6 claves para seguir el 2023 político: del riesgo que corre Sánchez de quedarse solo a los desafíos de Ciudadanos o Sumar ante las elecciones

Pedro Sánchez, presidente del Gobierno de España.

REUTERS/David W Cerny

  • 2023 es, ya sí, el último año de legislatura. Las elecciones generales serán en unos meses, pero la acción política del Gobierno no está exenta de riesgos.
  • Un cierre en falso del procés, cuyo fin ha llegado, según entiende Moncloa, podría dejar al Gobierno sin la mayoría parlamentaria que le ha acompañado estos años.
  • El Ejecutivo no tendrá que preocuparse por nuevos presupuestos, pero sí abordar la renovación del Poder Judicial o esperar a la configuración de la plataforma Sumar.

España celebrará varias elecciones este 2023 en un escenario inédito: pocas legislaturas habían sido tan convulsas e inciertas en lo económico y sanitario como la XIV que ahora llega a su fin. El propio presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha llegado a ironizar al respecto: "Salvo una invasión zombi, este Gobierno ha tenido que enfrentarse a situaciones absolutamente inéditas".

Los últimos barómetros del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) dibujaban a finales de 2022 un escenario en el que el PSOE seguiría venciendo en las elecciones, pero el PP sigue recortando distancia. Las mayorías del bloque progresista y el bloque de la derecha —en el que se aglutina tanto a populares como a Vox— son oscilantes, según esos sondeos.

En mayo será el turno de las municipales y las autonómicas en varias comunidades —no en País Vasco, Galicia, Cataluña, Castilla y León o Andalucía, que celebraron sus comicios estos meses—, pero para el verdadero examen apenas quedan unos 11 meses. Se espera que las generales se celebren el día 10 de diciembre de 2023.

El calendario estrecha los márgenes con los que cuenta el Gobierno de coalición para terminar de sacar adelante algunas de sus promesas, como la derogación de la controvertida ley mordaza o la creación de la nueva ley de vivienda. El supuesto bloqueo parlamentario ha enfriado en múltiples ocasiones las relaciones entre los socios de Ejecutivo, PSOE y Unidas Podemos.

La presidenta del BCE, Christine Lagarde

Lo que sucede en los partidos, por otro lado, será de vital importancia para entender las lógicas electorales de este año. El espacio de Unidas Podemos se podría ver reemplazado por las nuevas siglas de la vicepresidenta y ministra de Trabajo Yolanda Díaz, que entiende que Sumar será su instrumento de cara a los comicios.

Ciudadanos, por otro lado, podría ver cómo se certifica su desaparición en las Cortes después de que en noviembre de 2019 solo lograran 10 escaños en el Congreso. La organización naranja está ahora inmersa en un proceso de refundación que está enfrentando a algunas corrientes dentro del partido.

Todo esto sucede cuando en el horizonte hay otros problemas sin resolver: la mesa de diálogo con Cataluña ha dejado de formar parte de la agenda de Moncloa, lo que podría suponer una pérdida de apoyos en Cortes en un momento crucial de la legislatura, y España se prepara para asumir la presidencia del Consejo de la Unión Europea a partir de julio.

Estas son 6 claves a tener en cuenta para entender qué puede deparar en la política española un intenso 2023 electoral como el que acaba de empezar.

#1. Leyes pendientes que pueden convertirse en promesas incumplidas

Aunque en lo que va de legislatura el Gobierno de coalición que forman PSOE y Unidas Podemos ha logrado sacar adelante muchos de sus compromisos —más del 70% de ellos, según el presidente Sánchez—, lo cierto es que otras iniciativas siguen durmiendo el sueño de los justos en los pasillos del Congreso. Otras ni se han planteado, como la derogación de la conocida como ley mordaza.

Es el caso por ejemplo de la ley que blinda la sanidad pública y evita el copago farmacéutico, cuyo proyecto aprobó y remitió a las Cortes el Gobierno este mismo verano, la ley de familias o la ley de vivienda. Estas últimas son dos de los proyectos normativos que más ampollas han levantado entre PSOE y Unidas Podemos dentro del Ejecutivo. 

