El motivo por el que debes dar un par de golpecitos en el capó del coche antes de arrancar en días de frío

Las bajas temperaturas obligan a los conductores a ser más precavidos al volante. Conducir con niebla, lluvia o nieve puede suponer un peligro para la seguridad vial si no se toman las medidas oportunas.

Pero la llegada de la época invernal no sólo es peligrosa para los conductores: hay otras circunstancias que se deben tener en cuenta y en las que no todo el mundo piensa.

Una de ellas afecta especialmente a los animales que no tienen hogar, pues durante los días en los que hace más frío suelen buscar refugio en las calles.

El lugar preferido de muchos de ellos, sobre todo de los gatos que viven en la calle, son los vehículos que están aparcados.

Los felinos tienen la costumbre de acomodarse debajo de los vehículos, lo más cerca posible del motor,  ya que es la zona en la que pueden llegar a sentirse con menos frío gracias calor residual.

Y esto causa un problema al que seguramente te has enfrentado más de una vez: arrancar el coche cuando un gato está resguardado puede suponer un accidente fatal para el felino.

Debido a ello, cuando llega el invierno es necesario recordar un pequeño truco con el que puedes evitar esta situación que nadie desea.

La empresa pública que gestiona la ITV en Andalucía lo explica en su cuenta de Twitter: basta con propinar 2 golpecitos en el capó de tu coche antes de arrancar para que el gato se percate de tu presencia.

Con este sencillo gesto estarás salvando la vida de todos los gatos, y en general de cualquier animal, que buscan protegerse del frío acostándose debajo de tu vehículo.

Y golpear el capó no es lo único que puedes hacer para advertir a los gatos: tocar el claxon, cerrar la puerta con fuerza o permanecer atento por si escuchas un maullido son otros consejos.

Una vez hayas puesto estos trucos en práctica, Intenta esperar varios segundos antes de emprender la marcha. Los gatos a veces se toman su tiempo para abandonar el lugar.

En el caso de que el felino no pueda salir del coche, lo mejor es que te pongas en contacto con una protectora de animales o con las autoridades que correspondan, según advierten desde Mapfre.

Retirar al gato por ti mismo puede ser un error, debido al riesgo de recibir algún arañazo si lo asustas o de hacerle daño.

La compañía de seguros también explica que tu coche puede sufrir averías si no consigues que el gato se aleje, sobre todo si el animal se acomoda en un elemento mecánico importante.