado a reaccionar.

La última ha sido Air Europa, y es que la aerolínea, que no pasa por su mejor momento, ha comenzado esta semana las negociaciones con su representación sindical para impulsar un ERTE ETOP, es decir, no por fuerza mayor, sino por causas económicas, técnicas, organizativas o de producción.

El ERTE, que se prolongaría hasta diciembre de este año, sustituiría al vigente que expira a final de mes y afectaría a todos los centros de trabajo de la empresa, según ha detallado el sindicato de tripulantes de cabina de pasajeros de líneas aéreas (Sitcpla).

Como informa Cinco Días, la compañía aérea de la familia Hidalgo ha solicitado al Gobierno seguir aplicando un ERTE por fuerza mayor hasta junio, pero no se sabrá qué ocurrirá al respecto hasta que este no evalúe mejor la situación a final de febrero.

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Esta incertidumbre es la que ha llevado a la aerolínea de Globalia a tomar medidas para protegerse por lo que pueda pasar –aunque Air Europa desistiría del ERTE ETOP si el Gobierno decidiese ayudarles–, al igual que ya han hecho otras compañías del sector turístico.

Hace tan solo unos días era Viajes El Corte Inglés, compañía dirigida por Jorge Schoenenberger, la que empezaba a tomar decisiones que afectaría a parte de sus cerca de 4.600 empleados.

VECI ha planteado un despido colectivo para 620 empleados del área corporativa y ERTE de un año de un máximo del 60% para los del área vacacional y de viajes corporativos (MICE), así como de hasta el 40% para servicios centrales, quedando fuera de estas medidas los equipos del área tecnológica.

No es la única agencia de viajes en iniciar negociaciones, ya que este subsector ha sido uno de los más afectados por la crisis pandémica.

Ávoris Corporación Empresarial también ha empezado a movilizarse. La agencia de viajes de Barceló cuenta con unos 6.000 empleados, a los que recientemente se les comunicó su intención de empezar a negociar un ETOP, aunque el 80% de la empresa sigue en un ERTE de fuerza mayor.

El Grupo Wamos también ha anunciado su intención de iniciar procedimientos similares debido a la permanente incertidumbre que sigue nublando al sector, una medida que afectaría a agencias como Mapatours, Mapaplus, Pegatur, Terranova y Nautalia.

Esta última está pendiente de que la SEPI apruebe la ayuda de 75 millones de euros solicitada con cargo al Fondo de Ayuda a la Solvencia de Empresas Estratégicas, que ha planteado un ERTE por causas económicas y productivas de un año para 331 trabajadores, según informa Cinco Días.

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