La ley de vivienda, por ejemplo, lleva en el Congreso desde febrero del año pasado. Las principales diferencias entre PSOE y Unidas Podemos pasan por la introducción de un mecanismo que limite y regule los precios del alquiler: los morados son partidarios del mismo mientras que desde el ala socialista se entiende que se puede reducir la tensión en el parqué inmobiliario con otras vías.

Los morados acusan a los socialistas de obstaculizar premeditadamente la tramitación legislativa de leyes como esa. Lo cierto es que, a medida que pasa el tiempo, más improbable resulta que estas acaben superando la tramitación legislativa plena —de la Comisión al Pleno del Congreso y del Congreso al Senado— antes de que se disuelvan Cortes en octubre.

No sería de extrañar que muchas de estas leyes, tanto presentadas como por anunciar, acaben resolviéndose en la siguiente legislatura —reiniciando el proceso o nunca viendo la luz, en caso de que PSOE y Unidas Podemos no revaliden su coalición en la legislatura 2023-2027—.

#2. La anomalía continúa con el Poder Judicial y otras instituciones bloqueadas 

La fachada del Tribunal Constitucional.
La fachada del Tribunal Constitucional.

Diciembre de 2022 ha sido uno de los meses más complicados de la historia para los constitucionalistas del país. El Tribunal Constitucional (TC), de forma inédita, frenó la votación de unas enmiendas sobre una proposición de ley, a pesar de que dicha votación todavía no se había realizado. Lo hizo a instancias de un recurso que el PP que pedía medidas cautelares.

Los populares —y la mayoría conservadora del Constitucional, que validó su tesis— entendieron que esas enmiendas habían llegado al Pleno sin garantías. Las enmiendas querían poner fin al bloqueo del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) a renovar precisamente los jueces del Constitucional, eliminando la necesidad de que los vocales elijan sus candidatos por mayoría de tres quintos.

La crisis institucional terminó hace unos días, después de que el Poder Judicial propusiese finalmente por unanimidad a sus 2 candidatos al Constitucional tras 6 meses de bloqueo que se han achacado a los vocales conservadores. Es competencia ahora del TC el celebrar un pleno para ratificar tanto esos nombres como los nombres de los candidatos que propuso el Gobierno.

Votar en las elecciones con IA.

Pero esto no termina aquí. El Constitucional ya está renovado, pero el Poder Judicial no. El mandato de los vocales del CGPJ terminó en 2018, hace 4 años. Para renovar al máximo órgano del Poder Judicial es necesario lograr una mayoría de tres quintos en el Congreso. El PP está lejos de apoyar al PSOE porque entiende que el Ejecutivo es "esclavo moral" del independentismo.

Sánchez, a pocos días de que terminase el año pasado, abrió la puerta a renovar el CGPJ sí o sí. No concretó cómo, pero en 2020 los socialistas y Unidas Podemos presentaron un proyecto legal para también acabar con la necesidad de contar con tres quintos en el Congreso para renovar el órgano. Aquella vez, Bruselas pidió explicaciones y Sánchez retiró el proyecto.

Si se renovará el CGPJ antes de que termine la legislatura —lo contrario sería toda una anomalía— es todavía una incógnita, pero el bloqueo en el órgano no es el único, aunque sí el más mediático. También la Agencia Española de Protección de Datos, entre otros entes, sigue bloqueada en el juego de las mayorías parlamentarias.

#3. El Gobierno podría quedarse más solo que nunca por un carpetazo en falso al 'procés'

Protestas independentistas en Barcelona tras la sentencia del Tribunal Supremo sobre el procés

El objetivo del PSOE de Pedro Sánchez es dar carpetazo y final al conflicto catalán. Así se entienden los indultos que el Gobierno anunció para los condenados por el procés en junio de 2021, que se explicaron como "la mejor decisión para Cataluña y España", o la reciente reforma del Código Penal que deroga el delito de sedición y reduce las penas para los delitos de malversación.

