Cómo dejar los antidepresivos sin sufrir recaídas, según un nuevo estudio

Un hombre tomando antidepresivos
  • Muchas de las personas que toman antidepresivos sufren una recaída tiempo después, cuando ya se consideraban recuperados.
  • Según expone un nuevo estudio, el riesgo de padecer una recaída se reduce cuando la medicación se abandona gradualmente, pero de forma mucho más lenta de lo que se pensaba hasta ahora.
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Cada vez más personas padecen depresión y ansiedad. Las enfermedades relacionadas con la salud mental son la nueva pandemia detrás de la pandemia, y es necesario conocerlas para afrontarlas.

Lidiar con los problemas de depresión es una tarea complicada y no basta simplemente con levantar el ánimo. La ayuda médica y profesional se vuelve imprescindible en la mayoría de los casos.

El tratamiento farmacológico es uno de los primeros pasos que se suele dar en un paciente que sufre de depresión; recurrir a los antidepresivos es cada vez más común.

Si has pasado por este trance seguro que sabes los efectos secundarios que provoca la medicación: somnolencia, irritabilidad, náuseas o aumento de peso son los problemas más habituales.

Sin embargo, no es lo único que hay que tener en cuenta a la hora de tomar estos fármacos. Dejarlos de forma adecuada es también de vital importancia para no sufrir recaídas en el futuro.

Así lo advierte un estudio recientemente publicado en la revista británica The New England Journal of Medicine que pretende señalar las causas más comunes de las recaídas en esta enfermedad.

Según el estudio, el 56% de las personas que toman antidepresivos acaban recayendo un tiempo después, pero esto se puede controlar abandonando la medicación de forma más lenta de lo normal.

Hay que tomarse más tiempo para dejar los fármacos

Una de las mayores preocupaciones de las personas que ya han superado una depresión es acabar recayendo.

Dejar la medicación suele ser una noticia que se recibe con alegría, ya que significa que el proceso ha terminado, pero hay que andarse con ojo en estos momentos.

En el citado estudio han participado 478 adultos de Reino Unido que llevaban al menos 2 años tomando medicación y que se sentían preparados para abandonar el tratamiento.

La investigación dividió a los pacientes en 2 grupos: en el primero de ellos las personas continuaron con la medicación, en el segundo la redujeron durante 3 meses y se les hizo seguimiento hasta un año después.

Hay que aclarar que esto último suele ser lo que recomiendan los médicos habitualmente: dejar de ingerir las pastillas poco a poco previene síntomas de abstinencia y es lo más indicado.

Sin embargo, el 56% de este grupo acabó recayendo tras dejar de tomar los fármacos aunque fuese gradualmente, y algunos de ellos apenas un par de semanas después de haberlo hecho.

De los que continuaron tomando la medicación durante un tiempo más largo, solo un tercio de ellos experimentó una recaída al dejarlas.

La conclusión del estudio es que algunos pacientes deben seguir tomando los fármacos a largo plazo, aunque llegue un momento en el que se encuentren mejor.

Cada caso es un mundo

Los autores del estudio señalan la importancia de seguir las pautas del médico en cada caso. 

"Nuestros hallazgos se suman a la evidencia de que para muchos pacientes el tratamiento a largo plazo es apropiado, pero también hemos descubierto que muchas personas pudieron dejar de tomar sus medicamentos de manera efectiva cuando se redujeron gradualmente", advierte la doctora Gemma Lewis, autora de la investigación.

"No hay una respuesta correcta, pero este estudio proporciona más información para ayudar a las personas a tomar una decisión", explica a la BBC el catedrático de psiquiatría Simon Wessely.

En cualquier caso, lo más importante es cumplir con las indicaciones del psiquiatra o especialista que haya recetado el tratamiento, además de notificarle los posibles efectos adversos que sufras.

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