Estos 16 coches se adelantaron a su tiempo, pero pocos de ellos tuvieron éxito

Vicente Cano
Lamborghini Miura.
Lamborghini Miura.

No todos y cada uno de los modelos que aparecen en el mercado cada año son en realidad como estos 16 coches adelantados a su tiempo. Y es que casi siempre en el automóvil triunfa la máxima de no tocar lo que funciona, por lo menos en exceso no. 

De hecho, esta ha sido la receta del éxito de marcas como Volkswagen en las últimas décadas, y no porque los alemanes no innoven, sino porque han aprendido a la perfección cómo escalar los avances en unos coches que suelen tener un diseño continuista. 

Demasiado rompedor es una expresión que suele significar fracaso en el automóvil, salvo en casos contados. Pero otras veces, que un coche adelantado a su tiempo no prospere se debe al condicionante fundamental para introducir cualquier nueva tecnología en el mercado: disponibilidad. 

Así, por ejemplo, en el Chrysler Crown Imperial de 1953 ya se vendía en su opción más equipada con teléfono a bordo. Sin embargo, este súper gadget de época para coches no lo hizo triunfar porque en realidad no existía una solución técnica que lo hiciera funcionar como es debido. 

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También, en esta lista de coches adelantados a su tiempo, hay ejemplos de lo contrario. Como el del Citroën 2 CV, que se desarrolló justo antes de la II Guerra Mundial con un chasis y carrocería de aluminio. Sin embargo, tras la contienda, la mayor parte de las reservas de este metal estaban en la URSS y hubo que volver a concebir el 2 CV para hacerlo de acero, aunque aún así fue un éxito instantáneo. 

Lohner-Porsche de 1900

Lohner Porsche
Lohner Porsche

El primer coche que Porsche fabricó fue un híbrido y aunque no tuvo el éxito que Ferdinand Porsche hubiera esperado. Y eso a pesar de que las innovaciones del coche que fabricó para Lohner todavía hoy suenan actuales: motores eléctricos embutidos en las ruedas, una transmisión de baja fricción o un sistema de recuperación de energía de la frenada que se almacenaba en baterías de plomo.

Chrysler Airflow de 1934

Chrysler Airflow.
Chrysler Airflow.Chrysler

En 1930, Chrysler construyó uno de los primeros túneles de viento de la historia para probar coches a escala. El resultado llegó en 1934 con el Airflow. Demasiado rompedor, no tuvo éxito, pero inspiró otros modelos producidos por Toyota, Volvo o, incluso, el Volkswagen Beetle. La aerodinámica tardó, pero acabó asentándose en la automoción. 
 

Citroën 2 CV de 1936

Citroën 2CV.
Citroën 2CV.

La mayor parte de las innovaciones originales del Citroën 2 CV —salvo su concepto en sí— se basaron en la alta disponibilidad que había de aluminio en los años 30. Tras la Segunda Guerra Mundial, la mayoría de las reservas del metal quedaron tras el telón de acero y el 2 CV tuvo que engordar 200 kg. Aún así, gracias a su revolucionario y funcional diseño y a una suspensión que lo hacía válido para todo tipo de caminos en una Europa arrasada por la guerra, este coche adelantado a su tiempo sí fue un éxito.
 

Tucker Torpedo de 1948

Tucker Torpedo.
Tucker Torpedo.

Las 150 unidades de su Torpedo que Preston Tucker consiguió fabricar llevaban motor de inyección, cinturones de seguridad, parabrisas laminado, faro delantero direccionable, marco de seguridad en el habitáculo reforzado con una barra antivuelco y un panel de instrumentos situado en la línea de visión con la carretera entre otra docena de innovaciones. 

Muchas se le quedaron fuera por falta de presupuesto a este ingeniero de Michigan cuando lanzó uno de los coches más innovadores concebidos jamás en 1948. La magnífica película que, en tono de epopeya, sobre él filmó Francis Ford Coppola en 1988 arroja como una sombra la otra de las condiciones para triunfar que debe tener una innovación: que no te pases de rompedor o todo puede volverse contra ti. 

Chrysler Crown Imperial de 1953

Chrysler Crown Imperial.
Chrysler Crown Imperial.

En los años 50, los fabricantes de EEUU hicieron ejercicios de extravagancia como hacer coches con motor de avión. El Chrysler Crown Imperial era, sin embargo, no un prototipo, sino un modelo que se comercializaba aunque su público eran las élites del país y fue llegado a usar por el Presidente de EEUU. Quizá, la unidad de Dwight D. Eisenhower sí estaba equipada con el primer teléfono de la historia dentro de un coche y quizá el suyo funcionara debidamente, pero sería el único porque la tecnología de la época no permitía tales filigranas con facilidad. 
 

Mercedes 300 SL de 1954

Mercedes 300 SL.
Mercedes 300 SL.

El sistema de apertura de alas de gaviota es por lo que el Mercedes 300 SL será recordado eternamente. Quizá, también por haber sido el coche favorito de Pablo Picasso, a pesar de que el pintor de Málaga jamás condujo. Sin embargo, el Mercedes 300 SL de 1954 no está aquí por eso, sino por ser el primer coche de producción de la historia que montó un motor de inyección. 
 

Citroën DS de 1955

Citroën DS.
Citroën DS.

Su diseño es único, eterno, pero lo que hace del Citroën DS uno de los coches adelantados a su tiempo y más importantes del siglo XX fue su revolucionaria suspensión hidroneumática. Era un modelo caro que sufrió muchos cambios, pero sentó la fama de marca innovadora para siempre en Citroën
 

Lamborghini Miura de 1966

Lamborghini Miura.
Lamborghini Miura.

