15 comidas que pueden causarte enfermedades cardíacas

La salud de tu corazón depende, en gran medida, de tu alimentación y de que no estés sometido a altos niveles de estrés —malos hábitos que deterioran su resistencia—.  

Ambas cosas se pueden trabajar paulatinamente para evitar el desgaste de tu sistema cardiovascular y ganar años de vida. 

"Si llevamos una dieta desequilibrada, estamos alterando el correcto funcionamiento del corazón y haciendo que su estructura se deteriore, con el consiguiente riesgo de sufrir las consecuencias de ese desbalance que, con alta probabilidad, se manifestará en forma de enfermedades", explicita a Business Insider España la doctora Amelia Carro Hevia, cardióloga especialista en medicina cardiovascular y cardiología preventiva, directora médica del Instituto Corvilud y miembro de Top Doctors.

Entre estas enfermedades se diagnostican la angina de pecho, el infarto de miocardio, las arritmias, y la insuficiencia cardiaca.

"Si los alimentos llenos de azúcares, grasas y calorías son de consumo ocasional, dentro de una dieta saludable y variada, es una opción estupenda. Abusar de ellos es peligroso a largo plazo", señala Ylenia López Llata, dietista, nutricionista y coach nutricional, en una entrevista con Business Insider España.

Los comestibles que deberían pasar a ser una opción de consumo ocasional, según Llata, son los que tienen excesos de grasas saturadas y ricos en colesterol, presentes en carnes y derivados (embutidos, quesos...). También las bebidas alcohólicas y el exceso de sal, visible e invisible.

Desde la Asociación Americana del Corazón de Estados Unidos recuerdan que el tipo de alimento que ingieres no lo es todo. 

Una comida copiosa puede aumentar el riesgo de ataque cardíaco 4 veces en sólo 2 horas después de comer, certifican.

La ventaja es que, mientras evitas estos manjares, no sólo cuidas la salud de tu corazón. Porque el cuerpo funciona como un todo, ¿no?

Estos son 15 de los alimentos que más ponen a prueba la resistencia de tu corazón, según expertos. 

Queso

Una gran fuente de proteínas y calcio, pero también de grasas saturadas y sal. 

El queso es uno de los deliciosos alimentos que atacan silenciosamente a la salud del corazón. 

Estos son los 7 quesos más sanos que puedes incluir en tu dieta

BHF certifica que puede llevar a un aumento del colesterol y la presión arterial, incrementando el riesgo de sufrir una enfermedad cardiovascular. 

El queso, junto a otros alimentos de origen animal —con exceso de grasas saturadas y ricos en colesterol— son muy peligrosos a largo plazo, explica Ylenia López Llata, dietista-nutricionista y coach nutricional, a Business Insider España.

Carnes procesadas

Conforme a la revisión de la literatura científica de la Universidad de Harvard (EEUU), las carnes procesadas son las que más afectan a la salud del corazón. 

"Los estudios incluyen perritos calientes, bacon, salchichas, salami y otras carnes frías, como jamón, pavo, mortadela y pollo", insisten.

Este tipo de carnes presentan altos niveles de sal —que pueden provocar accidentes cardiovasculares— y conservantes, explican.

En esta misma línea, defiende WebMD, el bacon provienen de las grasas saturadas, que pueden aumentar las lipoproteínas de baja densidad (LDL) o el colesterol malo y aumentar las probabilidades de sufrir un ataque cardíaco o un derrame cerebral.

Carne roja

Nuevamente, las grasas saturadas son el principal factor de riesgo de las carnes rojas, como la carne de res, cordero y cerdo. 

Además, no sólo afecta al corazón. La carne roja también puede llevarte a padecer diabetes. 

El medio recomienda limitar las porciones y buscar cortes magros como carne redonda, solomillo y carne molida extra magra.

Patatas fritas

The American Journal of Clinical Nutrition demostró en un estudio que analizaba a más de 4.400 participantes de entre 45 y 79 años de edad, correlacionaba la ingesta de patatas fritas con un mayor riesgo de mortalidad prematura. 

"El consumo frecuente de patatas fritas parece estar asociado con un mayor riesgo de mortalidad", concluyen los autores. 

Más allá de lo deliciosas que puedan estar, las patatas podrían acabar resultando una triple amenaza para tu salud por el aumento de azúcar en sangre, la grasa y la sal.

Carnes rebosadas y fritas

El pollo frito —y cualquier plato que se le parezca— es nuevamente un riesgo para tu salud arterial. 

Conforme a WebMD, está vinculado a casos de insuficiencia cardíaca, por provocar altos niveles de presión arterial, obesidad e incluso diabetes del tipo 2. 

Dato clave: unos 100 gramos de pollo frito equivalen a 10 tiras de bacon, aproximadamente...

Pizza

Más si eres de los que adornan las pizzas congeladascon más y más condimentos enemigos de tu corazón.

