Estos son los alimentos congelados más saludables que debes tener a mano para cuando no te apetezca cocinar

Hay ocasiones en las que te apetece meterte en la cocina y elaborar un buen plato a base de elementos frescos. Sin embargo, hay otras en las que, por falta de tiempo o por pereza, lo único que quieres es comer algo rico que se haga rápido. Para estas últimas ocasiones se inventaron los productos congelados. 

Este tipo de alimentos guardados en el congelador son una auténtica salvación para aquellas noches en las que lo último que quieres es pensar en qué plato puedes cocinar. Eso sí, hay algunos que son mejores que otros en lo que respecta a la salud. 

Eat this, not that!ha destacado algunos de los productos congelados más saludables a los que vale la pena guardarles un sitio en el congelador. Entre ellos, las espinacas. 

Desde que Popeye las popularizó, este alimento ha sido empleado en diferentes platos sabrosos y, sobre todo, saludables. Según la misma fuente, las espinacas están llenas de antioxidantes, ayudan a mejorar la salud ocular y son una de las fuentes principales de calcio, magnesio o hierro. 

Así, es recomendable tener siempre a mano en el congelador una bolsa de espinacas para emplearla en diferentes elaboraciones, desde una tortilla hasta un salteado con ajo e incluso para añadirla a algún batido. 

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Al igual que las espinacas, otro de los alimentos que siempre está bien tener en el congelador por sus propiedades saludables son los guisantes. Es probable que no sean muy fan de su sabor, pero eso es porque no los has probado de la manera adecuada.

Los guisantes pueden emplearse en multitud de elaboraciones, desde añadirlos a la pasta hasta hacer un revuelto con huevos o servirlos de acompañamiento en platos de carne. 

Otro alimento que no debe faltar para descongelar cuando sea necesario son las nueces, probablemente uno de los productos con más beneficios, ya que están llenas de grasas saludables, vitaminas, minerales, proteínas y fibra. 

Además, según el mismo medio, no solo se deben congelar para disponer de ellas en cualquier momento, sino también para preservar sus propiedades, ya que las nueces conservan su calidad durante 1 año en la nevera, durante 2 en el congelador y apenas unos meses a temperatura ambiente.