Castañas al horno: el tiempo y la temperatura para que queden perfectas, según Karlos Arguiñano

Preparar castañas al horno es uno de los mejores placeres del invierno, y una forma exquisita de disfrutar de este fruto seco de temporada.

Lo primero que tienes que hacer para conseguir unas buenas castañas asadas es elegirlas bien: apuesta por comprar aquellas de color marrón pardo brillante y carentes de manchas y cortes. Es recomendable elegir los ejemplares más grandes y que pesen. En todo caso, escoge castañas del mismo tamaño, ya que de lo contrario, algunas saldrán del horno crudas, y otras, hechas.

También es importante vigilar que las castañas no estén agujereadas, o podrían contener un bicho. Las más planas son difíciles de pelar. En casa, guárdalas en un lugar fresco y seco mientras no las utilices.

Antes de lanzarte a encender el horno y disfrutar del rico aroma otoñal de las castañas asadas, lávalas y sécalas del todo, eliminando todo rastro de humedad. Luego, haz un corte profundo: lo habitual es en forma de cruz, pero también puedes hacerlo en un lateral. Debe ser un corte limpio, que permita ver el interior. Así, el interior de la castaña podrá respirar bien.

Temperatura y tiempo ideal para las castañas asadas, según Karlos Arguiñano

El chef Karlos Arguiñano, famoso por su divulgación de cientos de recetas tradicionales, caseras y sencillas de preparar —desde los huevos a la flamenca a la sopa de almejas y gambas—, tiene sus trucos para preparar las castañas al horno. 

Precalienta el electrodoméstico durante unos 10 minutos y hornea las castañas a 200 °C durante 20 o 25 minutos. El tiempo varía ligeramente según el tamaño de la castaña. Sazona por encima y sirve.

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Desde el punto de vista nutricional, asar las castañas es la mejor forma de prepararlas: al horno tienen más cantidad de aminoácidos, fibra insoluble y fibra total, según estudios de la Universidad portuguesa de Trás-os-Montes e Alto Douro (UTAD). Los aminoácidos son un 13% más biodisponibles en las castañas tostadas y un 12% en las asadas que en las crudas y cocidas.

Las castañas al horno también tienen más proporción de minerales como magnesio, calcio, potasio y proteína. La proporción de manganeso, cobre y hierro es la misma en los diferentes tipos de cocinado.

5 recetas con castañas originales y divertidas

Estas son algunas recetas en las que puedes incluir castañas asadas para degustar platos otoñales exquisitos. 

Gracias a su versatilidad, puedes aprovecharlas tanto en platos dulces como salados.

• Albóndigas de castañas con salsa al limón: una receta vegana de Living Like a Panda. Las albóndigas están hechas con judías, soja texturizada y castañas de temporada, acompañadas de rica salsa al limón con un ligero toque a mostaza. También puedes preparar sus hamburguesas veganas de castañas y lentejas.
• Estofado de jabalí con castañas: El blog The Cook Monkeys, proponen este estofado típico de otoño en el que la carne de jabalí se macera durante 2 días. Entre sus sabores encontrarás vino tinto, castañas, hierbas provenzales, clavo, pimienta, cebolla o vinagre.
• Risotto de setas y castañas: En la web de Bon Viveur podrás encontrar este rico risotto de temporada. "Los aromas terrosos de las setas combinan de maravilla con el dulzor de la castaña y la sapidez del queso Parmigiano rallado", explican sus especialistas.
• Ensalada de espinacas, remolacha y castañas rehogadas con mantequilla: Es una idea de El Comidista en YouTube para aprovechar las castañas. Ideal con un poco de queso Gorgonzola.
• Flan de castañas: Un postre delicado y delicioso para aprovechar el potente sabor de la castaña. En el canal Sabores del Cantábrico explican cómo hacerlo paso a paso. Ideal para los más golosos.

Recuerda que las castañas destacan por sus múltiples beneficios nutricionales: tiene menos calorías y grasa que otros frutos secos, es una gran fuente de aminoácidos, antioxidantes, fenoles, vitamina C, folatos o potasio. 

Además, son ideales para deportistas por su contenido en carbohidratos complejos.