La carrera de la investigación española para buscar la vacuna contra el coronavirus, desde dentro: "La ciencia es la que nos va a sacar de esto"

Juan García Arriaza
  • Juan García Arriaza trabaja en el Centro Nacional de Biotecnología desarrollando una vacuna contra el coronavirus. 
  • El equipo espera poder tener el candidato de la vacuna listo en abril para iniciar los ensayos en animales en mayo. 
  • "La ciencia es lo que nos va a sacar de esto", asegura García Arriaza, que lamenta la poca inversión en investigación en España. 
  • El investigador ha hablado con Business Insider España para explicar cómo lleva trabajando desde enero. 
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Cintillo especial Coronavirus

Juan García Arriaza entra en su laboratorio en el Centro Nacional de Biotecnología del CSIC todos los días a las 7 de la mañana. Como muchos de los trabajadores que tienen que seguir acudiendo estos días a su trabajo, guarda un justificante en el coche por si la policía le para.

El otro día ocurrió. El documento que le entregó al agente probablemente no refleje la importancia de lo que obliga a Arriaza a salir de su casa todos los días mientras los españoles permanecen confinados: el investigador trabaja en uno de los equipos del CSIC que está desarrollando una vacuna para acabar con el coronavirus. 

"Comenzamos a trabajar en esto en enero", explica García Arriaza a Business Insider España, cuando China dejaba perpleja al mundo al no dejar de informar de casos de contagio por un virus desconocido. 

Con 14 años de experiencia a sus espaldas en el laboratorio de Mariano Esteban, una eminencia en el campo de los poxvirus y pionero en el desarrollo de vacunas, García Arriaza y su equipo permanecían atentos a la evolución de la enfermedad en China. En todo su tiempo en el laboratorio, García Arriaza ha dirigido generaciones de candidatos vacunales para enfermedades como el zika, el ébola o chikungunya. 

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Así, cuando el genoma del coronavirus fue secuenciado, en el Centro Nacional de Biotecnología (CNB) estaban preparados y se pusieron manos a la obra. En estrecha colaboración con el laboratorio de Luis Enjuanes, uno de los mayores expertos de coronavirus del mundo, trabajan de manera complementaria para encontrar una vacuna mediante un sistema que inserta genes de coronavirus dentro de un vector atenuado con la finalidad de activar el sistema inmunológico y producir anticuerpos y linfocitos T.

La diana elegida es una proteína que está en la superficie del virus y con la que puede penetrar en las células. "Con esa vacuna lo que intentamos es que no pueda llegar a entrar", explica García Arriaza. Además, la vacuna en la que trabaja el investigador tiene otras ventajas, como que el vector sobre el que trabaja ya está aprobado y es muy seguro para los humanos, sin causar apenas efectos secundarios. 

"Es un proceso que tarda", advierte el investigador, que espera para finales de abril poder tener desarrollado el candidato a la vacuna y poder iniciar los ensayos en ratones. "De ahí pasaría a los ensayos en humanos", explica García Arriaza. 

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Contener el virus es fundamental, pero lo más efectivo será una vacuna 

"Ahora lo primordial es la contención", asegura García Arriaza, que asegura que ya se están probando distintos antivirales que cuentan con la ventaja de ser medicamentos ya autorizados. 

"Pero lo más efectivo contra el virus será una vacuna", asegura, aunque tarde más en llegar. 

El investigador señala que podrían combinarse distintos tipos de vacunas o usarse como dosis de refuerzo, pero será lo único que mantenga bajo control al virus. 

Porque si algo cree García Arriaza es que el virus va a poder ser controlado. "La mayoría de los virus se van atenuando", explica, "y con el tiempo lo controlaremos". 

Todavía no hay suficientes datos para saber si se convertirá en un virus estacional, pero el investigador cree que hay algunas indicaciones, que deben estudiarse más, que animan a ser optimistas. 

"De primeras, no parece que mute demasiado, algo que lo haría más difícil de atajar", explica, como ejemplo. 

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"La ciencia es lo que nos va a sacar de esto"

El investigador es consciente de que todos los ojos están puestos en proyectos como el suyo, pero se toma su trabajo como siempre. "Voy con las ganas y la ilusión de hacer mi trabajo bien hecho", asegura. 

Señala que se está librando una carrera internacional en la que compiten todas las instituciones y compañías farmacéuticas, muchas con un presupuesto mucho mayor que el de España, que destina tan solo el 1,2% de su Producto Interior Bruto (PIB) a la investigación. 

"Aquí, la ciencia nunca ha sido lo prioritario", afirma. En la actual crisis, el CNB ha recibido 4,5 millones de euros para sus distintos proyectos contra el coronavirus. 

"Espero que esto sirva para que la gente se dé cuenta de lo importante que es", insiste el investigador. "La labor de contención encomiable que están realizando los profesionales sanitarios y la investigación y la ciencia es lo que nos va a sacar de esto", concluye. 

García Arriaza señala que la OMS tiene una lista de patógenos que pueden causar pandemias y que los científicos vienen avisando de que una situación como esta podía producirse desde hace tiempo. "Es como predicar en el desierto", lamenta, y hace referencia a la entrevista recién publicada en El Paísal virólogo Adolfo García Sastre en la que demandaba un presupuesto para la ciencia igual que el que se dedica a defensa. 

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Conseguir la vacuna es coronar la cumbre 

Además de investigador, García Arriaza es padre de familia, y en estos tiempos de confinamiento intenta terminar su trabajo a mediodía para estar en casa con sus dos hijos. 

Otra de sus pasiones, la montaña, tendrá que esperar a que se levante el estado de alarma: "La mentalidad positiva, el esfuerzo y el trabajo duro se necesitan igual en la investigación que para coronar una cumbre". 

"Ambas cosas cuestan, pero se consiguen", concluye. 

Juan García Arriaza está convencido. Lo van a conseguir. 

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