Las cadenas de supermercados se lanzan a contratar para afrontar el aluvión de compras por la cuarentena en el país europeo con mayor número de tiendas por persona

Clientes hacen cola para entrar en el Bonpreu durante la crisis del coronavirus
Clientes hacen cola para entrar en el Bonpreu durante la crisis del coronavirus
  • Los supermercados esquivan el impacto económico negativo que la crisis del coronavirus está provocando en la economía española y obligando a fuertes recortes temporales de plantilla en sectores como el turismo o la moda. 
  • El consumo que hasta el estallido de la pandemia se realizaba en bares y restaurantes y en los comedores colectivos lo absorbe ahora el gran consumo, lo que provocará un crecimiento en sus ingresos.
  • La semana del 9 de marzo, las ventas de alimentación se dispararon un 71% y se espera que la progresión se normalice en torno a un alza del 9%.
  • Algunos grupos de distribución como Dia o Mercadona han anunciado contrataciones para reforzar sus equipos especialmente, en almacenes y en la preparación de pedidos. 
  • Los supermercados más pequeños y los regionales, por su cercanía a los hogares y su oferta, han logrado aumentar su cuota de mercado en plena crisis sanitaria.
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Cintillo especial Coronavirus

Los supermercados esquivan el impacto negativo de la crisis del coronavirus y de las medidas para contener su propagación. Por el contrario, las cadenas de distribución de alimentación han visto cómo sus estanterías se vacían precipitadamente, la afluencia se multiplica y sus ventas suben. Y este paradigma, que tan cotidiano se ha vuelto en las tiendas, se traslada también al online, que implementa sistemas de colas virtuales y baraja plazos de entrega de más de una semana para dar respuesta a una demanda que se ha disparado.

Como servicio de primera necesidad, las cadenas de alimentación no sólo no han tenido que cesar su actividad sino que la han reforzado. Al principio, porque los consumidores hicieron acopio de víveres y provisiones como si no hubiera un mañana y, tras dos semanas de confinamiento, porque ese consumo que antes se realizaba fuera de casa ahora se realiza dentro.

Uno de los motivos, según explica a Business Insider Ignacio Biedma, experto en distribución de Nielsen, es que esas dietas que los niños hacían antes en el colegio y los trabajadores en los comedores del lugar de trabajo se han trasladado ahora a casa. “Hay muchas ocasiones de consumo en el hogar. Todo ese consumo que antes se hacía en comedores colectivos y restauración tradicional, hoy debe ser absorbido por los supermercados, lo que llevará a un crecimiento de sus ventas”, analiza.

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No en vano, el sector de distribución de alimentación no sólo es un servicio esencial, sino que opera a un a un ritmo superior al habitual. Y el resultado no ha sido otro que un incremento del 71% en las ventas en la semana del 9 de marzo, cuando se empezaron a tomar medidas para contener la propagación del coronavirus, según los datos de Nielsen. Semana, además, en la que el ticket medio ascendió a 121 euros, frente a los 100 euros de la semana anterior, tal como apunta un estudio de Kantar.

Biedma estima que las ventas se normalizarán a lo largo de las próximas semanas y mantendrán un crecimiento de en torno al 8% o 9%, “una vez superada la primera fase de ir corriendo a las tiendas”.

Se refuerzan sus equipos y hasta los directivos echan una mano en los almacenes

La demanda de productos de alimentación en las tiendas físicas crece y también lo hace, especialmente, la demanda online. Para dar respuesta a ese mayor volumen, las empresas de alimentación avanzan en sentido contrario a sectores que están presentando Expedientes de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) y refuerzan sus plantillas con la contratación de nuevos empleados.

“Están reforzando los equipos”, avanza el responsable de retail de Kantar WorldPanel, Florencio García, en una entrevista con Business Insider. “Muchos directivos de estas empresas están implicándose a tal nivel de que están ayudando en los almacenes. Incluso algunos distribuidores han anunciado contrataciones y el momento es complicado porque hacer la entrevista o una reunión es difícil”, avanza el experto. 

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García asegura que, si bien la prioridad continúa estando en las tiendas, habrá también un refuerzo de la plantilla para la venta online. En este sentido, avanza que los jugadores tradicionales están haciendo un esfuerzo para satisfacer la demanda en ambos canales “reforzando almacenes, tiendas, la seguridad...”, enumera. 

No hay más que pensar en el caso del grupo Dia. La cadena de alimentación ha salido bien parada de esta situación de confinamiento arañando cuota de mercado y haciendo de su capilaridad su gran baza para dar respuesta a la venta online. Por ese motivo, ha contratado 1.000 nuevos empleados, especialmente para preparación de pedidos. 

También Mercadona recluta personal para responder a la elevada demanda que está experimentando ya desde los días previos a la declaración del estado de alarma. La cadena valenciana busca ampliar su equipo con 500 nuevas contrataciones, especialmente personal de almacén que garantice el abastecimiento de las tiendas.

Los supermercados pequeños y los regionales ganan cuota y Dia resurge

En su estudio, Kantar asegura que los supermercados más pequeños, por su cercanía a los hogares y su oferta, fueron los principales beneficiados de las medidas de contención de la pandemia y que su cuota de mercado aumentó un 3%. También han repuntado las ventas en los supermercados regionales. Estas cadenas, a menudo ubicadas en el centro de las ciudades, elevaron su cuota de mercado conjunta en 1,2 puntos porcentuales.

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Otro de los grandes beneficiados de la situación es el grupo Dia, cuya cuota de mercado ascendió hasta el 6,6%. Arropado por su red de tiendas que le confiere más capilaridad, “a menudo se convierte en el supermercado más cercano al que ir a comprar”, explica el responsable de retail de Kantar. 

Mientras, otros nombres consolidados como Mercadona y Lidl ven caer ligeramente su cuota, algo inferior a la media anual, con un 24,2% y un 5,7% respectivamente. Lejos de hacer una lectura negativa de tal dato, esta situación sencillamente refleja que otros supermercados que aumentando sus volumen sin que los ingresos de Mercadona y Lidl se hayan visto lastrados.

En el país europeo con la mayor número de tiendas por persona, a razón de un establecimiento por cada 800 consumidores, el mayor reto se encuentra en dar respuesta a este incremento de la demanda con un servicio satisfactorio para el cliente. Especialmente, en la tienda online, explica el experto de Kantar, que advierte de que los plazos de entrega de más de una semana y las colas virtuales podrían suponer una mala experiencia para el cliente.

“El retail físico está muy preparado porque al final, aunque veamos colas, todo el mundo tiene tiendas cerca de casa. Las plataformas online son más limitadas. Todo el mundo trata de comprar en ellas pero hay más dificultades”, sentencia García. 

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