¿Debo tirar la comida si tiene algo de moho, en qué casos puedo salvar partes? Esto es lo que debes hacer según este nutricionista

Una duda muy frecuente cuando le aparece moho a un alimento es: ¿debo tirarlo entero o puedo cortar un trozo?

La seguridad alimentaria dice que siempre, por precaución, hay que tirar el alimento, ya que es muy difícil saber si el moho (o algunas de sus toxinas) se ha extendido o no, pero no se pueden tratar a todos los alimentos por igual.

Aitor Sánchez, nutricionista y divulgador tanto en redes sociales, como en diferentes medios de comunicación y autor de libros como Mi dieta cojea, Mi dieta ya no cojea o Tu dieta puede salvar el planeta ha explicado en su Instagram en qué casos se puede conservar.

6 consejos para que las frutas y las verduras duren más en verano

Asegura que dependerá de la naturaleza del alimento. Por ejemplo, si son muy acuosos como las frutas lo mejor es siempre descartar, ya que el medio acuoso facilita la transmisión de las toxinas de un lado a otro. 

En el caso de los productos más secos, sí que se podría hacer una excepción, es decir, se podría cortar la parte contaminada y un poco más como medida preventiva, así no tendrás que desperdiciar todo el producto. 

La OCU sacó una lista en la que especificaba 3 grupos de alimentos que suponían una excepción a la hora de poder consumir un alimento que tuviera moho. Estos son:

1. El jamón y los embutidos curados: en el jamón, la cecina o el salchichón, es normal que aparezca algo de moho si tardan en consumirse. Raspa o retira la zona con moho y toma el resto.
2. Los quesos duros: es decir, aquellos que tienen poca humedad, como el manchego, el emmental o el gouda, se pueden comer después de quitar con un cuchillo toda la parte que rodea el moho, con una propina de 2 centímetros alrededor y por debajo de la zona afectada.
3. Las frutas y vegetales turgentes: Los vegetales de carne firme, como la zanahoria, el pimiento o el repollo, se pueden comer tras quitar con un cuchillo toda la zona alrededor del moho, incluido el mismo margen de seguridad de 2 centímetros alrededor y por debajo.

Los efectos de una intoxicación por moho, son diferentes, porque cada alimento, además del propio hongo, produce un tipo particular de micotoxina. 

Como se ha explicado previamente en Business Insider España, si se consume un alimento con una alta carga de estas micotoxinas, ya sea después de retirar la zona con moho o sin que exista esta, pueden aparecer diversos trastornos intestinales. 

Sin embargo, lo realmente grave sería la acumulación por ingesta continuada de estos alimentos que ya presentan el hongo en su capa exterior y de los que se ingiere la parte que se cree que está sana. 

Además, un apunte importante es que las micotoxinas no suelen desaparecer mediante el cocinado, como sí ocurre con la mayoría de las bacterias, como advierte la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición (AESAN).

Por eso, si tus alimentos no están en la lista de excepciones y consideras que la zona afectada es suficientemente grande, siempre la mejor opción es no comerlo.