Evitar otro fracaso como en Andalucía: expertos confirman tras ver el debate sobre el estado de la nación que Sánchez "ya está preparando las elecciones"

Pedro Sánchez, antes de una conferencia de prensa en 2021.
Pedro Sánchez, antes de una conferencia de prensa en 2021.

REUTERS/Javier Barbancho

  • Las últimas elecciones autonómicas en Castilla y León y en Andalucía han dejado un sabor amargo de boca a los socialistas.
  • El debate sobre el estado de la nación, el primero en 7 años y en un contexto difícil, se ha convertido en la puesta a punto de un presidente Sánchez que ya piensa en 2023.
  • A pesar de la inflación y la difícil tesitura económica, el mandatario protagoniza un 'giro progresista' que aplauden sus socios y busca movilizar desde ya a su electorado.
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Las crónicas sobre las dos primeras jornadas del debate sobre el estado de la nación arrojan de forma casi unánime una idea: el Gobierno ha dado un giro de timón "progresista", como enunciaron los miembros del socio minoritario del Ejecutivo, Pablo Echenique y Jaume Asens, de Unidas Podemos y En Comú Podem.

Entre expertos en comunicación política se desprenden también otras ideas. Pedro Sánchez y el PSOE ya tienen la vista puesta en el año que viene. 2023 será un curso con varias citas electorales. Municipales, autonómicas en varias regiones, y sobre todo elecciones a Cortes Generales.

Superado el ecuador de la legislatura, el reloj hasta la apertura de colegios ya ha iniciado su marcha atrás. Y los últimos sondeos demoscópicos, como el publicado hace unas semanas por 40db para El País y la Cadena Ser, apuntan que el principal partido de la oposición, el PP, ya superaría al PSOE en estimación de voto.

Nuevos impuestos a eléctricas y bancos, más becas y trenes gratis: todas las medidas que Sánchez ha anunciado en el debate sobre el estado de la nación

En este contexto también hay que destacar la presentación de Sumar, la nueva plataforma de Yolanda Díaz que aspira a convertirse en un "movimiento ciudadano" antes que en una plataforma netamente electoral. Así lo explicó la propia vicepresidenta y ministra de Trabajo en una entrevista con el diario El País el pasado fin de semana.

Pero, ¿qué ha anunciado específicamente Sánchez en su primera intervención en el debate sobre el estado de la nación? Esencialmente, nuevos complementos a becas al estudio, abonos a trenes de Cercanías o Media Distancia de Renfe completamente gratuitos entre septiembre y diciembre, así como dos nuevos impuestos a las eléctricas y a la banca para 2022 y 2023.

Precisamente estos dos últimos gravámenes, que podrían llegar a recaudar 7.000 millones de euros de ambos sectores en los próximos dos años, fueron avanzados por el propio presidente del Gobierno después de denunciar que "los beneficios caídos del cielo" que ya están percibiendo las eléctricas no caen en realidad del cielo: "salen del bolsillo de los ciudadanos".

Estas son algunas de las medidas que no solo han sido tildadas "de izquierdas", sino que además han sido efusivamente celebradas por las formaciones progresistas del Hemiciclo, desde Unidas Podemos a Más País, las cuales integrarán presumiblemente la confluencia que ahora organiza Díaz.

Reivindicar su gestión, pero también ampliar el espacio a su izquierda

Yolanda Díaz, vicepresidenta segunda del Gobierno y ministra de Trabajo y Economía Social.
Yolanda Díaz, vicepresidenta segunda del Gobierno y ministra de Trabajo y Economía Social.

Reuters

Pero qué busca Sánchez, ¿cortar el paso o ensanchar el espectro? Precisamente, con los últimos sondeos en la mano, una de las esperanzas del bloque progresista que alumbró el primer Gobierno de coalición de la historia democrática es movilizar a su electorado, lo que no terminó de suceder en las elecciones andaluzas, donde el PSOE también vio cómo el PP incluso le robaba parte del mismo.

La socióloga y politóloga Cristina Monge escribía estas líneas en una columna publicada este miércoles. "Sánchez compró buena parte de la agenda social a los partidos a su izquierda para, a continuación, situarse en una posición más intermedia, cerrándole el espacio a un PP que pretende moderarse".

"Si la estrategia triunfa, habrá dejado espacio a su izquierda para maximizar los escaños. El objetivo, por tanto, es ocupar el centro desde la izquierda, operación que, cuando se logra, garantiza la victoria, pues es ahí donde vuelve a estar la pugna", continuaba.

