Pfizer y Moderna ingresaron 9 de cada 10 euros de la venta de vacunas en 2021: qué se puede esperar de las farmacéuticas este año

Vacuna de Moderna.

REUTERS/Mike Segar

De los 53.700 euros ingresados en 2021 por la venta de las vacunas del COVID-19 autorizadas en España, Pfizer y Moderna han facturado 9 de cada 10

La farmacéutica liderada por Albert Bourla, que prevé ingresos récord en 2022, facturó cerca de 32.000 millones de euros al cambio actual sólo por la venta de las inyecciones. Y Moderna, dirigida por Stéphane Bancel, más de 15.600 millones de euros —con un beneficio de unos 10.0000 millones—. 

Las 2 compañías están detrás de las vacunas de ARN mensajero, las preferidas para la campaña de refuerzo contra el coronavirus, que se ha ampliado ya a toda la población mayor de 18 años de edad residente en España.

El año de oro de las farmacéuticas detrás de las vacunas del COVID-19: las ventas superan los 53.000 millones de euros

El resto se reparte entre Johnson & Johnson (2.100 millones euros) y AstraZeneca (3,500 millones),  fabricantes de las otras 2 candidatas autorizadas en Europa, basadas en adenovirus. 

El responsable de la única monodosis ya ha anunciado que espera incrementar la cifra de las vacunas en el presente año fiscal y AstraZeneca, que ha quedado desplazada en la campaña de refuerzo y que ha vendido su candidata a precio de coste, prevé un aumento significativo de sus ingresos en 2022.

Aun así, las ventas de sus inyecciones contra el SARS-CoV-2 seguirán representando una parte pequeña —aunque significativa— de su facturación. 

Mientras, Moderna confía en que los nuevos contratos y las negociaciones pendientes para otoño de 2022 y 2023 impulsen su único fármaco en el mercado: Spikevax. Y Pfizer tiene una bala que asegura multimillonarios beneficios.

Moderna depende de Spikevax: las acciones podrían sufrir un duro golpe si no saca otro fármaco al mercado antes de 2024

Vacuna de Moderna

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Para Moderna, el año de oro de las farmacéuticas detrás de las candidatas desarrolladas contra el COVID-19, ha supuesto alcanzar el billón de euros de capitalización bursátil. 

¿Y por qué es especialmente relevante cuando Pfizer ha demostrado tener más potencial para 2022

Porque la vacuna de Moderna es su primer y único producto en el mercado. Aunque estudia otras 13 candidatas, basadas en ARNm, que ofrecerían soluciones para enfermedades como el cáncer o los herpesy podrían elevar su capitalización hasta los 2 billones de euros.

Además, es la única de las farmacéuticas que realmente depende de su vacuna contra el coronavirus, comercializada como Spikevax, como muestra el siguiente gráfico:

Las vacunas no son un cheque en blanco para la empresa que lidera Stéphane Bancel. 

Los hitos científicos de la biotecnológica dispararon su cotización —principalmente entre agosto y noviembre de 2021, cuando presentó los primeros datos de eficacia de Spikevax—. 

Pero también reflejaron la incertidumbre que acecha a los multimillonarios beneficios de la biotecnológica, sobre todo cuando corrigió sus previsiones y se situó ligeramente por debajo de las expectativas de los analistas en los resultados del tercer trimestre del año

Con anterioridad, los analistas habían advertido de que, si la biotecnológica no saca productos hasta 2024, su cotización sufrirá.

"Una de sus luchas será que los inversores buscarán la próxima gran novedad", dice a Financial TimesHartaj Singh, analista senior de biotecnología de Oppenheimer.

De hecho, en 2023, según declaraciones recogidas por el medio, los ingresos y las acciones impulsadas por las candidatas podrían reducirse a la mitad

Aunque entonces todavía no se había identificado ómicron ni se recomendaban las vacunas de Moderna para inmunizar a los menores de 5 a 11 años de edad frente a la candidata de Pfizer. Tampoco se esperaban los resultados de su candidata contra la gripe que, según analistas de Morgan Stanley, podrían disparar sus acciones con los datos de la fase II. 

Pfizer tiene asegurado otro año de éxito aunque caigan las ventas de las vacunas: prevé ingresar 19.000 millones por su antiviral contra el COVID-19

Paxlovid, el fármaco de Pfizer contra el coronavirus, junto al Molnupiravir de Merck.
Paxlovid, el fármaco de Pfizer contra el coronavirus, junto al Molnupiravir de Merck.

REUTERS/Jennifer Lorenzini

Un 45% de las ventas de 2021 de Pfizer corresponden a la vacuna comercializada como Comirnaty. 

En 2022, la farmacéutica dirigida por Albert Bourla espera que las ventas de la candidata se sitúen ligeramente por debajo de lo facturado en 2021: en 27.900 millones de euros. 

La cifra podría crecer si se amplían las campañas de refuerzo o caer si se deja de administrar la candidata a los menores de entre 5 y 11 años de edad —para los que ha demostrado una eficacia de tan sólo el 12%—.

La caída de las ventas de las vacunas —que podría estar en torno al 11% respecto a 2021—, la consolidación de las candidatas en el mercado o la nueva competencia (Novavax) no tienen por qué hacer temblar a Pfizer. 

Al menos no a corto plazo, o este año fiscal, tal como muestra el siguiente gráfico: 

La farmacéutica confía en ingresar por su nuevo fármaco contra el COVID-19, comercializado como Paxlovid, un 59% de lo que facturó por Comirnaty. 

La cifra equivaldría a unos 22.000 millones de dólares o 19.000 millones de euros al cambio actual. 

Por lo que, aunque espere facturar un 12% menos por Comirnaty respecto a lo que ingresó en 2021, Paxlovid serviría de colchón.

Vamil Divan, analista de Mizuho Americas, ha asegurado a The Wall Street Journal que Pfizer podría superar las previsiones tanto para las cifras de los fármacos relacionados con el COVID-19 como para el conjunto de sus ingresos.

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