La apuesta de Elon Musk para dirigir Twitter puede ser la victoria que necesita
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- El movimiento de designar a Linda Yaccarino como CEO de Twitter quizás sea el más acertado posible, ya que la antigua directiva de NBCU es muy respetada en el mundo de la publicidad.
- En un momento en el que sus ingresos caen y su reputación lo hace a un ritmo aún más rápido, ella puede ser la baza que Musk necesita.
Elon Musk necesita una victoria.
En los últimos seis meses, las acciones de Tesla han caído un 10%, uno de sus queridos cohetes ha estallado en llamas y los expertos coinciden en que el hombre más rico del planeta ha dejado Twitter hecho un desastre.
Como dice un inversor: "Podría estar llegando al final del juego".
Pero las cosas podrían estar mejorando para Musk. La designación de su sucesora como CEO de Twitter podría ser uno de sus mejores movimientos hasta la fecha.
Linda Yaccarino, que hasta hace poco dirigía la publicidad global y las alianzas en NBCUniversal, acaba de ser nombrada consejera delegada de Twitter, y puede ser lo que la plataforma de Musk necesita para recuperar a anunciantes, editores y expertos en tecnología.
"Únicamente respeto parcialmente muchas de las decisiones de Elon desde que compró Twitter. Sin embargo, la decisión de contratar a Linda es la mejor que ha tomado hasta ahora", explica a Business Insider Jonathan Mildenhall, antiguo director de marketing de Airbnb y actual presidente de la agencia de marketing TwentyFirstCenturyBrand. "Tengo la esperanza de que Twitter recupere un sentido de normalidad y propósito después de leer esta noticia".
"Traer a Linda Yaccarino como CEO de Twitter será una noticia bienvenida por la comunidad publicitaria", comenta Aaron Goldman, CMO de la empresa de software publicitario Mediaocean. "Lo primero en la lista de prioridades para los anunciantes es garantizar la seguridad de la marca a la luz del enfoque más laxo de Musk con respecto a la moderación de contenidos".
"Twitter necesita ingresos publicitarios y quién mejor que" Yaccarino, tuiteó Rich Greenfield, veterano analista de medios y socio de LightShed Ventures.
Yaccarino, que dirigió un negocio publicitario de 13.000 millones de dólares para NBCU, es muy respetada en el mundo de la publicidad: consiguió llevar la marca casi centenaria a la era digital con un enfoque basado en los datos, convirtiéndola en competidora de empresas como Google y Meta. El equipo de ventas de publicidad generó más de 100.000 millones de dólares en ingresos publicitarios durante sus 12 años de mandato, según la empresa.
Además, como defensora clave del paso de NBCU al streaming, tiene experiencia en la venta de anuncios de vídeo, lo que podría resultar útil antes de que el programa de Tucker Carlson llegue a Twitter.
Esos ingresos publicitarios son justo lo que Musk necesita ahora.
Cuando el jefe de Tesla tomó las riendas el año pasado, los anunciantes huyeron de Twitter. Los ingresos cayeron un 40% en diciembre de 2022 frente al mismo mes de 2021, ya que la mitad de los 100 principales anunciantes de la plataforma la abandonaron.
Eso no es bueno para la empresa, sobre todo si se tiene en cuenta que la adquisición de Musk se financió en parte con un paquete de deuda de 13 millones de dólares y que su plan para aumentar los ingresos haciendo que los usuarios paguen por los tics azules no va precisamente bien.
Musk espera que las buenas relaciones y la experiencia de Yaccarino sean suficientes para que fluya el dinero.
Pero Musk aún no está seguro.
Como dice Lou Paskalis, veterano del marketing y director de estrategia de Ad Fontes Media: "Reclutar a Linda para el puesto de CEO es el movimiento más inteligente que puede hacer, pero también es la última carta que le queda por jugar".
No hay mucha gente que quiera trabajar con Musk, a medida que sus antiguos amigos tecnológicos se vuelven contra él y se hace más evidente su propensión a despedir incluso a los empleados más leales.
Yaccarino podría haber sido una de sus únicas opciones viables. La ávida tuitera ha apoyado a Musk a lo largo de su adquisición de Twitter y ha respaldado la campaña de Musk a favor de la desregulación de Twitter, o lo que él denomina libertad de expresión.
"No me sorprende que la contratara. Parecen tener puntos de vista afines, eso es bien sabido en NBCU", afirma una fuente de NBCU, que ha pedido permanecer en el anonimato para poder hablar libremente sobre la empresa y sus dirigentes.
Puede que el hecho de acercarse a Musk le haya ayudado a conseguir el puesto, pero puede que su tarea más difícil sea controlarle.
Después de todo, incluso el anuncio de su incorporación produjo un caos total.
Musk y Yaccarino no han respondido de forma inmediata a las peticiones de comentarios de Business Insider.
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