Las 4 propuestas de la ONU para evitar que el coronavirus hunda en la pobreza a los países en vías de desarrollo

• La ONU ha propuesto combatir el coronavirus en los países en vías de desarrollo mediante 4 medidas que implican una inversión total de 2,3 billones de euros.
• La Conferencia de las Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo (UNCTAD) calcula que los países en desarrollo perderán entre 1,8 y 2,7 billones de euros en inversiones extranjeras en los próximos 2 años.
• La UNCTAD señala que las economías en desarrollo ya estaban en "una recesión evidente" desde finales de 2019 y que la crisis del coronavirus "todavía está por llegar a la mayoría" de estos países.
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Desde el inicio de la pandemia de coronavirus, gobiernos, instituciones y analistas se han esforzado por cuantificar su impacto económico, centrándose primero en China, después en Asia y Europa y posteriormente a escala global. Sin embargo, muchas de esas estimaciones solo tienen en cuenta las consecuencias en las economías desarrolladas y emergentes, olvidándose de los países en desarrollo, que por el momento han esquivado casi por completo el virus.

Sin embargo, la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo (UNCTAD) ha advertido de que "la crisis del coronavirus podría empeorar mucho" para los países en vías de desarrollo "antes de que sus casi 6.000 millones de habitantes lleguen a experimentar alguna mejoría". De hecho, el organismo calcula que, pese a la riqueza en materias primas de muchos de esos países, perderán entre 1,8 y 2,7 billones de euros en inversiones extranjeras en los próximos 2 años.

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La UNCTAD ha señalado que las economías en desarrollo ya estaban en "una recesión evidente" desde finales de 2019 y que la crisis del coronavirus "todavía está por llegar a la mayoría" de estos países. Por ello, su director de estrategias de desarrollo, Richard Kozul-Wright, ha augurado que muchos de los países más pobres del mundo podrían llegar a sufrir "una agresiva combinación de crisis sanitaria y crisis económica".

Kozul-Wright ha señalado que los países en desarrollo ya "se han debilitado significativamente por las ondas de choque económicas de la crisis", por lo que ha pedido encontrar cuanto antes vías para ayudar a estas naciones a reforzar sus sistemas sanitarios y "aumentar su resiliencia en ese frente rápidamente". Para ello, ha destacado que es necesario seguir el ejemplo de los países desarrollados, que ya han comprometido más de 4,5 billones de euros a planes de estímulo.

De este modo, la UNCTAD ha desvelado su propuesta para combatir el coronavirus y las consecuencias económicas de la pandemia, que pasa por 4 medidas que implican una inversión total de 2,3 billones de euros, que se desplegaría en los países en desarrollo en distintas fases. Las 4 iniciativas de la Conferencia de la ONU sobre Comercio y Desarrollo son:

• Una inyección inicial de 910.000 millones de euros para las economías más amenazadas por la recesión y el colapso sanitario, que se realizaría a través de los derechos especiales de giro del Fondo Monetario Internacional.
• Una congelación de la deuda de los países más afectados por la crisis, que incluya paralizar la devolución de la deuda soberana y posteriormente conlleve "un alivio significativo de la deuda", según UNCTAD, que pone como ejemplo la cancelación de la deuda externa alemana tras la II Guerra Mundial. Para 2020, el organismo propone cancelar a lo largo de este año 910.000 millones de euros en deuda de estos países.
• Una inversión de 455 millones de euros en los servicios sanitarios de emergencia y en los programas de reconstrucción de los países afectados.
• Poner en marcha controles financieros estatales para reducir la fuga de capital que ya está surgiendo de estos países en desarrollo.

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UNCTAD ha señalado que el coste de su propuesta "es similar a la cantidad que se habría entregado a los países en desarrollo durante la última década si los países del Comité de Asistencia para el Desarrollo de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) hubieran cumplido su objetivo del 0,7% de Asistencia Oficial para el Desarrollo".

Por ello, Kozul-Wright ha criticado que "las economías avanzadas hayan prometido hacer lo que sea necesario para evitar que sus empresas y hogares sufran una gran pérdida de ingresos", y ha destacado que si "los líderes del G20 quieren mantener su compromiso de poner en marcha una respuesta global inspirada por la solidaridad, deben tomar medidas acordes para los 6.000 millones de personas que viven fuera de las economías del G20".