CaixaBank y Bankia culminarán su fusión en 2021 y defienden que es una "buena decisión", con "independencia de que la recuperación" del rescate "sea mayor o menor"

José Ignacio Goirigolzarri y Gonzalo Gortázar, presidente y consejero delegado de la entidad resultante de CaixaBank.
José Ignacio Goirigolzarri y Gonzalo Gortázar, presidente y consejero delegado de la entidad resultante de CaixaBank.
  • CaixaBank y Bankia culminarán su fusión a finales del primer trimestre de 2021, una vez se cuenten con las preceptivas autorizaciones del Gobierno, la CNMC, el Banco de España y el BCE.
  • Goirigolzarri, el nuevo presidente ejecutivo de la entidad resultante, ha defendido que la fusión es "una buena decisión, con independencia" de que se recupere o no la totalidad del rescate que inyectó el Estado a Bankia.
  • Ha mantenido esta postura al defender que los accionistas podrían recibir un incremento del valor de sus acciones de hasta el 70% en los próximos años.
  • La entidad resultante alcanzará una cuota de mercado de hasta el 25%, en la línea que muchas entidades europeas tienen en sus respectivos mercados con sectores financieros en consolidación.
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Gonzalo Gortázar, CEO de CaixaBank, y José Ignacio Goirigolzarri, presidente de Bankia, han oficializado este viernes la fusión de ambas entidades. Gortázar seguirá siendo CEO en la nueva entidad, mientras que Goirigolzarri asumirá el puesto de presidente ejecutivo.

El nuevo banco, el más grande de España por volumen de activos, mantendrá la marca de CaixaBank. Ambos directivos han dado más detalles de la operación corporativa, clave para el sector financiero español en este turbulento año 2020. Será una fusión por absorción y desde hace unas horas se conoce cuál será la ecuación de canje: 0,6845 acciones ordinarias nuevas de CaixaBank por cada acción de Bankia, con una prima del 20% sobre el valor de la entidad nacionalizada.

La fusión en sí culminará en el primer trimestre de 2021, han advertido tanto Gortázar como Goirigolzarri, quienes también han confirmado una senda para ahorrar costes de 770 millones de euros cada año. Sin embargo, este ahorro recurrente no será pleno hasta el año 2023. "En 2021 todavía quedará mucho trabajo por hacer".

Para el primer cuarto del año que viene, la nueva entidad resultante espera contar con las autorizaciones necesarias, tanto del Ministerio de Economía como de los preceptivos informes del Banco de España, del Banco Central Europeo y de la Comisión Nacional del Mercado y la Competencia. "Una vez se reciban las autorizaciones, podremos pasar a completar la fusión, que esperamos que sea hacia el final del primer trimestre de 2021. Si podemos hacerlo antes, lo haremos".

"Una buena decisión", al margen de la recuperación de las ayudas públicas inyectadas en Bankia

Goirigolzarri no está de acuerdo con la preconcepción de que "si no se recuperan todas" las ayudas públicas que se inyectaron en Bankia, entonces la fusión "no es una buena decisión".

El nuevo presidente ejecutivo de la entidad fusionada ha recordado que "cuando hablábamos en su momento de la recuperación de Bankia, no hablábamos desde luego de salvar a los accionistas ni salvar a los banqueros, ya que todo el Consejo de Administración salió sin ninguna indemnización. Tampoco de salvar a las personas que trabajaban en Bankia, que tuvieron que hacer un enorme sacrificio".

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En su defecto, Goirigolzarri ha incidido que cuando se habló del rescate a la entidad se habló de "salvar a los depositantes". "Si el Fondo de Garantía de Depósito hubiese tenido que hacer frente a la obligación que tiene con cualquier depositante de salvaguardar sus primeros 100.000 euros, hablaríamos de 60.000 millones de euros y no de los 20.000 millones". Algo más de 20.000 millones es la cantidad de dinero público que el Estado inyectó para rescatar a los clientes de la entidad.

"La prima de riesgo en aquel momento estaba por encima de los 600 puntos básicos. Cada 100 puntos básicos son 10.000 millones de euros al año. Las razones por la que la prima estaba tan alta fueron varias, pero desde luego fue por el sistema financiero y por Bankia". Por tanto, ha defendido que "como consecuencia de aquella inversión, se estabilizó el sistema financiero".

