Estos son los efectos negativos de la cerveza que debes conocer

La cerveza se lleva considerando una de las bebidas alcohólicas menos peligrosas para el cuerpo. Sin embargo, eso no significa que esté exenta de riesgos, y es que si se consume de forma descontrolada también puede suponer un peligro para la salud.

Alrededor de esta bebida se han ido formando todo tipo de mitos sobre los efectos que tiene para el organismo. Quizás sea para dejar de lado las desventajas que posee esta bebida tan consumida en todo el mundo. Esto es lo que debes saber de la cerveza.

Desventajas de la cerveza

Si uno de tus objetivos actuales es perder peso, los efectos que tiene beber cerveza no te van a ayudar mucho, así que escoge una variedad que sea baja en calorías para no sabotear tu propio progreso. Porque sí, la cerveza puede hacerte engordar y hacer que tires por la borda todos tus progresos.

Además, como pasa con cualquier bebida alcohólica, consumirla en exceso puede suponer un riesgo para la salud. Se recomienda que los hombres no consuman más de dos copas al día, mientras que las mujeres no pueden beber más de una, según las pautas establecidas por el Departamento de Agricultura de Estados Unidos.

Esa cantidad es la perfecta para disfrutar de los beneficios de la cerveza sin poner en peligro tu bienestar. No se pueden dejar de lado las consecuencias que puede traer a largo plazo esta bebida. Muchas enfermedades están relacionadas con el consumo excesivo de alcohol. Desde problemas cardiovasculares hasta diferentes formas de cáncer.

Ojo con las cañitas del bar: esto es lo que le pasa a tu cuerpo si bebes cerveza todos los días

Beneficios que aporta la cerveza

No todos los efectos que produce la cerveza son negativos. Es importante señalar que esta bebida también aporta ciertos beneficios a la salud (siempre que se modere su consumo).

El vino es considerado la bebida alcohólica más saludable gracias a sus compuestos de polifenoles, que ayudan a prevenir algunas enfermedades, pero una ventaja de la cerveza es que también contiene estos compuestos químicos. Solo que las cantidades son inferiores.

Aunque beber cerveza muy de vez en cuando, sin pegarse atracones, puede reducir el riesgo de padecer una enfermedad cardiovascular, existen muchas otras maneras de proteger la salud que no implique bebidas alcohólicas. Así que podría decirse que la cerveza no es buena ni mala. Quien marca la diferencia es quien la consume.