La adopción de la movilidad eléctrica es cada vez mayor en Europa. Los vehículos híbridos superaron por primera vez a los diésel en ventas en el Viejo Continente en 2021: 1.901.239 unidades vendidas frente a 1.901.191 de gasóleo. Si unimos los eléctricos puros de batería (878.400) y los híbridos enchufables (867.092) sumamos más de 2,5 millones de unidades, según los datos de la patronal de fabricantes ACEA.
Sin embargo, los retos que afronta el coche eléctrico son muchos y variados.
A la búsqueda de una mayor autonomía de los vehículos, que tiene que ver con la investigación en baterías, la necesidad de una infraestructura de puntos de recarga adecuada, o el abaratamiento de los precios para hacerlos accesibles a todo tipo de bolsillos, se añade un problema más: la fiabilidad.
Hasta el momento, se daba por hecho que los vehículos eléctricos, al contener menos componentes que sus rivales de combustión, tendrían una menor probabilidad de averías. Pero un estudio realizado por la organización de defensa del consumidor británica Which? revela que esto no es así.
Según una encuesta realizada entre 48.000 propietarios de coches en Reino Unido con vehículos de menos de 4 años de antigüedad, los dueños de coches eléctricos tuvieron que acudir más veces al taller que los de vehículos de combustión.
Aproximadamente el 31,4% de los dueños de coches eléctricos tuvieron que acudir a revisar alguna avería o incidencia en su vehículo, un porcentaje muy superior al de los propietarios de vehículos de gasolina (18,6%) y ligeramente por encima de los de diésel (29,1%).
Sin embargo, los vehículos más fiables según esta encuesta son los híbridos, con un promedio de averías del 17,3% entre los encuestados por esta organización británica, muy por debajo de la media global, que es del 22,3%. Los enchufables son menos fiables (27,5% de averías).
"Los conductores están dispuestos a apostar por coches más amables con el medio ambiente, pero es vital que reciban un producto de calidad. Es decepcionante comprobar que los coches eléctricos son los menos fiables", asegura Lisa Barber, editora de Which?, que reclama a las marcas "ofrecer coches fiables y más sostenibles a los consumidores".
Dos días más en volver a la carretera que un coche de gasolina
Un 8,1% de los eléctricos puros propiedad de conductores británicos tuvieron una o más averías que les impidieron arrancar en un momento dado, mientras que solo un 3,5% de los vehículos de gasolina sufrieron ese tipo de fallos y el 6,9% de los diésel. Los híbridos rebajan ese porcentaje al 5,6% y los enchufables al 5,4%.
Los problemas más habituales para los conductores de eléctricos están relacionados con el software de sus vehículos, no tanto con las baterías o los motores, según esta encuesta.
Una vez llevado el vehículo al taller, los eléctricos puros tardaron de media unos 5,1 días en volver a la carretera según esta encuesta, frente a los 3 días de los de gasolina, los 3,8 de los diésel, los 3,9 de los híbridos y los 4,2 de los enchufables.