La operación corporativa "es muy positiva" desde el punto de vista del accionista. El Estado pasa de controlar el 61,8% de Bankia, como accionista de control, a contar con el 16% de la nueva entidad resultante. Pero Goirigolzarri entiende que, además de la prima, el accionista se beneficiará "de una entidad con mayor rentabilidad".

"Para 2022 podríamos tener incremento del beneficio por acción de casi el 70%". Y esto, según el nuevo presidente ejecutivo de la entidad fusionada, "no es una teoría, sino práctica. Desde que se anunció que estábamos en conversaciones, el valor de Bankia ha incrementado un 40%".

"No hemos recibido ningún tipo de presión"

El FROB mantendrá un asiento en el Consejo de Administración de la nueva entidad, aunque Goirigolzarri ha apuntado que "cuando se traslada el 60% que tiene el Fondo de Reestructuración en Bankia al 16% [de la nueva entidad] su estatus cambia".

"En primer lugar, pasa a no ser un accionista de control absoluto. Pasa a ser el segundo accionista y no el primero, y toma la decisión lógica de incluir un consejero dominical que no tenía en Bankia porque no lo necesitaba".

Ante ello, el presidente ejecutivo espera encontrar que el consejero del FROB "mantendrá la misma posición de profesionalidad, ayuda e independencia" con respecto al resto de miembros del nuevo Consejo. "No veo ningún cambio de lo que ha sido la realidad en los últimos años de forma muy consistente, y que además nos ha dado muy buenos resultados".

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"Respecto a la salida del FROB; por un lado el Gobierno y la propia vicepresidenta de Economía han comentado de forma clara que su objetivo es la eventual privatización de Bankia. Pero también que lo que se quiere es optimizar y maximizar el valor de esa salida".

"La privatización, recuerdo, tiene una fecha definida que es el 31 de diciembre de 2021. Y ese no es ningún compromiso con el BCE ni con Bruselas: es fruto de una ley española", ha incidido.

Goirigolzarri también ha rechazado haber recibido ningún tipo de presión por parte del Gobierno para el mantenimiento del consejero del FROB.

"La marca sigue teniendo connotaciones negativas derivadas del pasado"

Oficinas de Bankia y CaixaBank.
Oficinas de Bankia y CaixaBank.

"Una marca es el reflejo del trabajo de la gente". Goirigolzarri ha reconocido a preguntas de OkDiario que le dará "pena" desprenderse de la marca Bankia.

"Tomamos una decisión de mantener la marca que fue un acierto. La desaparición, por llamarla de alguna manera, de la marca Bankia, me da mucha pena. Eso es absolutamente claro. En el año 2012 era una marca muy tocada, y gracias al esfuerzo de todos los que trabajamos en Bankia, la barca se revitalizó".

"Dicho esto", continuó el directivo, "sigue siendo una marca con connotaciones negativas". Por eso se ha apostado por mantener la marca de CaixaBank, "mucho más asentada".

CaixaBank y Bankia ante la nueva realidad del sistema financiero

Gortázar y Goirigolzarri arrancaron la rueda de prensa de este viernes compartiendo unas primeras impresiones sobre la operación corporativa. Este último reconoció que esta era necesaria por el momento "complejo y de grandes retos estratégicos" que vive el sistema financiero español.

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A juicio del directivo de la entidad nacionalizada, los principales retos del sector son "la revolución tecnológica retroalimentada con los cambios de hábito de clientes, los años de baja rentabilidad y la crisis del coronavirus".

Por esta razón, también ha defendido la fusión con CaixaBank porque la entidad resultante debía reunir varias características: "un tamaño crítico, una robustez financiera y una rentabilidad sostenible".

Pero además, "la pareja a encontrar debía reunir otra característica más: compartir valores". "Un valor intangible pero de enorme importancia para reducir el riesgo de implementación e integración".

CaixaBank, tras absorber a Bankia, asumirá una cuota de mercado de entre el 24% y el 25%, lo que según ha explicado Gortázar se enmarca con los datos de consolidación de los mercados financieros de otros países europeos. Así, Rabobank reúne una cuota en Países Bajos del 33%, el Crédit Agricole Group en Francia del 29%, e Intesa y UBI en Italia del 21%.

"Los intangibles no están en los estados financieros, pero forman parte del alma de las organizaciones y es clave para sus resultados", ha insistido Goirigolzarri, que ha defendido un "compromiso con la sostenibilidad, con la creación de un banco más fuerte" para "apoyar en la recuperación económica de nuestro país, apoyando a las familias y a las empresas a salir de la compleja situación en la que la pandemia nos ha situado".

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