En 1966, el Lamborghini Miura fue el primer coche con un motor central montado en posición transversal. Casi inconducible, desde entonces, todo deportivo que se precie ha sido un coches de carreras llevado a producción, pero este fue el primero construido así. Y eso que el día de su presentación, nadie había comprobado todavía si el motor V12 cabía debajo del capó del Miura.  
 

Volvo 240 de 1974

Volvo 242 prototipo de seguridad.
Volvo 242 prototipo de seguridad.

Cuando Volvo lanzó el 240, la NHTSA —la DGT de EEUU— compró una serie de unidades para realizar crash test. A partir de sus resultados sentó los nuevos estándares de seguridad con los que fueron analizando cada nuevo modelo que ha llegado a su mercado desde entonces, hasta el presente. El modelo incorporaba un chasis con deformación programada para mitigar los impactos, la primera dirección colapsable —que no entra en el habitáculo durante un choque frontal— e, incluso, una pequeña caja negra para analizar los accidentes a posteriori. Tantas novedades acumuló esta especie de prototipo llevado al mercado que los suecos decidieron no cambiar casi nada en este modelo hasta 1993.
 

Honda Civic CVCC de 1975

Honda Civic CVCC.
Honda Civic CVCC.

Fue el primer coche de la historia en montar un sistema de inyección estratificada de serie, que le hizo inaugurar el segmento de los coches verdes. Para los que no son ingenieros mecánicos, la inyección estratificada es un sistema que nebuliza la gasolina en diferentes fases de la ignición para conseguir que tanto esta como el oxígeno que hay en la cámara se quemen mejor y generen menos residuos. Hoy todos los coches equipan esta tecnología. 
 

AMC Eagle de 1979

AMC Eagle.
AMC Eagle.

Este coche fue verdaderamente un adelantado a su tiempo. El AMC Eagle no introdujo grandes innovaciones técnicas, pero fue el primer crossover de la historia. Así de simple, además, tenía tracción 4x4. Seguramente, si hubiera aparecido 20 o 30 años después, habría sido un éxito, pero en los 80 sus ventas nunca hicieron a su compañía apostar fuerte para mejorar su enorme consumo de combustible o los problemas de fiabilidad de su tracción. 
 

Audi quattro de 1980

Audi quattro.
Audi quattro.

La idea del ingeniero Jörg Bensinger de llevar la tracción del Volkswagen Iltis militar a un coche de producción se convirtió en el Audi quattro de 1980. Era una tecnología cara, pero el éxito en competición del quattro le dio un prestigio que hizo que su salto al mercado fuera más sencillo. El quattro de 1980 fue además el primer turismo 4x4 en estar unido a un potente motor turbo. Hoy, más del 30% de los todos los Audi llevan tracción quattro.

DeLorean DMC-12 de 1981

DeLorean DMC-12.
DeLorean DMC-12.

El DMC-12 fue el coche con el que John Z. DeLorean, que había llegado casi a presidir GM, le dijo a la industria del automóvil por completo: "qué mal has hecho las cosas hasta ahora, espera y mira cómo hago esto que le da mil vueltas a lo tuyo". Y en su concepto, el DeLorean era un coche verdaderamente rompedor, lo malo fue que como le pasó a Tucker, muchos de sus avances tuvieron que quedarse por el camino a causa de los problemas financieros de la compañía. 

Solo se hiceron algo más de 8.000 unidades de este mítico coche de los 80 con carrocerí fabricada en fibra de vidrio, puertas de alas de gaviota y que todavía hoy tiene un aspecto moderno gracias al espectacular diseño creado por Giorgietto Giugiaro. 

Mercedes Clase S de 1981

Mercedes Clase S.
Mercedes Clase S.

El Mercedes Clase S de principios de los 80 fue el primer coche de la historia que incorporó airbags de serie. Y no unos airbag cualesquiera, puesto que este invento salvavidas ya se había incorporado a modelos de EEUU en los 70. Sin embargo, la electrónica de entonces no estaba suficientemente desarrollada como para controlar el despliegue de la bolsa de aire sin que esta dañara gravemente al conductor. Cosa que hoy a veces todavía pasa. 
 

Renault Espace de 1984

Renault Espace.
Renault Espace.

En 1984 surgió una nueva categoría de vehículos a la vez a uno y otro lado del charco: el monovolumen. En Europa, el primero fue el Renault Espace que, al principio, tuvo poco éxito, pero cuyas ventas fueron en aumento. Si preguntas a un norteamericano por el primer MPV, sin duda, te dirá que fue el Dodge Caravan/Chrysler Voyager. Aunque el Espace fue casi al completo desarrollado por Matra, finalmente lo comercializó Renault, que introdujo el primer interior modulable.
 

GM EV1 de 1996

GM EV1.
GM EV1.

La historia del coche eléctrico comienza en el XIX, pero si hay un modelo que en el siglo XX marcó un antes y un después fue el GM EV1. El coche eléctrico puro lanzado por GM en los 90 fue un experimento masivo: se fabricaron más de 1.000 unidades en sus dos generaciones hasta 1999, que se entregaron a otros tantos usuarios que pagaban entre 400 y 550 dólares al mes para conducir un coche eléctrico de solo 150 km de autonomía. En 2003 el proyecto se canceló y, no sin polémica, GM retiró todos los EV1 y los convirtió en chatarra
 

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