El Banco de Inglaterra se suma a la lista de bancos centrales que estudian la emisión de una criptodivisa tras el terremoto provocado por Libra, el Bitcoin de Facebook

El Banco de Inglaterra ha comunicado que analizará si es conveniente Reino Unido adopte una criptodivisa al estilo del Bitcoin, pero dentro del sistema monetario respaldado por este banco central. La institución se suma así a otros reguladores que están estudiando, o ya lo han hecho, la posibilidad de emitir una divisa digital. 

El anuncio Facebook de crear una criptodivisa llamada Libra, en teoría, para facilitar los pagos en los países emergentes puso a la defensiva al sistema financiero tradicional que vio una amenaza ante la irrupción de un actor privado con un tamaño global y la posibilidad de desestabilizar las monedas de algunos países. 

De esta forma, Reino Unido se sumará al grupo de trabajo formado por el Banco Central Europeo junto con el Banco de Japón, el regulador sueco, el Banco de Canadá o el Banco Central Suizo para examinar las posibles trampas que se generen alrededor de una posible divisa electrónica.

Entre los casos que analizará el grupo se encuentran las opciones que pueden existir para estas criptodivisas, que en la jerga del sector se denominan por las siglas CBDC, para ver cómo pueden funcionar entre países o cuáles son las opciones de diseño desde el punto de vista económico y técnico. 

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Además, el objetivo es coordinarse con el Consejo de Estabilidad Financiera y el Comité de Pagos e Infraestructuras del Mercado para analizar su encaje completo dentro del esquema tradicional del sistema financiero. 

El anuncio de Facebook del año pasado en el que explicó que estaba preparando el lanzamiento de una criptomoneda con el nombre de Libra para permitir los pagos entre particulares espoleó a los reguladores y actores tradicionales, que veían esto como una amenaza para el status quo existente. Pero también ha servido para movilizar a estos actores para analizar si hay posibilidades de mejora en el sistema tradicional. 

Las posibilidades que, al menos sobre el papel, supondría la moneda digital de Facebook en temas como la inmediatez de los pagos o la inclusión financiera son algunos de los puntos que analizan ahora los bancos centrales de los países desarrollados para analizar si tiene sentido el lanzamiento de una divisa digital respaldada por las instituciones monetarias.