Esta web te ayuda comprender los términos de las políticas de privacidad a través de etiquetas de colores

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Cuando navegamos por Internet o nos damos de alta en alguna página web es habitual encontrarnos con advertencias que nos avisan sobre el uso de cookies o que sea necesario firmar el acuerdo sobre términos y condiciones de uso que se hará de nuestros datos. Pero en la mayoría de casos simplemente marcamos la casilla que indica "estoy de acuerdo con las condiciones", y seguimos navegando.

Y con la entrada en vigor el próximo mes de la nueva normativa europea sobre privacidad en la red, parece que esto no hará más que empeorar, y el usuario se encontrará mientras navega con una pesadilla de interminables documentos de aceptación.

Los términos de servicio por lo general suelen ser largos, aburridos y sobre todo farragosos. Bien por no invertir todo el tiempo que requieren, bien por desconocimiento de términos y conceptos legales, la mayoría simplemente acepta y confía en las buenas intenciones de la empresa. Y es solo, quizá, cuando escándalos como el de Facebook y Cambrigde Analytica saltan a los medios que uno piensa en el uso que se puede estar haciendo de sus datos.

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Para acabar con esta actitud y facilitar el conocimiento generalizado sobre las condiciones de acuerdo de un sitio web que estamos dispuestos a firmar Terms of Service; Didn’t Read (Términos de Servicio; No los Leí) —abreviado como ToS;DR—,  clasifica las políticas de privacidad y las condiciones de uso de los sitios webs. Desde Muy Buena a Muy Mala, a través de sus etiquetas de colores un usuario puede de un solo vistazo, tener una idea clara sobre lo que puede estar aceptando.

La Wikipedia de las condiciones de uso en internet

El proyecto veía la luz por primera vez en 2012 de la mano de Chaos Communication Camp, un encuentro para hackers que se celebra en Alemania. Allí, sus fundadores, Hugo Roy, estudiante de derecho, Michel de Jong, programador y Jan-Christoph Borchardt, diseñador, llevaron su idea sobre intentar abreviar las condiciones de uso de los sitios webs para un mejor entendimiento por parte de los usuarios.

El festival les permitió visualizar de una forma más concreta cómo podría funcionar ToSDR y decidieron apostar por el proyecto. De esa forma Borchardt, inspirado en la etiqueta energética de la UE creó una escala codificada por colores para mostrar qué servicios tenían los términos más fáciles de usar. Una vez creadas las clasificaciones se pusieron manos a la obra dando vida a Terms of Service; Didn’t Read, "un colectivo de usuarios que se organizan para debatir y calificar y tratar de llegar a un acuerdo sobre lo que es bueno y lo que no" en materia de derechos de privacidad en internert, puntualizaba Roy al medio Wired.

El objetivo de ToSDR es sencillo: ayudar a la gente a mantenerse informada de la manera más sencilla posible de sus derechos en Internet. Para ello este proyecto utiliza las etiquetas creadas que clasifican el nivel de riesgo que  los términos y condiciones de las políticas de privacidad de los distintos sitios web pueden conllevar.

"Los términos del servicio a menudo son demasiado largos para leer, pero es importante entender qué hay en ellos "ya que los derechos en materia de online de las personas dependen de estos y la mayoría de veces no somos conscientes de lo que esto implica", declaran desde la propia web.

La clasificación utilizada por ToSDR va desde el verde de la Clase A para los mejores términos y condiciones de uso hasta el rojo de la Clase E, para aquellos términos que plantean dudas muy serias. La idea es que consultando su base de datos y de un solo vistazo cualquier persona pueda hacerse una idea del tipo de condiciones y políticas que van a aceptarse.

Etiquetado de ToSDR.
Etiquetado de ToSDR.

El sistema para crear esta evaluación tiene un funcionamiento muy parecido al de Wikipedia. Los contribuyentes de la web revisan los términos de servicio de los distintos sitios y los dividen en cláusulas más concretas que pueden ser analizadas y comparadas. Transferencia de datos a terceros; aviso de cambio de condiciones; posibilidad de abandonar el servicio y borrar los datos son solo algunos de ellos.

Tras estas valoraciones se les asigna una puntuación con una insignia: + Bueno, - Malo, × Bloqueador, o → Neutro. Una vez que un servicio tiene insignias suficientes para evaluar la imparcialidad de sus términos para los usuarios, es cuando este recibe la etiqueta en función de su puntuación promedio.

En caso de no contar con datos y revisiones suficientes para poder ofrecer clasificación sólida, entonces un sitio web es etiquetado como "No clasificado aún". Una etiqueta que por el momento llevan casi todas las webs que aparecen en la base de datos, entre ellas nombres tan importantes como Facebook o Amazon. En cuanto a gigantes de internet conocidos por todos que sí han sido clasificados, Google cuenta con una etiqueta Clase C, y YouTube incluso más baja, Clase D.

Relanzamiento y futuro de de ToSDR

Pero no todo resulta tan fácil como parece a primera vista. La web tenía sus lagunas y sus pormenores y es por ello que a pesar de contar con el interés y la atención que cualquier proyecto necesita en sus inicios quedó pausada. La respuesta que recibieron fue numerosa y el grupo que los tres fundadores crearon en Google comenzó a recibir tal interacción, que no había forma de gestionar todo aquello y se optó en un primer momento por abandonarlo poco a poco.

Ahora a través de una nueva plataforma que verá la luz el próximo mes de mayo— coincidiendo con la entrada en vigor del Reglamento General de Protección de Datos (RGDP) propuesto por la UE. —  ToSDR regresa a su actividad. En este tiempo el equipo ha crecido y gracias ello se ha podido contar con una versión más funcional y estable de la web.

Las nuevas incorporaciones han facilitado el desarrollo de una plataforma, Phoenix, que facilita el envío y la búsqueda de información en la base de datos de ToSDR y según informan desde The Wired,  el equipo anda inmerso en el desarrollo de una herramienta  llamada ToSBack capaz de rastrear los términos de servicio que cambian con el tiempo para darlo a conocer a los usuarios.

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Pero las valoraciones recogidas en esta web deben ser consideradas en su justa medida. Detrás de ToSDr no hay por el momento una potente tecnología basada en algoritmos capaces de recorrer todas las páginas de acuerdos y condiciones de uso y clasificarlos en base a unos patrones. Se trata de una serie de  personas dispuestas a entregar su tiempo y esfuerzo que conlleva realizar estas valoraciones.  A veces pueden malinterpretar mal una cláusula o enviar análisis incompletos.

Como se advierte desde la propia plataforma no pueden ser considerados un recurso legal. Su objetivo sigue siendo crear una base de datos de fácil manejo que sea capaz de hacer entender a los usuarios los riesgos que asumen en cada servicio y sitio web que sea incorporado al registros. Y sobre todo generar un espacio de debate activo en torno al tema de la privacidad y los derechos de las personas en internet.

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