Este CEO contrata y luego ofrece 4.500 euros a sus empleados para que se vayan: así explica los motivos

Muchos empresarios de una amplia gama de sectores han tenido dificultades para encontrar y retener personal a lo largo del mundo.

También en Estados Unidos, que padece escasez de mano de obra en todo el país. En noviembre, una cifra récord de 4,5 millones de estadounidenses abandonaron sus puestos de trabajo. En muchos casos, la gente ha citado como factores las malas condiciones de trabajo y los bajos salarios.

En un intento de asegurar a los trabajadores, las empresas han subido los salarios, ofrecido primas de contratación y proporcionado beneficios educativos para atraer a más personal. 

Sin embargo, incluso en medio de estos cambios, la escasez de mano de obra ha persistido en el nuevo año, y un estudio realizado en noviembre sugiere que el problema podría continuar más allá de 2022, a pesar de los esfuerzos de los empresarios.

No obstante, una empresa ha encontrado un enfoque novedoso para encontrar y retener el talento. 

Chris Ronzio, director general de Trainual, una empresa de software de Arizona (EEUU) que ayuda a las pequeñas empresas a incorporar, formar y escalar equipos, cuenta a Business Insider que paga a los empleados para que renuncien. 

Afirma que la estrategia le ha ayudado a conservar los mejores talentos del sector, así como a mantener una cultura empresarial sólida.

"Con el mercado actual, los equipos de contratación tienen que actuar con rapidez para evaluar a los candidatos y llevarlos a través del proceso hasta una oferta competitiva, por lo que es imposible acertar el 100% de las veces", explica Ronzio.

"La oferta de renuncia permite que se asiente la polvareda de un proceso rápido y que el nuevo miembro del equipo lance una bandera roja si no se siente entusiasmado", añade.

Ronzio instituyó la política de pago por renuncia en mayo de 2020. En ese momento, la empresa ofrecía a los empleados 2.500 dólares (unos 2.200 euros) por renunciar después de 2 semanas si tenían alguna duda. Ninguna de las 38 personas que contrataron desde que se implementó la política ha aceptado la oferta. La empresa ha aumentado recientemente la cantidad a 5.000 dólares (4.400 euros).

"Nos fijamos en nuestro salario medio cuando pensamos en cambiar la cuantía y al final pensamos que si alguien gana 80.000 o 100.000 dólares al año (entre 70.000 y 90.000 euros), 2.500 dólares podrían no ser lo suficientemente significativos", comparte Ronzio: "Podrían decidir quedarse mientras buscan otro trabajo porque ganarían más quedándose. Así que ajustamos la cifra teniendo en cuenta eso".

Como empleador, Ronzio sostiene que es responsable de construir una cultura inclusiva. Cree que dar a los empleados un incentivo económico y el poder de "despedir a la empresa" envía un mensaje convincente en la construcción de la cultura. "Es algo poderoso para ellos rechazar el dinero, participar y comprometerse. Y sienta las bases para una gran relación de trabajo", analiza. 

Además, obliga al equipo de contratación a rendir cuentas, ya que si se equivoca tiene un coste para la empresa, añade Ronzio. 

La lógica que subyace a la ventana de 2 semanas es que hay menos interrupciones en el negocio que las que se producirían tras un periodo de tiempo más largo, cuando la empresa ha invertido más en el empleado.

¿Pero qué pasa con los trabajadores que deciden quedarse? Ronzio dice que los empleados no reciben ningún incentivo específico por seguir en la empresa: "Los que rechazan los 5.000 dólares se pierden algo 'extra' en este punto de la línea de tiempo porque creen que el valor a largo plazo de seguir con nosotros vale mucho, mucho más".