Por qué los bonos corporativos españoles se encuentran como los mejor posicionados para afrontar una desaceleración

Victoria de la selección española de fútbol.
  • Tras las reformas en el mercado laboral y las pensiones, España ha podido mejorar significativamente “su productividad, diversificar su industria y desarrollar una Importante economía orientada a la exportación, explica S&P Global Ratings.
  • La agencia apunta que las empresas españolas han sufrido “un impresionante proceso de desapalancamiento”, reduciendo su apalancamiento financiero en más de 40 puntos porcentuales del PIB en los últimos 10 años a aproximadamente el 80% del PIB, sobre la base de un fuerte crecimiento. 
  • Las empresas españolas deben mantener una calidad crediticia estable durante este período, según S&P.
  • Descubre más historias en Business Insider España.

Las empresas españolas están entrando en un período de desaceleración del crecimiento económico en una posición de relativa fortaleza. Después de sufrir una grave crisis económica entre 2008 y 2013, las reformas han dado sus frutos en forma de una recuperación económica significativa desde 2014, según expone la agencia S&P Global Ratings

La agencia de calificación destaca que, tras las reformas en el mercado laboral y las pensiones, España ha podido mejorar significativamente “su productividad, diversificar su industria y desarrollar una Importante economía orientada a la exportación”

Desde 2014, la economía española se ha expandido rápidamente y lo sigue haciendo más rápido que la media europea, impulsada por una demanda interna sólida y impulsada por una reducción sustancial de la deuda de los hogares y el bajo coste de financiación para las empresas. 

El sector bancario español también ha hecho un progreso constante hacia la restauración de su capacidad crediticia, lo que ha estallado por la explosión de la burbuja inmobiliaria y la subsiguiente recesión económica.

¿Cuál es el resultado de todo esto? ¿Cómo se encuentran los bonos corporativos españoles? La agencia apunta que las empresas españolas han sufrido “un impresionante proceso de desapalancamiento”, reduciendo su apalancamiento financiero en más de 40 puntos porcentuales del PIB en los últimos 10 años a aproximadamente el 80% del PIB, sobre la base de un fuerte crecimiento. 

Peso de la deuda corporativa sobre el PIB

Esto se ha visto acompañado por una mejora en los márgenes de beneficios en varias industrias, que ahora están por encima del promedio de la eurozona, aunque la rentabilidad (medida como EBITDA para activos totales) aún es inferior a los niveles de 2004-2007 para algunas industrias

Leer más: 5 grandes cotizadas que apuestan cada vez más por la emisión creciente de la deuda sostenible

El aumento de las exportaciones de muchas empresas españolas en los últimos años también ha sido un avance positivo. En general, destacan desde S&P que, como resultado de estas tendencias, “las empresas españolas ahora tienen un modelo de negocios más sólido y diversificado y un mejor perfil financiero, lo que debería ayudarles a soportar una perspectiva de tasas de crecimiento más lentas en España y en la zona euro en el próximo dos años”.

Por otro lado, España también está expuesta a algunos desafíos externos, en particular el Brexit, la debilidad de la actividad comercial en todo el mundo y la subida de los precios del petróleo, todo lo cual podría “tener un impacto negativo en las empresas españolas”. 

A pesar de esto, esperan que la economía española supere a la eurozona en términos de crecimiento durante 2019 y 2020 y, a menos que se produzcan eventos imprevistos, “las empresas españolas deben mantener una calidad crediticia estable durante este período”.

Las mayores ganancias corporativas y el menor apalancamiento financiero ayudan a la recuperación económica

Después de un impresionante proceso de desapalancamiento durante la última década, la deuda corporativa no financiera española representó alrededor del 80% del PIB del país a finales de 2018. Este desapalancamiento, junto con los bajas tipos de interés liderados por el Banco Central Europeo, casi ha reducido a la mitad “la carga de intereses de las empresas desde 2012”, y también disminuyó “significativamente la exposición de España a un aumento en los costos de endeudamiento”.

La clave de esta tendencia de desapalancamiento ha supuesto una mejora en los márgenes de beneficios corporativos en varias industrias, lo que permite a las empresas “confiar en el financiamiento interno para expandir sus negocios”. 

Los márgenes de beneficio fueron de media el 43% del valor agregado bruto, cinco puntos porcentuales más el pasado año que en 2008, y el más alto entre los países más grandes de la eurozona. De ahí a la posición privilegiada de los bonos corporativos españoles para afrontar un proceso de crisis.

El recorte en la tasa impositiva corporativa del 35% en 2007 al 25% aplicado desde 2016 ayudó a impulsar las ganancias. Las empresas también han podido mejorar su competitividad a través de recortes salariales dolorosos entre 2009 y 2014 en el respaldo de la reforma del mercado laboral y, lo que es más importante, “diversificando sus mercados de exportación y ofreciendo productos de mayor valor agregado”, concluye la agencia para justificar que la deuda de las compañías goza ahora de una mayor salud.

Descubre más sobre , autor/a de este artículo.

Conoce cómo trabajamos en Business Insider.