Xavier Pastor, profesor de Políticas en la Universitat Oberta de Catalunya (UOC) reconoce que las propuestas que Sánchez lanzó este martes "son más de izquierdas" y le recordó a lo que ya solía hacer el expresidente Felipe González "cuando faltaba poco para unas elecciones". "Estamos en ese escenario", detalla en conversación con Business Insider España.

Para Pastor, el anhelo de Sánchez es "aumentar su popularidad". Lo consiguió con la foto con los grandes primeros ministros y presidentes de la coalición atlántica tras la cumbre de la OTAN que se celebró en Madrid hace unos días. "Lo más parecido que había hasta ahora a su cercanía con Biden era aquella foto de Aznar sentado con Bush hijo", rememora.

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Por eso, considera que lo que se vio en la Cámara Baja esta semana "es otra imagen escogida" que aprovechaba el debate sobre el estado de la nación, "que hacía tiempo que no se llevaba a cabo y tiene una cierta ritualidad". "Se ha vuelto algo muy cercano porque los ciudadanos encienden la televisión. Es lo más cercano que te permite estar de tu elector, después de los debates electorales".

Pero ante la posibilidad de que Sánchez hubiese logrado con este nuevo paquete de medidas ensanchar el espacio a su izquierda, Pastor comparte sus dudas. Primero, porque entiende que las medidas son sociales, pero no de mucho calado. Segundo, porque no escuchó mucha contrapropuesta y alternativa en el Congreso.

Y tercero, "porque los candidatos son egoístas": "Sánchez se ha demostrado como un candidato que busca gobernar solo". 

Para Ignacio Jurado, politólogo e investigador en la Universidad Carlos III de Madrid, en una coalición ante unas elecciones próximas se dan "dos dinámicas". La dinámica del socio minoritario, explica, es aquella en la que ese partido tendrá más interés en distanciarse, marcar un espacio propio y una agenda diferenciada.

"Esto ocurre menos con el socio mayoritario", detalla. "Al PSOE lo que le interesa es mostrar un Gobierno cohesionado, y estas medidas ayudan a cohesionarlo. No creo que le venga mal no diferenciarse: otra cosa es que piensen qué votos pueden ganar o perder".

A la conquista del voto de centro (desde la izquierda)

Aunque los medios han destacado en multitud de ocasiones algunas crisis entre los socios (PSOE y Unidas Podemos), es cierto que en las últimas semanas la relación entre ambas partes se había deteriorado a nuevas cotas después de que se anunciara la pretensión de Sánchez de aumentar al 2% del PIB el gasto militar. Díaz tuvo incluso que convocar la comisión de seguimiento de la coalición.

Pero aunque Podemos no será Sumar ni Sumar será Podemos, para Jurado la irrupción de esta nueva plataforma no cambiará esas dinámicas. A Pastor, de la polémica sobre el gasto militar le llamó la atención cómo Sánchez habló de "protección" y no "seguridad" precisamente en el debate sobre el estado de la nación que ha tenido lugar esta semana.

El profesor y politólogo de la UOC incide en que "desde el punto de vista comunicativo" el uso de ese concepto, el de "protección", es llamativo: "Es un concepto que está entre lo militar y lo social". Es un buen ejemplo sobre cómo Sánchez pretende conquistar ese centralismo.

Con todo, Pastor duda del calado de las propuestas que Sánchez avanzó en el Congreso de los Diputados. Sí es cierto que la gratuidad en los abonos de tren "va dirigida a un segmento muy concreto, gente con trabajos físicos, esenciales, que tienen que desplazarse, y no cuentan con un vehículo propio o teletrabaja". Sobre impuestos, "es algo más de cara a la galería".

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Con los nuevos tipos Pastor razona que ha sido casi una suerte de reivindicación de este PSOE y de este Gobierno: "En la anterior crisis se dio dinero a las entidades financieras", recuerda.

Pero a pesar de todo, "son propuestas con muy poco calado: no aportan soluciones a la gente". En síntesis, "Sánchez ya está preparando las elecciones".

Jurado entiende que el "giro" ("vamos a llamarlo así") sirve para animar al electorado natural del Gobierno, aunque el electorado de centro rechaza al Ejecutivo no tanto por su gestión como por los apoyos parlamentarios que recibe. "El electorado de centro es también sensible a la gestión, pero con estas medidas también puedes dar a entender que se sabe afrontar una situación difícil".

"Creo que sirve fundamentalmente para movilizar esas bases propias". Sobre todo, porque un electorado animado no te va a llevar a la mayoría absoluta, pero de cara a lo que suceda tras las generales de 2023, sí te puede llevar "a depender menos" de algunos socios que electores del centro parlamentario no aceptan.

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