Cómo reconocer las motos camufladas de la DGT para poner multas

Policías poniendo una multa

La DGT tiene diferentes métodos a su disposición para pillar a los infractores y ponerles multas, tanto económicas como las que se traducen en la pérdida de puntos en el carnet de conducir.

Los drones, los agentes de tráfico o los radaresson las herramientas más típicas en este sentido, pero no las únicas que vas a encontrar en carretera.

La DGT cuenta con otros dispositivos para controlar la seguridad vial y castigar a los conductores que no se la toman en serio, y esto cobra mayor importancia en verano, época en la que aumentan los trayectos en carretera y por lo tanto se producen más accidentes de tráfico.

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Uno de los mejores trucos de la DGT para cazar a aquellos que se saltan los límites de velocidad o conducen de forma incorrecta son las motos camufladas.

Tráfico ya ha anunciado en sus redes sociales que este verano va a contar con 34 motos camufladas en su dispositivo de seguridad. Se trata de una prueba piloto que podría extenderse durante el resto del año si el resultado es óptimo.

La prueba comenzó en la operación salida, pero va a seguir vigente durante todos los fines de semana del verano, así que conviene que conozcas cómo funciona.

A continuación, se explica cómo puedes reconocer las motos camufladas de la DGT y para qué sirven.

Cómo reconocer las motos camufladas de la DGT

Las motos de la DGT son difíciles de identificar, ya que el objetivo es que los conductores no sepan cuál es su aspecto.

Sin embargo, en la red social de conductores Social Drive ya han encontrado alguna en veranos anteriores, cuando también se utilizaron. 

El modelo en estos casos fue el de una BMW R1150 RT cuya apariencia era esta:

Su aspecto este verano sea seguramente algo distinto, ya que así se cumple mejor la función de vigilancia.

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En cualquier caso, conviene que respetes el trabajo de estos vehículos, pues se encargan de velar por la seguridad de los motoristas en carretera.

Las motos camufladas tienen radares con los que detectan el exceso de velocidad, y además otras infracciones como los adelantamientos temerarios o inadecuados.

Estas motos suelen encontrarse en las zonas donde se registran más accidentes de tráfico. Su cometido es reducir la siniestralidad y evitar muertes.

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