Las pizzas son, según Eat This, Not That, uno de los mayores contribuyentes de grasas saturadas que agotan la bomba de tu organismo. 

Si quieres asegurarte de comer rico y sano, hazla tú mismo —a ser posible, con una masa basada en grano 100% integral—. 

Granos refinados: arroz blanco, pan y pasta

Tu cuerpo traduce: granos refinados es igual a azúcar que almacenar como grasa, confirma a WebMD Carol DerSarkissian, médica de emergencias.

El arroz, la pasta y el pan basados en harina blanca carecen de fibra, vitaminas y minerales saludables —coincidiendo con la valoración que reciben las pizzas, más sus añadidos—. 

Harvard también destaca que los procesados como el pan blanco, el arroz blanco, los cereales para el desayuno bajos en fibra, los dulces y azúcares y otros carbohidratos refinados o procesados eliminan la fibra dietética, los minerales, los fitoquímicos y los ácidos grasos. 

"Los altos niveles de procesamiento destruyen la estructura natural de los alimentos. Por ejemplo, comer un alimento hecho de avena finamente molida o granos, produce picos mucho más altos en el azúcar en sangre que las versiones menos procesadas", añaden.

Has de optar por elegir aquellos que explícitamente indiquen que son 100% grano integral. 

Horneados

Los alimentos horneados tienen altos niveles de grasa trans. Es decir, aceites líquidos convertidos en grasas sólidas, como manteca o margarina.

También están vinculados a niveles más altos de triglicéridos, lo que aumenta considerablemente las probabilidades de sufrir una enfermedad cardíaca. 

"Los productos horneados tienen un doble golpe de azúcar y grasa saturada oculta", explicita a Eat This, Not ThatAdam Splaver, cardiólogo clínico y cofundador de Nano HEalth ASsociates.

Estos, según una de las investigaciones publicadas en The New England Journal of Medicine, tiene una correlación positiva con las enfermedades cardíacas. 

Si no quieres privarte de darte un capricho, podrías optar por la harina de trigo integral, disminuir el azúcar y utilizar aceites vegetales líquidos en vez de mantequilla.

Mantequilla

Base de grasas saturadas, la mantequilla es uno de los primeros alimentos que deberías sustituir en tu lista de la compra. 

Los expertos recomiendan reemplazarla por aceite de oliva o productos para untar a base de aceite vegetal. 

De lo contrario, esta podría contribuir a incrementar tus niveles de colesterol malo. 

También la margarina

Según Isabel Smith, nutricionista, las alternativas a la mantequilla como la margarina suele contener aceites parcialmente hidrogenados.

Este tipo de aceites son una de las bases más comunes de grasa trans, dice.

Helados

Otro de los postres prohibitivos para tu corazón es el helado, independientemente de su sabor. 

De acuerdo con WebMD, el helado tiene un alto contenido de azúcar, calorías y más grasas saturadas. 

Esto lleva a un aumento de peso y, por consiguiente, de los triglicéridos. 

Yogur entero con sabor

Por norma general, los yogures son uno de los alimentos clave de cualquier dieta que cuida el nivel de su presión arterial. 

Pero no cualquier tipo de yogur.

Los yogures de sabores están también cargados de azúcar, relacionada con la inflamación y el riesgo de enfermedades cardíacas. Cerciórate de leer las etiquetas con detenimiento para no llevarte ninguna sorpresa al llegar a casa. 

Los refrescos

"Los bebedores de refrescos tienden a ganar más peso y son más propensos a ser obesos y tener diabetes tipo 2, presión arterial alta y enfermedades cardíacas", certifica en WebMD Carol DerSarkissian, médica de emergencia certificada.

En esta misma línea, defiende a Eat This, Not That el doctor Adam Splaver, cardiólogo clínico y cofundador de Nano Health Associates, promueven un pico de insulina, lo que conduce a un aumento de peso y puede llevar a una serie de trastornos metabólicos.

Alcohol

Todo en exceso es malo. Pero el alcohol puede provocar presión arterial alta, insuficiencia cardíaca, derrames cerebrales y aumento de peso.

"Una copa de vino de vez en cuando no es negativa para la salud cardiovascular. Pero el abuso de alcohol conlleva un riesgo de hipertensión y por tanto; cardiovascular", explica a Business Insider España la coach nutricional.

Cafés mezclados

El café mezclado con almíbares, azúcar, cremas batidas, etc. son lo que se conoce como una bomba de relojería.

Las hormonas del estrés que puede provocar, como el cortisol, pueden incrementar la cantidad de grasa producida por las glándulas sebáceas.

No solo puede elevar la glucosa en sangre, sino que la cafeína también puede aumentar los niveles de presión arterial. 

Más allá de la salud cardiovascular, el café también puede hacerte sentir más inquieto, sufrir migrañas y estar más nervioso.