9 cosas en las que probablemente te equivocas sobre tu coche, desde el mantenimiento hasta el precio

Tanto si hace tiempo que tienes un coche como si es la primera vez que lo conduces, hay muchas cosas que debes saber sobre tu vehículo. 

El proceso de compra o leasing es complejo y está repleto de complicados términos de financiación, tipos de interés y otras condiciones. Hay muchas marcas, modelos, tipos de vehículos, piezas móviles y tecnologías cambiantes de las que hay que estar al tanto. Es importante conocer las necesidades de mantenimiento y servicio. 

Pensamiento: Conseguirás una buena oferta comprando un coche a final de mes.

Muchos compradores de coches creen que si entran en un concesionario a final de mes, es probable que consigan una oferta mejor que la que podrían haber conseguido una o 2 semanas antes. Suponen que un concesionario querrá deshacerse de todo el inventario posible para rematar las ventas de ese mes.

Eso podría haber sido algo cierto... antes de la pandemia. Pero todos los aspectos de la compra de coches nunca van a volver a la normalidad después de la pandemia, y eso incluye encontrar ese tipo de ofertas.

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Lo que es probablemente más fructífero para ver como un indicador de un buen negocio, en cambio, es el fabricante de automóviles y el inventario del concesionario. Cuantos más coches haya en los concesionarios, más dispuestos estarán a trabajar contigo.

Pensamiento: conseguirás una oferta aún mejor comprando a final de año.

Por razones similares, muchos compradores de coches piensan que las mejores ofertas se producen a finales de año. Pero, una vez más, dado que la compra de coches ha cambiado tanto desde la pandemia, no tiene por qué ser así. 

Sabemos que los concesionarios no están necesariamente trayendo de vuelta las ventas de vacaciones como solían hacerlo. En parte se debe a que los concesionarios saben que ya no necesitan hacerlo. 

El comportamiento de los consumidores durante la pandemia ha enseñado a los fabricantes de automóviles y a sus concesionarios que los clientes están dispuestos a esperar más y a pagar más por los vehículos que realmente desean. 

Esto está cambiando un poco a medida que las incertidumbres macroeconómicas pesan sobre los consumidores, pero en su mayor parte, no hay mucho que incentive a la industria a reintroducir esas grandes ventas navideñas.

Pensamiento: es probable que los precios mejoren mientras sigan las preocupaciones económicas.

La respuesta es algo sencilla: no necesariamente. 

Los precios de los vehículos nuevos y de segunda mano han bajado considerablemente desde sus máximos de la pandemia. Durante ese tiempo, los vehículos nuevos se vendían muy por encima del precio de etiqueta y los usados por mucho más de lo que valían. 

Ahora, por primera vez en años, los coches se venden por debajo del precio de etiqueta, pero el precio medio de transacción de un coche nuevo seguía siendo de 48.275 dólares en abril, según Kelley Blue Book. En el caso de los vehículos de ocasión, fue de 26.799 dólares.

Aunque la economía sigue siendo incierta, hay varias dinámicas en juego.

La crisis de oferta y demanda inducida por la pandemia sigue su curso, afectando a determinadas marcas y modelos de vehículos — y, por tanto, a los precios de esos coches — más que a otros.

Mientras tanto, los fabricantes de automóviles y sus concesionarios no están realmente incentivados para bajar los precios sustancialmente, e incluso están luchando entre sí para no hacerlo. Al final, puede que gane el cliente, pero no necesariamente como resultado directo de las presiones económicas.

La cuestión es que comprar un coche puede que no mejore nunca de verdad, así que más vale comprarlo ahora.

Pensamiento: el mantenimiento de los vehículos eléctricos será peor que el de los coches de gasolina.

En este caso hay un sí y un no. 

Los vehículos eléctricos suelen necesitar menos mantenimiento. Hemos elaborado una guía sobre las principales diferencias entre un coche eléctrico y uno de gasolina. 

Esto incluye la ausencia de cambios de aceite y otros tipos de mantenimiento habituales en los trenes de transmisión de gasolina. Pero podría incluir algo como sustituciones de neumáticos más frecuentes, y siempre hay que pensar en la batería.

El coste, e incluso los tiempos de espera, asociados al mantenimiento y reparación de un coche eléctrico podrían ser mayores que los de un vehículo con motor de combustión interna. El aspecto de la reparación es especialmente importante.

Un análisis del Kelley Blue Book estima que los vehículos eléctricos tienen unos costes de mantenimiento de 4.246 dólares en 5 años de propiedad, por debajo de los 4.583 dólares estimados para los coches de gasolina. Al mismo tiempo, los vehículos eléctricos tienen unos costes de reparación de 1.712 dólares en ese periodo, por encima de los 1.695 dólares de los vehículos de gasolina.

Así que depende de cómo se mire. En general, menos mantenimiento, pero si tienes un accidente, es probable que te cueste caro.

Pensamiento: la gasolina premium es mejor para mi vehículo, y lo hará ir más rápido.

Es posible que los conductores piensen que llenar el depósito de su vehículo de gasolina premium puede aumentar la aceleración o el ahorro de combustible. Pero no es así, según Cars.com.

