La DGT advierte sobre una estafa que puede llegar a tu correo electrónico y robar tus datos personales

Si en los últimos días has recibido un correo enviado supuestamente por la DGT debes desconfiar, ya que es posible que se trate de una estafa con la que los ciberdelincuentes pretenden robar tus datos personales.

Así lo ha informado la propia DGT a través de un mensaje en su cuenta de Twitter. Tráfico ha querido avisar a todos los usuarios de este engaño que suplanta su identidad y que resulta peligroso porque es una estafa de phishing.

El correo en cuestión llega con un texto que es especialmente llamativo: "Paga tu multa: detectamos en nuestro sistema un registro de multa de tránsito no pagada. Para mayor información sobre la multa, descargue la solicitud en detalle".

De este modo, el usuario piensa que tiene una sanción pendiente de pago con la DGT, y es posible que caiga en la trampa por la buena fe de querer pagar la multa y así librarse de un posible recargo. 

Sin embargo, al picar en este engaño se accede a una página web falsa en la que se pide rellenar los datos personales. Es importante que no llegues nunca a este punto, ya que estarías poniendo en bandeja el uso de tus dispositivos y el uso de tus datos sensibles a los ciberdelincuentes.

 Este tipo de estafas son habituales y no sólo se hacen pasar por la DGT. El pasado mes de mayo, CaixaBank y Banco Santander alertaron sobre un timo similar que también suplantaba su identidad con fines delictivos.

Para evitar este engaño la DGT recuerda cuál es el canal oficial para el pago de multas por internet. Sólo tienes que acceder al apartado que se facilita en su sede electrónica para el cobro de sanciones, rellenar tus datos personales y especificar el número de expediente, el importe sin reducción y la fecha de notificación de la multa.

Si quieres aprender a detectar los fraudes y evitarlos puedes seguir los consejos que ofrece la Oficina de Seguridad del Internauta (OSI):

• Comprobar la ortografía y la redacción: los correos fraudulentos suelen contener faltas ortográficas.
• Verificar que la cuenta es original: siempre hay que comprobar que el mail coincide con la empresa que lo envía. 
• Revisar la URL: puedes hacerlo pasando el cursor por encima del hipertexto y así ver el dominio al que te dirige el enlace. 
• No descargues archivos adjuntos: sólo debes descargar adjuntos si sabes que se trata de un remitente legítimo.