La exposición al frío o al calor en ráfagas breves puede proporcionar beneficios para aliviar el estrés, sugiere una investigación

Las ráfagas rápidas de exposición al frío, el calor o la actividad física intensa en realidad podrían ayudar a su cuerpo a lidiar mejor con el estrés, según investigadores de la Universidad de California en San Francisco.

Los factores estresantes horméticos, como una ducha fría o un baño de hielo, pasar un rato en la sauna o hacer ejercicio como HIIT (entrenamiento de intervalos de alta intensidad) pueden aumentar brevemente el estrés biológico, seguido de un lapso recuperación y tranquilidad.

Así lo explica Elissa Epel, investigadora principal del estudio y profesora en el Departamento de psiquiatría de la Universidad de California al diario Wall Street Journal.

Existen otros tipos de estrés hormético, como el ayuno intermitente y la respiración hipóxica (consistente en privar temporalmente de oxígeno al cuerpo), que son más controvertidos y desaconsejados por muchos profesionales de la salud.

Los investigadores también están analizando la meditación, ejercicio y la polémica respiración hipóxica para comparar sus beneficios para aliviar el estrés.

El estudio se inspiró en el método Wim Hof, que implica respiración y terapia de frío

Epel dijo que su investigación surgió de su propia experiencia con el método Wim Hof, que implica la exposición al frío extremo, el yoga y la respiración.

Wim Hof, también conocido comúnmente como el Hombre de Hielo por su defensa de las inmersiones en agua helada, es el hombre detrás del método, y entre sus fieles admiradores y practicantes de la técnica figuran numerosas celebrities como Gwyneth Paltrow, Oprah Winfrey y Justin Bieber.

Epel descubrió que el método reducía significativamente su propio umbral de estrés, por lo que reclutó a Hof para que enseñara su técnica en su estudio.

Ducha o baño: qué te debes tomar en cada momento según los expertos

Hay investigaciones que sugieren que las técnicas de Hof pueden ayudar a las personas a regular sus emociones, disminuir el estrés, ayudar potencialmente con la depresión e incluso ayudar a reducir la inflamación dañina en el cuerpo, según recopila Hilary Brueck para BusinessInsider.

También se ha demostrado que la exposición al frío, como la crioterapia, activa el sistema nervioso del cuerpo y desencadena una liberación de noradrenalina en el cerebro, que ayuda al cuerpo a regular el estrés.

Para las personas que quieren comenzar a aumentar su estrés hormético, Hof recomienda darse una ducha fría todos los días, comenzando con 15 segundos y aumentando el tiempo tanto como puedas soportar.