Los expertos sugieren que, si llenas el depósito de un coche que requiere gasolina normal con premium, puede ocurrir lo contrario. 

Algunos vehículos requieren combustible de octanaje más alto porque, cuando se utiliza en el motor adecuado, proporciona más potencia y un mejor rendimiento general. 

Pero un vehículo que requiere un combustible de octanaje inferior funciona como debería cuando se le suministra ese combustible. 

A su vez, un vehículo que requiera gasolina con octanaje superior debe recibir gasolina con octanaje superior. De lo contrario, se corre el riesgo de dañar el motor con el tiempo. 

Pensamiento: en realidad no necesito renovar mis neumáticos.

Saltarse la renovación anual de los neumáticos no es una buena idea. 

Según el proveedor de neumáticos Bridgestone, es importante renovar los neumáticos para conseguir un desgaste óptimo y un mantenimiento general.

Aunque el vehículo esté bien alineado, es necesario cambiar los neumáticos para contrarrestar los patrones de desgaste irregulares y mantener un desgaste uniforme de la banda de rodadura. Esto puede ayudar a mejorar la tracción y la eficiencia de combustible y ahorrar kilometraje de gasolina, y en última instancia, ayuda a la vida útil de sus neumáticos, de acuerdo con Firestone. 

Depende del tipo de vehículo y de los neumáticos, pero lo ideal es sustituirlos cada 8.000 a 11.000 km, y muchos conductores lo hacen en el momento del cambio de aceite. También depende de si tiene tracción delantera, trasera, total o total para saber qué patrón de rotación debe hacer, si de delante hacia atrás o de lado a lado. La Asociación de Neumáticos y Llantas de EEUU ofrece directrices específicas sobre estos patrones. 

También es un factor de seguridad: cambiar los neumáticos reduce el riesgo de averías o reventones.

Pensamiento: realmente no necesito neumáticos de invierno.

Es posible que los conductores no quieran gastar dinero en lo que perciben como un gasto añadido por tener 2 juegos de neumáticos —un juego para todas las estaciones y otro de invierno—, pero tener un juego de neumáticos de invierno, si se vive en determinados entornos, podría tener muchas ventajas. 

Los neumáticos de invierno están diseñados específicamente para tener dibujos en la banda de rodadura que faciliten la navegación y tengan mejor tracción sobre hielo y nieve. Pero tampoco son solo para las inclemencias del tiempo invernal. 

Road & Track sugiere que los neumáticos de invierno son ventajosos en entornos fríos, incluso sin carreteras mojadas o heladas, debido a la forma en que el caucho interactúa en rangos de temperatura más bajos. 

En concreto, los conductores no desean conducir con neumáticos de invierno durante todo el año porque su banda de rodadura podría desgastarse más en climas más cálidos, reduciendo su vida útil.

Un neumático para todas las estaciones puede llegar a un acuerdo y adaptarse a ambos mundos. Un neumático para todas las estaciones puede no proporcionar el agarre adecuado para conducir con frío, pero podría ser más adecuado para temperaturas cálidas y secas. 

Tener 2 juegos de neumáticos no significa necesariamente una segunda inversión, solo significa que cada uno se desgasta la mitad de rápido.

Pensamiento: necesitas un SUV o un todoterreno

Es controvertido, pero quizá no todo el mundo necesite conducir un SUV o un todoterreno. 

Los SUV, sobre todo, dominan desde hace tiempo las carreteras. Pero muchos expertos sostienen que muchos de los propietarios de estos vehículos no los utilizan en toda su extensión.

Tanto si un conductor tiene una familia numerosa, necesita transportar muchas cosas los fines de semana o incluso considera que ese vehículo es más accesible, esos requisitos personales del vehículo son válidos y es importante disponer de opciones asequibles que se adapten a todos y a todos los usos. Pero no necesariamente significa que necesiten un SUV.

Otros podrían valorar si necesitan ese vehículo grande. Los sedanes se han quedado en gran medida en el camino, y ahora los coches son cada vez más grandes (y posiblemente menos seguros). Muchos tienden a comprar sus vehículos para una situación que se da una vez al año —ese viaje por carretera o esa mudanza— más que para sus necesidades la mayor parte del tiempo, pero puede haber opciones más pequeñas y eficientes.

Pensamiento: un mayor ahorro de combustible debe significar menos emisiones.

No es de extrañar que los vehículos con motor de combustión interna sean responsables de gran parte de las emisiones de CO₂. Alrededor del 8% de ellas en todo el mundo en 2021, según la Agencia Internacional de la Energía. La agencia señala que el ahorro de combustible ha aumentado gracias a las mejoras en los motores, la cadena cinemática y la tecnología de los vehículos, pero que es necesario redoblar los esfuerzos para alcanzar los objetivos de descarbonización en todo el mundo. 

En parte tiene que ver con lo anterior. Los vehículos grandes son cada vez más grandes y populares. Las ventas de todoterrenos más pesados y menos eficientes se han disparado en todo el mundo, mientras que los vehículos eléctricos solo representan un pequeño porcentaje del parque total. 

La tendencia a largo plazo a aumentar la potencia también ha ralentizado el progreso, según la AIE. El hecho de comprar un vehículo más eficiente no significa necesariamente que contribuya a un progreso más amplio.