La propuesta de Amazon para cerrar la investigación antimonopolio de la UE es "débil" y está "llena de lagunas", según varias ONG

Un colectivo de 11 organizaciones no gubernamentales (ONG) ha asegurado a la Unión Europea (UE) que la propuesta de Amazon para cerrar su investigación antimonopolio en Europa es "débil, vaga" y está "llena de lagunas". 

Así lo ha recogido Reuters, que ha detallado que el grupo de ONG está formado por distintas asociaciones como LobbyControl, el Centro de Investigación sobre Empresas Multinacionales, la Cámara Federal de Trabajo de Austria y la Federación Sindical Europea de Servicios Públicos. 

Amazon propone cesar en la UE algunas de sus actividades de venta y comercialización online para evitar las multas a las que se expondría en caso de que la Comisión Europea, el organismo regulador encargado de estos asuntos, la encontrase culpable de ejercer prácticas monopolísticas. 

"Son débiles, vagas y están llenas de lagunas, dejando demasiado espacio para la elusión y el abuso", indica en un comunicado el colectivo de asociaciones en relación a las propuestas de Amazon. "Además, la limitación de estos compromisos a 5 años o, incluso, a cualquier horizonte temporal, es injustificable".

Amazon no ha ofrecido respuesta a estas críticas que hacen eco ahora de las que realizó la semana pasada la Organización Europea de Consumidores (BEUC, por sus siglas en inglés). 

El grupo de ONG ha instado a la Comisión Europea a través de su comunicado a obligar al gigante de la paquetería a disociar sus operaciones de venta minorista y de logística, con el fin de evitar que domine y controle todo la cadena de venta y comercialización de productos, así como los servicios relacionados con esta actividad. 

Acusaciones precedentes

Las acusaciones a Amazon de prácticas monopolísticas no son en absoluto novedosas. Ya en 2019 se avisó de que la compañía logística podría enfrentarse a multas multimillonarias por parte de la Unión Europea, como ya ocurrió con otros gigantes tecnológicos como Google o Apple. 

A mediados de ese año, la comisionada de competencia de la Unión Europea, Margrethe Vestager, planeaba iniciar una investigación sobre Amazon para analizar cómo la empresa utilizaba los datos de terceros en su página web. 

Un año después, en octubre de 2020, fue el propio Congreso de Estados Unidos quien publicó un informe en el que señalaba que Amazon funcionaba como un monopolio en el mercado de comercio electrónico.

El documento, de más de 400 páginas, fue presentado por el subcomité antimonopolio de la Cámara de Representantes de EEUU y en él se estipulaba que la compañía empleaba tácticas que arrinconaban a su competencia. 

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Otro año más tarde, en diciembre de 2021, Italia pasó directamente a la acción, imponiendo una multa a Amazon Europa de más de 1.000 millones de euros por monopolio. 

La sanción, de 1.128 millones de euros, tenía por objetivo condenar la posición de dominio sobre el mercado logístico de la compañía. El regulador de competencia italiano aseguró que Amazon había menoscabado a sus competidores logísticos bajo el servicio Fulfillment by Amazon (FBA).

Ahora la Comisión Europea debe deliberar sobre los comentarios aportados a la investigación que las terceras partes podían presentar en el proceso hasta el pasado 9 de septiembre.