El presidente del Gobierno volvió a defender ante los medios en su última comparecencia de 2022 que la derogación del delito de sedición y la reducción de las penas para los delitos de malversación responde a un contexto en el que la corrupción ya no es una de las mayores preocupaciones de los españoles —según el CIS— y que homologan esos delitos al de países europeos del entorno.

Pero la mesa de diálogo entre Gobierno y Generalitat, una de las grandes promesas con las que arrancó la presente legislatura, no tiene visos de volver a reunirse. Ya no forma parte de la agenda de Moncloa, como destacan medios como El País, a pesar de la insistencia de ERC en que se vuelva a celebrar. ERC es uno de los principales socios parlamentarios del Gobierno de coalición.

Para Sánchez, el procés ha terminado: "He tomado decisiones arriesgadas en lo que tiene que ver con un problema que no provoqué, que heredé del independentismo y del PP". 

"Creo que hoy Cataluña y España están mucho mejor que en 2017. Todo lo que hago es en esa dirección, en no volver a repetir la desgracia de 2017", adujo ante periodistas en referencia al 1-O o a la declaración unilateral de independencia. "No solo causó sufrimiento y dolor en la sociedad catalana y en la española, sino que generó una enorme vergüenza a nivel internacional".

El presidente entiende que la labor de la política es "construir convivencia y no confrontar territorios", pero dar carpetazo y final a la ansiada mesa de diálogo podría dejar a PSOE y a Unidas Podemos más solos en el Congreso en unos meses cruciales para la legislatura.

#4. Sánchez rechaza electoralismo en 2023, aunque la presidencia del Consejo de la UE llega en el mejor momento

Pedro Sanchez y la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, durante una reunión en Bruselas.
Pedro Sanchez y la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, durante una reunión en Bruselas.

Reuters

Una encuesta interna del PP, según publica The Objective, da a Alberto Núñez Feijóo 39 escaños más que a Sánchez. El presidente del Gobierno le restó importancia al sondeo, pero sí se comprometió a que su Gobierno haría en año electoral "lo que viene haciendo en años que no son electorales". "No tengo ninguna duda de que [eso] dará su resultado electoral, a pesar de las encuestas del PP".

Con "lo que viene haciendo en años que no son electorales", Sánchez incidió en que el Ejecutivo de coalición "subirá el salario mínimo, revalorizará las pensiones y protegerá a la clase media trabajadora frente al alza de los precios". "El Gobierno, tanto en año electoral como en años que no son electorales, tanto en años pares como en años impares, va a hacer lo que viene haciendo".

Lo que omitieron tanto el propio Sánchez como el supuesto sondeo interno del PP es que España volverá a asumir la presidencia del Consejo de la Unión Europea en la segunda mitad de 2023. Este órgano, uno de los colegisladores de las instituciones comunitarias —junto al Parlamento Europeo— llega en un momento clave: la puesta a punto del Reglamento de Inteligencia Artificial.

Pareja pagando impuestos

España, a través de la Secretaría de Estado de Digitalización e Inteligencia Artificial que dirige Carme Artigas, se ha convertido en un alumno aventajado en políticas digitales de cara a Bruselas. El país se ofreció para crear un cajón regulatorio en el que probar el Reglamento de la IA —que de momento sigue debatiéndose en Bruselas— que se esperaba poner en marcha en noviembre de 2022.

Igual que hiciera la Francia de Macron durante la primera mitad del año pasado, cuando se estaban poniendo a punto normas como el Reglamento de Servicios Digitales o el Reglamento de Mercados Digitales —este último en vigor, pero no en aplicación hasta dentro de unos meses—, España podrá aprovechar la presidencia del Consejo de la UE a escasas semanas de las elecciones.

La Presidencia del Consejo arranca en julio, se prolonga hasta finales de diciembre y lo más probable es que las elecciones generales sean el 10 de diciembre.

#5. La configuración de los espacios políticos: la batalla por evitar la extinción de Ciudadanos...

Inés Arrimadas en un acto de Ciudadanos.
Inés Arrimadas en un acto de Ciudadanos.

Ciudadanos

Ciudadanos ha visto en los últimos meses como desaparecían de varias instituciones.

