Una de las principales promesas del metaverso es la posibilidad de llevar cosas de un videojuego a otro, pero los desarrolladores adelantan que eso es pura fantasía

| Traducido por: 
Imagen del metaverso de The Sandbox.

The Sandbox

  • Una de las principales promesas del metaverso es que tu vida digital será tuya, libre de las principales plataformas tecnológicas.
  • Los desarrolladores de juegos dicen que eso es una fantasía que nunca sucederá.
  • Descubre más historias en Business Insider España.

En un futuro próximo, cuando el metaverso se haga realidad, todos los trajes que hayas comprado para tu avatar en Fortnite se trasladarán sin problemas a Minecraft y Call of Duty y a cualquier otro juego que quieras jugar.

Al menos eso es lo que quieren hacer creer los defensores de los conceptos de la llamada Web3, como los NFT, la tecnología blockchain y las criptomonedas.

El último ejemplo viene del cofundador y cantante de Linkin Park, Mike Shinoda, que el pasado fin de semana tomó las redes sociales para revelar esa visión del futuro.

"Imagina coger tu skin favorita de Valorant y usarla en Fortnite. Y sin pagar nada más, porque ya es tuya. Luego la usas en CoD, Minecraft, incluso en Twitter, IG. Tantas posibilidades, ¿no?", compartió en su perfil.

Solo hay un problema: la gente que realmente se dedica a desarrollar videojuegos ha señalado repetidamente los muchos defectos de esta visión futurista, incluida una persona que trabaja en el mismo juego utilizado en el ejemplo de Shinoda.

"Una vez más, no se puede coger una skin de un juego, ponerla en otro y esperar buenos resultados, aunque se hayan hecho con el mismo motor", respondió poco después Jules Glegg, ingeniera principal de Riot Games. Se refería concretamente a los problemas técnicos que plantea el traslado de un "activo" de un juego a otro.

El término "activo" se utiliza ampliamente en el desarrollo de videojuegos como "abreviatura de todo lo que entra en un videojuego: personajes, objetos, efectos de sonido, mapas, entornos, etc.", según el fabricante del motor de juegos Unity.

Una imagen del escaparate digital de Fortnite en el juego, con artículos de temática de Batman.
Una imagen del escaparate digital de Fortnite en el juego, con artículos de temática de Batman.

Epic Games.

Una skin de personaje es un activo, y moverla de un juego a otro es una pesadilla técnica. "Las escalas no coinciden. Los rigs no coinciden. El nivel de detalle no coincidirá. Las zonas de impacto no son iguales. Los ajustes de las sombras no encajarán", dijo.

Es un sentimiento compartido por otros dos desarrolladores de juegos con los que Business Insider ha hablado esta semana. 

"Compras un Big Mac en McDonald's, pero no puedes ir a Burger King y decir: 'Ahora hazme un Big Mac'", resume el director de operaciones de Bithell Games, Alexander Sliwinski, en una entrevista telefónica.

En el caso de las hamburgueserías, la cuestión está clara: el hecho de que ambas hagan hamburguesas no significa que haya que esperar que la hamburguesa de una sea la misma que la de la otra. No son interoperables, y la interoperabilidad es fundamental para que se pueda trasladar sin problemas una pieza de un juego a otro.

¿Por qué, por ejemplo, una camiseta que compraste para un personaje en un juego no podría transferirse a tu personaje en otro juego? ¿No es solo una imagen?

La respuesta corta es no, es mucho más que una imagen, y todas las partes que componen esa camiseta son específicas del juego para el que se hizo.

Por qué el metaverso será más grande de lo que piensas, aunque no vaya a ser realidad en un futuro cercano

"Todo lo que se ve en un juego es, en realidad, docenas de activos que trabajan juntos según lo definido por el código", explica el creador de juegos y consultor Rami Ismail a Business Insider. 

"Si realmente quieres llevar esa camiseta, te encuentras con el problema de que una camiseta está hecha para un personaje específico", señala. "Así que el ajuste será de una manera específica. Está animada de una manera específica. Tiene una física construida de una manera específica, de nuevo, para ese tamaño personalizado, para esa gravedad personalizada, del primer juego. Eso no se va a trasladar al segundo juego".

Estos son solo los problemas técnicos iniciales a los que se enfrenta un concepto así, dijeron, antes de tener que abordar las consideraciones legales en torno a los derechos de propiedad intelectual, por no hablar de los recursos necesarios para que todo esto funcione.

"El hecho de que algo no sea tangible no significa que alguien no lo haya hecho", señala Sliwinski.

Y, para muchos creadores de juegos, el incentivo financiero y creativo no está ahí para hacer realidad el sueño de interoperabilidad de los NFT. 

Conoce cómo trabajamos en Business Insider.