La fórmula del saludo perfecto para que un email profesional triunfe (y las claves para no meter la pata)

A la hora de escribir un correo electrónico, hay varios puntos a tener en cuenta. Desde captar la atención del receptor con un asunto potente a saber estructurar la información, proteger la privacidad o adaptar el lenguaje al destinatario de la forma más adecuada posible. El saludo en un email es un elemento indispensable.  

Escribir mal el saludo de un correo electrónico profesional puede provocar que nunca recibas respuesta o pierdas oportunidades laborales, colaboraciones y sinergias positivas. 

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Debes cuidar la forma en la que te diriges a la persona que recibirá tu email. El saludo es la primera cosa que influye en la percepción del mensaje, por lo que es importante trabajarlo a través de las pautas más recomendadas por los expertos 

En primer lugar, importa el grado de confianza que tengas con el destinatario. Si es un compañero de trabajo, amigo o conocido puedes permitirte ciertas licencias, pero si es un desconocido, superior o experto, no te pases de la raya.

Aquí encontrarás las mejores fórmulas para saludar en un email profesional. Y también de aquellas que no debes utilizar si quieres recibir una respuesta positiva. 

Hola + nombre

Se trata de un saludo universal para el email que resulta obvio, pero que no todo el mundo utiliza. Es mucho mejor tirar de este esquema simple que utilizar saludos excesivamente formales o fórmulas de cortesía forzadas.

Es elemental, amable, educado y familiar y como ventaja añadida, te permite personalizar el mensaje. 

Saludos

Empezar un email de esta manera no es nada recomendable. Te posiciona como desconocido, pone distancia y queda frío e impersonal. Aunque desconozcas el nombre del receptor del mensaje, decántate por otro tipo de saludo. 

A quien sea de interés

La clave que debes tener en cuenta para la apertura de un email es que la atención depende mucho de la personalización. Si dejas entrever con un saludo como este que te da igual quién reciba tu mensaje, parecerás distante y errarás. 

Estimado/a + nombre

No conviene dirigirse de este modo a alguien que no te conoce o con el que no tienes confianza, ya que puede dar impresión de poca profesionalidad. 

Estimado/a Sr. / Sra.

Este tratamiento demasiado formal y sin haber averiguado el nombre de la persona a la que te diriges tampoco es un buen saludo por email. Si añades el apellido a continuación tampoco mejora. 

Querido/a + nombre

Es similar a la anterior, pero mucho más informal. Si el destinatario no te conoce, deberías tener claro que es una licencia fuera de lugar. 

Sr / Sra + nombre / apellido

Es una fórmula forzada para un desconocido, resta personalización y además, parece una notificación oficial por parte de una empresa y organismo público o incluso llega a infundir gravedad, como si fueses a dar una mala noticia. 

Hola

Usar este saludo universal por email sin que esté seguido por el nombre del receptor tampoco es aconsejable. Puede transmitir falta de interés y exceso de informalidad. Es mejor que averigües como se llama. 

Buenos días/tardes

No sabes a qué hora del día recibirá o leerá el receptor tu email, así que salvo que el correo electrónico se dirija a alguien que sabes que lo va a leer al rato, desdeña su uso.

Nombre de pila

Usar directamente el nombre de pila en un primer email que le mandas a un desconocido es poco profesional. Con un hola delante queda mucho mejor.

Nombre mal escrito

Las faltas de ortografía o los errores en el nombre se pagan caro. Fíjate bien a la hora de escribir  nombres extranjeros, atípicos o en otros idiomas para no perder profesionalidad. 

Señores

Aunque en castellano se use el masculino genérico para designar a un colectivo, es mejor una fórmula neutra como "Hola a todos" si vas a comunicarte con un grupo de personas y no las conoces. 

Apodos y otras fórmulas erróneas

Nada de coloquialismos como apodos, interjecciones o expresiones de bromas. Muchísimo menos si no conoces de nada a tu destinatario, que huirá despavorido de tu mensaje.