9 errores que cometes al hacer la cesta de la compra en 2022: no solo la inflación afecta a tu bolsillo

La inflación está marcando máximos nunca vistos. En el mes de febrero se ha disparado al 7,4%, y la tendencia va a seguir siendo mala durante los próximos meses debido a la guerra entre Rusia y Ucrania.

El aumento del IPC provoca que los consumidores pierdan nivel adquisitivo, por lo que cualquier pequeña compra del día a día se ve afectada por ello.

De hecho, hay productos de supermercado que han subido hasta un 21% de precio en los últimos meses.

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El caso del aceite de girasol es especialmente llamativo, pues su coste se ha incrementado casi en un 40%.

Que la cesta de la compra te salga mucho más cara que antes es inevitable, pero también es cierto que si dejas de cometer ciertos errores acabarás pagando un poco menos.

A continuación, se muestran las 9 equivocaciones más comunes que cometes en el supermercado:

Comprar en exceso un mismo producto por si sube de precio

Esta quizás es la equivocación más habitual en una época de inflación. 

Muchos consumidores tienen miedo, y esto les lleva a arrasar con ciertos productos básicos antes de que vuelvan a subir de precio. Es lo que ha ocurrido últimamente con el aceite de girasol.

Esto da como resultado que compres más de lo que necesitas, llenando la despensa de artículos que probablemente nunca vas a consumir; dinero tirado directamente a la basura.

Además, cabe la opción de que los precios se estabilicen o empiecen a bajar antes de que vayas a utilizar esos artículos, así que la pérdida de dinero será doble. 

Otro motivo por el que has de evitar esta acción es el desabastecimiento: los artículos se agotan y otras personas no pueden comprarlos.

No hacer una lista de la compra

Planificar el gasto siempre te va a hacer ahorrar dinero. De este modo evitas compras cosas que no necesitas.

Si además estableces un presupuesto semanal o mensual que te sirva para no gastar más de la cuenta habrás salido ganando.

Las personas que no hacen lista de la compra acaban olvidando productos que necesitaban y adquiriendo otros que en realidad no querían, por lo que el gasto es mayor.

En tu lista puedes añadir los productos que más han subido por la inflación, para así evitarlos en la medida de lo posible.

Desconocer los productos de temporada

Los alimentos de temporada no sólo te van a ayudar a comer de manera más saludable: gracias a ellos también vas a ahorrar dinero.

Los productos de temporada son más baratos, así que recurriendo a ellos en el momento exacto vas a notar una mejoría en tu bolsillo.

Para conocer los productos de temporada puedes acceder a la página web Soydetemporada, ya que cuenta con un catálogo muy completo.

Evitar las marcas blancas

Un error muy común es el de no comprar marcas blancas por considerarlas de peor calidad. 

Lo cierto es que muchos artículos catalogados de esta forma son tan buenos como los de primeras marcas, sólo tienes que saber elegir.

El ejemplo más claro es el de los productos de Hacendado de Mercadona, que son muy bien valorados por los clientes y permiten ahorrar dinero sin renunciar a la calidad.

Ir al supermercado cuando tienes hambre

Seguro que has cometido esta equivocación más de una vez: estar hambriento e ir al súper es uno de los peores errores en los que puedes caer.

El motivo es evidente: cuando las tripas te rugen acabas comprando más de lo que necesitas, y para colmo vas a hacer compras muy apetitosas pero menos saludables, fijándote poco en el precio.

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Esto en una etapa de inflación es todavía más grave, ya que es muy probable que optes por productos que han subido mucho de precio sólo porque creas que te van a llenar el estómago.

Acudir siempre al mismo establecimiento

Los consumidores más perezosos escogen siempre el supermercado más cercano a casa, y esto se convierte en una equivocación de gran calado.

Conocer los diferentes establecimientos de tu zona, así como saber las ofertas que hay en cada uno de ellos a lo largo de una semana son consejos que te ayudarán en el ahorro.

Con un poco de curiosidad es probable que descubras tiendas y supermercados más baratos, algo que resulta esencial en una etapa de inflación.

Dejarte llevar por productos apetitosos y poco saludables

Esto es lo típico que sucede cuando tienes hambre o si te dejas llevar mucho por la apariencia de los productos.

Comprar demasiados snacks, artículos de bollería o comida precocinada no sólo es terrible para tu salud, sino que además te va a salir caro.

Estos productos no son de los más baratos que puedes adquirir, y la inflación también les ha afectado. Es momento de dejar estas adicciones. 

Hacer compras mensuales para ir poco al supermercado

Existe la creencia de que hacer una compra mensual es mucho más rentable que acudir varias veces al supermercado: ¡es un gran error!

Lo cierto es que a lo largo de un mes pueden surgir muchas necesidades, así que los productos que compraste una semana quizás no te valen para la siguiente, lo que se traduce en tirarlos a la basura habiendo gastado ese dinero en vano.

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Además, haciendo la compra de manera mensual optas por artículos menos frescos y que aguanten más, y esto es perjudicial, por ejemplo, cuando quieres elegir alimentos de temporada o más sanos.

¡Cuidado con las ofertas!

En esta etapa de inflación es lógico que te fijes mucho más en las ofertas, pero has de andarte con ojo, ya que abusar de ellas provoca el efecto contrario: que gastes más.

Compara las ofertas de diferentes supermercados, cíñete a tu lista de la compra y adquiere sólo aquello que en realidad necesitas.