Los espectadores extranjeros no podrán asistir a los Juegos Olímpicos de Tokio por la pandemia de COVID-19, según los organizadores

Zahra Tayeb,
BI

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  • Los espectadores extranjeros no podrán asistir a los Juegos Olímpicos de este año en Japón, según han determinado los organizadores.
  • Los juegos deberían empezar en julio, tras haber sido reprogramados el año pasado. 
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Los espectadores extranjeros no podrán asistir a los Juegos Olímpicos de verano en Japón, según ha confirmado este sábado el comité organizador.

El evento de Tokio, que debe arrancar en julio, estaba previsto inicialmente para 2020, pero se pospuso por la propagación de COVID-19 en todo el mundo.

La preocupación por las medidas de seguridad ha aumentado en los últimos meses, dado que la pandemia aún no ha terminado.

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Algunos medios de comunicación japoneses habían anticipado la decisión de prohibir la entrada a los aficionados internacionales, adoptada por el Comité Olímpico Internacional, el Comité Paralímpico Internacional y los Gobiernos nacionales y locales de Japón.

Se ofrecerán reembolsos a quienes ya hayan comprado entradas. El director general del Comité Organizador de Tokio, Toshiro Muto, ha confirmado que habrá que compensar unas 600.000 entradas olímpicas y unas 30.000 paralímpicas, según informa Sky News.

De hecho, normalmente, entre el 10% y el 20% de las entradas olímpicas se venden a espectadores internacionales, según The New York Times.

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La carga económica de la pérdida de entradas puede pesar mucho en Japón. 

El país está gastando oficialmente 15.400 millones de dólares (más de 12.800 euros al cambio actual) para acoger y organizar los Juegos, pero varias auditorías gubernamentales han sugerido que el coste real puede ser el doble, según Al Jazeera.

Como parte de los esfuerzos de Japón para inhibir la propagación de nuevas variantes más infecciosas del virus, también ha prohibido todos los vuelos de entrada al país desde el extranjero desde finales de diciembre, reporta The New York Times.  

Sin embargo, estos protocolos se han suavizado para los atletas olímpicos y algunos de sus acompañantes.

En enero, el 80% de la población japonesa pensaba que los Juegos Olímpicos de Tokio deberían cancelarse o retrasarse, citando los crecientes casos de COVID-19 en todo el país. Los datos más recientes muestran que hay 452.702 positivos en Japón. 

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