El repliegue de la formación naranja es evidente. La debacle se puede ubicar en 2019, después de que, tras la repetición electoral, el partido perdiese el grueso de sus escaños quedándose con solo 10 en el Congreso —9, en tanto que uno de ellos se fue al grupo mixto tiempo después—. En aquel momento Cs todavía la dirigía Albert Rivera, que dejó la política ese mismo año.

En estos últimos años la organización la ha comandado Inés Arrimadas. Desde hace unos meses, el partido se ha sumergido en un proceso de refundación que tendrá su punto álgido en cuestión de días, este mismo mes de enero, en el que se celebrarán las que en un principio parecía que serían unas apacibles elecciones primarias.

No lo serán al final, ya que Edmundo Bal, portavoz adjunto de Ciudadanos en el Congreso, anunció hace unas semanas su propia lista y candidatura para dirigir la organización. Su lista, Ciudadanos de Nuevo, competirá con otras 3 listas —entre ellas, la de la propia Arrimadas— sin hacer ningún llamamiento a la unidad: Arrimadas bregó hasta el final para intentar sacar una lista de unidad.

 

Frente a Ciudadanos de Nuevo, la lista de Arrimadas se presenta como Renace Tu Partido, y la encabezará un eurodiputado de la organización, Adrián Vázquez. Lo llamativo es que, cerrando esa lista, irá la propia Arrimadas acompañada de la vicealcaldesa de Madrid, Begoña Villacís. De una forma u otra, el tiempo de Arrimadas al frente de Ciudadanos ha llegado a su fin.

Lo que se verá este 2023 es si también ha llegado el fin de Ciudadanos en las instituciones democráticas españolas, ante la posibilidad de que el nuevo cabecilla de la organización sea una persona todavía menos conocida para el electorado que la propia Arrimadas o el propio Bal.

#6. ...Y la difícil aritmética de Sumar, la plataforma que defiende la vicepresidenta y ministra Yolanda Díaz

Yolanda Díaz junto a Valeria Castro, emprendedora en videojuegos.
Yolanda Díaz junto a Valeria Castro, emprendedora en videojuegos.

REUTERS/Susana Vera

Algo similar a Ciudadanos le sucede a Unidas Podemos. Los pronósticos para la formación morada no son halagüeños, aunque el último barómetro del CIS estimaba una intención directa de voto del 12,4%. La vicepresidenta y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, presentó hace unos meses la que espera que sea su herramienta para concurrir a las futuras elecciones: Sumar.

Todas las organizaciones a la izquierda del PSOE asumen que la mejor candidata para ese espacio político es la propia Yolanda Díaz. Pero en los últimos meses se han apreciado tiranteces, que se evidenciaron en los micrófonos de la Cadena Ser cuando el ex secretario general de Podemos, Pablo Iglesias, lanzó un mensaje tras un acto de Sumar en el que no estuvo la ministra Ione Belarra:

"Había muchos militantes de Podemos en ese acto que era como... compañera te hemos hecho vicepresidenta, te hemos hecho ministra. ¿Por qué no está Ione Belarra a tu lado? Respétanos".

Metro, chica con móvil

Sumar pretende convertirse en un nexo de confluencia para organizaciones como Podemos, Más País, IU, Compromís o los comunes. Aunque en la presentación de Sumar, la propia Díaz fue explícita: "Sumar no va de partidos", "no va de siglas": "va de personas, va de ideas y de esperanzas".

A este respecto, la futurible candidata no ha concretado mucho más, si bien medios como elDiario.es ya recogen declaraciones de distintas organizaciones que aspiran a participar del espacio. Desde los comunes se entiende "la demanda de acelerar un poco la construcción del proyecto y dar certezas a las personas y a los partidos". Y desde IU consideran que hay "elementos que se tienen que mejorar".

2023 será un año crucial para ver cómo se configura ese espacio político a la izquierda del PSOE. Es crucial también para el propio PSOE, que no descartaría revalidar una coalición en caso de que, a finales de año, Sánchez no logre una mayoría absoluta, lo que por ahora parece imposible a tenor de los sondeos que han ido trascendiendo de momento.

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