Sudáfrica deja de administrar la vacuna de AstraZeneca por su falta de eficacia ante la variante sudafricana, mientras que la farmacéutica reconoce trabajar en una versión centrada en combatir la nueva cepa
- Sudáfrica ha anunciado que suspende la administración de la vacuna de AstraZeneca ante nuevas evidencias de la falta de eficacia de esta inyección frente a la cepa sudafricana.
- Aunque la inyección podría ayudar a reducir casos más graves de coronavirus, los desarrolladores de la farmaceútica han afirmado estar trabajando en una nueva versión de la vacuna centrada en combatir esta nueva variante del virus.
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Las nuevas cepas de coronavirus están posicionándose como una amenaza clave en la lucha mundial por detener la pandemia a medida que los países avanzan en su proceso de vacunación de la población.
En concreto la variante sudafricana, la cual ya ha mostrado evidencias de ser más resistente frente a las vacunas desarrolladas.
Un reciente estudio llevado a cabo por la Universidad de Witwatersrand en Johannesburgo, afirma que esta inyección "brinda una protección mínima" contra la nueva variante del coronavirus sudafricana.
A tenor de estas evidencias, Sudáfrica ha decidido este domingo suspender de manera temporal su campaña de vacunación contra el COVID-19, basada en un millón de dosis de AstraZeneca y la Universidad de Oxford.
"El lanzamiento de la vacuna AstraZeneca debe detenerse temporalmente mientras recibimos la información de eficacia clínica", dijo Salim Abdool Karim, epidemiólogo de la Universidad de Columbia y parte de una comisión que asesora al gobierno sudafricano, en declaraciones recogidas por Insider.
El anuncio coincide con la llegada, este fin de semana, a nuestro país de las primeras dosis de AstraZeneca, que serán destinadas a personas de entre 18 y 55 años, dada la falta de datos sobre cómo afecta la solución a los grupos de edad superiores.
Resultados similares encontró otro pequeño estudio, centrado en una muestra de algo más de 2000 individuos y según el cual la vacuna de Oxford-AstraZeneca ofrecía menos protección contra la cepa identificada por primera vez en Sudáfrica.
En dicha investigación — que aún no ha sido revisada por pares — ninguno de los participantes murió o fue hospitalizado, pero no se han podido saber sus efectos ya que todos los voluntarios eran adultos jóvenes sanos, lo que reducía las probabilidades de desarrollar un cuadro grave. Lo cual abre la puerta a la posibilidad de que aunque la eficacia de la vacuna se reduzca ante la cepa sudafricana, permita evitar hospitalizaciones o casos severos, como apunta Sarah Gilbert, líder del programa de vacunas de la Universidad de Oxford-AstraZeneca.
"Creemos que nuestra vacuna podría proteger contra enfermedades graves, ya que la actividad de los anticuerpos neutralizantes es equivalente a la de otras vacunas Covid-19 que han demostrado actividad contra enfermedades más graves, especialmente cuando el intervalo de dosificación se optimiza a 8-12 semanas", aseguró Gilbert este domingo a la BBC.
AstraZeneca está desarrollando una nueva vacuna contra la cepa sudafricana
La vacuna desarrollada por AstraZeneca no es la primera vacuna que tiene problemas con la variante sudafricana. Tanto Johnson & Johnsoncomo Novavax han visto como sus dosis son menos efectivas contra esta cepa, según los resultados de sus ensayos clínicos. Pfizer y BioNTech también comentaron la reducción de efectividad de su vacuna frente a esta variante, pero todavía no han publicado las conclusiones contrastadas.
Ante este escenarios, desde AstraZeneca y Oxford afirman estar ya trabajando en una nueva vacuna centrada en combatir de manera más efectiva la cepa.
"Es fácil adaptar la tecnología. Este año esperamos mostrar que la nueva versión de la vacuna generará anticuerpos que reconocen la nueva variante y después será muy parecido a trabajar en vacunas contra la influenza", comentó Gilbert en la cadena británica, asegurando que es muy probable "que la nueva inyección esté disponible en otoño".
No son los únicos desarrolladores que ya han anunciado estar trabajando en nuevas versiones para hacer frente a estas variantes del virus.
Pfizer y BioNTech reconocieron que su vacuna podría modificarse a nuevas cepas en solo 6 semanas, mientras que Novavax y Moderna buscan crear una nueva vacuna de refuerzo para luchar contra la cepa sudafricana y evitar problemas de efectividad.
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